Pixar tenía un problema. Tenía una gran idea para una nueva película: Elemental, basada en personajes del director de The Good Dinosaur, Peter Sohn, pero animar los elementos titulares de la película estaba resultando ser un problema. Después de todo, una cosa es dibujar un montón desmoronándose de tierra consciente, pero ¿cómo se captura la naturaleza etérea del fuego en la pantalla y cómo funcionaría un cuerpo corpóreo hecho de agua? ¿Se puede ver a través de él? ¿Los ojos simplemente flotan alrededor?
Si bien algunas de esas preguntas podrían ser respondidas con la suspensión de la incredulidad, los animadores de Pixar pensaron que el problema del fuego era un verdadero enigma, especialmente considerando que uno de los personajes principales de su película, Ember, supuestamente estaba hecho de esa sustancia. Tenían herramientas para crear efectos de llamas a partir de años de animaciones anteriores, pero cuando intentaban darle forma a un personaje, los resultados eran bastante aterradores, una mezcla entre el Calcifer de Studio Ghibli y el Ghost Rider de Nicolas Cage, pero de alguna manera más impactante.
“Nuestras simulaciones de fluidos de fuego son muy naturalistas y están diseñadas para imitar la realidad”, dice Sanjay Bakshi, supervisor de efectos visuales. Con un personaje como Ember, Bakshi dice que “es realmente importante concentrarse en el rendimiento facial”, pero el estudio estaba teniendo problemas para equilibrar el dinamismo del fuego con la forma y sensibilidad del personaje. Paul Kanyuk, supervisor técnico de multitudes en Pixar, dice que al principio, Ember parecía un fantasma o incluso un demonio. “Puede verse aterrador si es demasiado realista, como si tuvieras una figura humana hecha de fuego real”, explica.
Incluso si puedes reducir el aspecto aterrador, Sohn dice que aún debes crear algo que sea reconociblemente llameante.
“El fuego naturalmente es muy agitado, pero si lo ralentizas, puede convertirse en algo que se parece a un plasma”, explica. “Fue interesante compararlo con otros personajes antropomorfizados, porque todos son muy fantásticos y puedes hacer cualquier cosa con ellos. Si estás dibujando una emoción, no hay una equivalencia directa, pero todos saben cómo se ve el fuego”.
Básicamente, explica Sohn, para crear a Ember, cada toma de Elemental necesitaría un proceso de efectos especiales, algo que no solo consume mucho tiempo, sino que también es muy costoso.
Afortunadamente, Kanyuk tuvo una idea. Ha estado trabajando en animación de multitudes en Pixar desde 2005, comenzando con Ratatouille, y siempre ha luchado por encontrar formas de hacer que la ropa de grandes grupos de personas se vea bien. Mientras trataba de resolver el problema, se involucró con Siggraph, una organización comunitaria dedicada al avance de la gráfica por computadora. Alrededor de 2016, encontró algunas investigaciones del grupo sobre el uso del aprendizaje automático para perfeccionar las simulaciones de tela y ha estado tratando de dominarlo desde entonces.
Aproximadamente en 2019, Kanyuk encontró un artículo de Siggraph Asia sobre el uso de la transferencia de estilo neural (NST), que es el tipo de inteligencia artificial utilizado para hacer que una foto se parezca a una obra de Van Gogh o Picasso, para mover voxels (básicamente píxeles en 3D con volumen) en la animación, todo con el objetivo de darle a un personaje un aspecto determinado. Kanyuk pensó que NST podría ayudar a Pixar a resolver su problema con el fuego, aunque le dijo a Sohn (quien también se había unido como director de la película) que, como ocurre con gran parte del aprendizaje automático, solo había un 50 por ciento de probabilidad de que funcionara. “Le dije: ‘Te daré cinco ideas y tal vez dos de ellas funcionen’. Pero él dijo: ‘Hagamos todas'”, dice Kanyuk.
La única desventaja, por supuesto, era que utilizar ese tipo de aprendizaje automático requería una gran cantidad de potencia informática. Después de todo, realizar un proceso completo en las 1,600 tomas de Elemental sería una tarea absolutamente monumental, especialmente considerando que el proceso requería una gran cantidad de procesadores gráficos.
“Originalmente, no teníamos los recursos, así que le dijimos a [Sohn] que probablemente solo podríamos hacer a Ember en primeros planos”, dice Bakshi. Luego, Kanyuk dice que los animadores se dieron cuenta de que si estaban utilizando la tecnología en Ember, también tenían que usarla en otros personajes de fuego, para que no destacaran como una especie de mancha amorfa (y llameante).
“Los requisitos fueron aumentando”, dice Kanyuk, “así que al final logramos una aceleración de 20 veces desde cuando comenzamos hasta cuando implementamos la tecnología, aprovechando las GPUs que todos en Pixar tienen en sus computadoras. Descubrimos una forma de virtualizar la GPU y utilizar la mitad de ella durante la noche, lo que hizo que el tiempo de renderización de un fotograma pasara de unos cinco minutos a un segundo”.
Funcionó. En última instancia, Kanyuk y todos los demás involucrados en Elemental pudieron renderizar las tomas que necesitaban. Según él, Pixar todavía está “rascando la superficie” de lo que NST puede hacer, “pero estoy muy emocionado de que hayamos encontrado un caso de uso en Elemental que elevó el tipo de imágenes que podemos crear”.
Para Sohn, fue una oportunidad para hacer que la película se viera como él quería, al tiempo que creaba algo que no se parecía a nada que las audiencias hubieran visto antes. Simbolizaba, dice, una de las cosas que le encanta de Pixar: el encuentro entre el arte y la tecnología, donde esta última es una parte importante del proceso, pero solo un elemento.
“Es esta combinación del hemisferio izquierdo y derecho, y el uso de la tecnología como una herramienta para ayudar a expresar emociones”, dice Sohn, “y a su vez podemos conectarnos con la tecnología, en lugar de que se sienta como algo nuevo y frío”.
Vía: Wired
Nota del editor: No pensé que hubieran tenido tantos problemas para esta película, es una lástima que le está yendo pésimo en crítica, tengo curiosidad pero esperaré a que se estrene en Disney+
