
Meca del gaming
La relación que muchos de nosotros tenemos con la cultura japonesa es más íntima de lo que tal vez debería. Estamos hablando de un país literalmente del otro lado del mundo con costumbres y tradiciones brutalmente distintas a lo que vemos en occidente pero que de alguna manera, a través de cosas como sus caricaturas, películas, música, arte y por supuesto, videojuegos, siempre lo hemos sentido más cercano incluso que otras culturas que tenemos a la vuelta de la esquina. Si me lo preguntas, simplemente no concibo mi vida como lo es hoy en día, sin lo que se hace en la nación del sol naciente. Es algo familiar y común. Por tal motivo, el nombre de Tokyo Game Show siempre ha sido especial, pues es el lugar y momento en el que se congregan varias de las cosas más importantes para quienes amamos tanto de esta forma de entretenimiento y a pesar de que en efecto, en los últimos años el evento se ha vuelto mayormente local, no deja de ser un punto muy atractivo para cualquier entusiasta del gaming.
Hace tan solo unos días se llevó a cabo la edición 2025 del Tokyo Game Show, a la cual, tuvimos la gran oportunidad de asistir. A pesar de que si bien, simplemente no hay tiempo que alcance para ver todo lo que un evento así tiene para ofrecer, es muy fácil poder detectar el aura tan especial que se respira en el Makuhari Messe de la capital japonesa, en donde auténticos ríos de gente recorren sus pasillos para conocer por primera vez a varios de los títulos más importantes que están por llegar al mercado. En este contenido especial te quiero contar un poco justamente de cómo es la experiencia de una convención de este tamaño, misma que por cierto, tiene días asignados al público en general para que básicamente cualquiera la pueda vivir en carne propia.
Convención masiva
Tras un eterno vuelo de más de 14 horas de la Ciudad de México al aeropuerto de Narita, tocó tomar un bus hasta Makuhari, en donde por supuesto, se llevaría a cabo toda la acción. Por la propia naturaleza más residencial y corporativa de dicha zona, era fácil notar que Tokyo Game Show estaba a punto de vivir una nueva edición, esto sin mencionar que esa misma noche de nuestro arribo, los Marines de Chiba tuvieron enfrentamiento de temporada regular contra los Leones de Saitama. Seguro como sabes perfectamente, el béisbol es el deporte nacional de Japón y una de sus más grandes pasiones.
Momento de despertarse y de alguna manera, sacudirse las 15 horas de diferencia que hay en horario con México, pues Tokyo Game Show aguarda. Contrario a lo que uno podría imaginarse, tanto el proceso de acreditación como de registro en el evento, es sumamente arcaico, echando mano de correos directos y de tener que imprimir códigos QR. Como sea, el Makuhari Messe, venue principal del evento, desde muy temprano ya se veía inundado por personas listas para entrar. Verás, TGS divide sus actividades en días de “business” que solo permiten la entrada a miembros de la industria y de la prensa, y los días actividades generales en las que cualquiera puede comprar un boleto de entrada. Ingenuamente pensé que al tratarse de un día solo para miembros de la industria, la cosa estaría tranquila, pero qué equivocado estaba.
Solo para darnos una idea, en la edición de este año, Tokyo Game Show recibió a más de 250 mil asistentes para ver lo que los más de 1,300 expositores tenían para mostrar. Sí, estamos ante una convención verdaderamente masiva en la que alrededor del medio día, resultaba casi imposible caminar en sus pasillos. No quiero saber cómo se pone cuando la admisión es general. Colas de hasta tres horas se formaban para probar algunos de los juegos que se exhibían, una verdadera locura.
Lo que sí te puedo decir es que la producción de la gran mayoría de los booth que uno veía, era de primer nivel y que inevitablemente me hizo recordar los tiempos de E3 y lo muy necesaria que sigue siendo una feria de ese tamaño de este lado del mundo. Además, algo que tiene muy particular Tokyo Game Show, es que también está muy centrada en el consumo directo en lugar. Verás, toda una sección del evento, está casi completamente dedicada a tiendas de diferentes marcas que venden mercancía oficial de un montón de franquicias. Sí, resulta bastante complicado no perder el control y terminar sangrando a la cartera por lo cool que están todos estos productos.
Al igual que como cualquier otra convención de tamaño importante, Tokyo Game Show es una verdadera locura y hasta un caos por momentos. Me parece que si bien, se tiene el espacio para recibir a estos cientos de miles de personas al mismo tiempo, algo con lo que simplemente no se sabe lidiar es con los tiempos de espera. Hacer fila por más de una hora para jugar 15 ó 20 minutos, me parece que es la cosa menos práctica del mundo, pues todo tu día se puede ir fácilmente en jugar dos o tres cosas solamente. Mi consejo en este apartado si es que tienes planes de ir el próximo año, es que te informes lo más pronto posible de lo que habrá para que estés ahí temprano y de ser posible, fijar citas para que no pierdas tanto el tiempo.
Otro punto a considerar es que Makuhari está bastante alejado del centro de Tokio, más de una hora en tren para ser precisos, asunto indudablemente inconveniente para cualquiera que esté visitando el país, pues evidentemente, si vas a hacer un viaje tan largo y costoso, más vale aprovecharlo para visitar la increíble ciudad que es la capital de Japón. Pero bueno, a todo esto ¿vale la pena ir a un Tokyo Game Show? Sí, sin duda. A pesar de las incomodidades de las que te hablé, sentir la vibra que tiene un evento así en la que es considerada por muchos de nosotros la meca del gaming, es algo que sí recomendaría. Mención honorífica a la sección de indies; qué locura la variedad y conceptos de juegos que ahí se estaba exhibiendo.
¿Falta de noticias relevantes?
Indudablemente, una de las cosas que hacía tan relevante a algo como E3 o que hace tan importante a Gamescom actualmente, es que muchos publishers deciden aprovechar el momento para hacer anuncios importantes sobre sus futuros juegos y en el mejor de los casos, tenerlos disponibles en showfloor para que los asistentes los puedan probar. Una enorme desventaja que tienen Tokyo Game Show es que ocurre ya casi terminado el año y justo en medio de la temporada fuerte de estrenos, sin embargo, al menos en lo que fue este 2025, tuvimos cosas de llamar la atención como por ejemplo, un State of Play.
La confirmación de un nuevo Forza Horizon ahora ambientado en Japón o el primer gameplay de Marvel’s Wolverine, son algunos ejemplos de noticias bastante importantes dadas en el marco de Tokyo Game Show; sin embargo, creo que la propia convención pierde algo de relevancia por el hecho de que ninguno de estos dos juegos que te menciono, tenía presencia como tal en el evento. Por eso uso el término “en el marco de TGS” pues es solo eso, no es como por ejemplo, la presentación que se tiene año con año de Gamescom. Acá los organizadores de TGS tienen poco o nada que ver con que PlayStation o Xbox hayan usado estos días para tener streams especiales. Igualmente, de llamar la atención la completa ausencia de Nintendo.
Me encantaría que justamente, Tokyo Game Show fuera un momento de más consideración para hacer anuncios relevantes para la industria y que tuvieran su debut en la convención, eso creo que le daría mucha más relevancia como evento de videojuegos, pues al menos en este 2025, más allá de cosas como tener el primer vistazo a la versión de Switch 2 de Resident Evil: Requiem o un demo jugable de Ghost of Yōtei, casi todo lo que se estaba exhibiendo ya había sido presentado en otras convenciones. Claro, es muy importante entender que algo como TGS tiene gran parte de su contenido casi completamente pensado para su mercado local. La verdad es que no ves tanto extranjero recorriendo sus pasillos.
Localía
Regresando un poco al punto anterior sobre las verdaderas intenciones y disposiciones de algo como Tokyo Game Show, es que lo tenemos que entenderlo como un evento pensado casi por completo al mercado japonés. Incluso los publishers occidentales, presentan muchos de sus productos como novedades cuando ya los habíamos visto en repetidas ocasiones en Europa y Estados Unidos. Ni qué decir de varias marcas completamente locales que no tienen ningún tipo de interés por lo que suceda en nuestra parte del mundo. Recordemos que Japón es un archipiélago en el que gran parte de su idiosincracia está inclinada en ver hacia adentro de su propio territorio y poco tomar en cuenta lo que pasa fuera de él.
Como sea, te puedo decir que mi encuentro con Tokyo Game Show ha sido por demás satisfactorio. Me habría encantado que hubiera sido mucho más relevante para nosotros del lado editorial, sin embargo, por la propia naturaleza del evento y las condiciones en las que estuvimos, nos fue imposible poderte presentar más contenido de los juegos que ahí se estaban exhibiendo. Espero que este artículo especial te haya sido de ayuda para darte una idea más clara de lo que representa una convención como la que se celebra año con año en Makuhari.