Caminos que no se debieron tomar

Por ahí dicen que evolucionas o mueres. Lo que le faltó aclarar a esa persona es que los cambios, muchas veces se pueden significar una muerte mucho más rápida que apegarte a eso que en un inicio te llevó al éxito. Todd Howard y todo Bethesda Game Studios simplemente no se pudieron resistir a seguir la tendencia del multiplayer moderno y probar suerte con un juego totalmente nuevo de una de sus franquicias más emblemáticas y sobre todo, más queridas por los fans. La decisión de hacer un Fallout totalmente online y enfocado al aspecto multijugador fue osada, pero muy arriesgada, presentando un montón de ideas que en la teoría sonaban sensacionales pero que desgraciadamente, al momento de la ejecución simplemente no funcionaron. Fallout 76 es una experiencia llena de matices mayormente negativos en todos sus apartados que lo convierten en una de las grandes decepciones de este 2018.

El concepto de tener un Fallout que pudieras disfrutar con amigos y extraños indudablemente sonaba atractivo, incluso la idea de erradicar casi por completo a los NPCs podía funcionar en caso de una buena ejecución, sin embargo, al final se nos presentó una experiencia dentro de este universo que se ve fuertemente afectada por los caminos que se tomaron en términos de diseño, esto claro, por más que todo el tiempo se nos está recordando que estamos dentro de un nuevo juego de esta fantástica serie. Sumado a todo lo anterior, la enorme cantidad de problemas técnicos y de desempeño, terminaron haciendo que mi tiempo con Fallout 76 fuera mucho más frustrante, incómodo y desesperante, que placentero. 

Es una verdadera pena que incluso después del tiempo previo que tuve la oportunidad de vivir con Fallout 76 hace unas semanas, sintiera que todo podía salir bien, pues te repito, había mucho potencial en los conceptos que el equipo desarrollador ponía sobre la mesa. La cosa aquí es que como te decía, lo que planeas y visualizas en tu mente, no siempre funciona en la práctica, además de que claramente, el juego requería de mucho más tiempo para poder estar listo y así, poderse llamar versión final para salir al mercado. Esto que nos están dando es una beta defectuosa.

Narrativa comprometida

Al ser una franquicia de RPGs, cada una de las entregas de Fallout se han caracterizado por las grandes historias que se nos cuentan dentro de sus mundos post-apocalípticos, tal vez no como un todo, pero sí con relatos separados que podrían parecer no tan trascendentes pero que al final, se convierten en parte fundamental de toda la experiencia. Como seguramente bien sabes, en Fallout 76 se tomó la determinación de eliminar casi por completo la presencia de NPCs, esto debido a que se tenía la visión de cada encuentro con un ser humano dentro del juego, fuera justamente con una persona real. La idea sonaba bien en papel, pero terminó comprometiendo y perjudicando de manera directa la forma en la que se desarrolla la narrativa.

Fallout 76 funge como precuela a todos los demás juegos de la serie pasando por aquellas dos primeras entregas isométricas, hasta la etapa moderna con Fallout 3, Fallout: New Vegas y Fallout 4. Una vez más tomamos el papel de uno de los sobrevivientes a la guerra nuclear que devastó a América y que la convirtió en una tierra tóxica llena de seres nada deseables. En esta ocasión despertamos un día después de la fiesta del Reclamation Day en la Vault 76, refugio antinuclear ubicado en West Virginia que fue diseñado para albergar a las mentes más brillantes del país en caso de una catástrofe como la que te acabo de describir.

Es el año 2102, 25 años han pasado desde que las bombas cayeron y ahora, nos toca ser de los primeros en comenzar con la reconstrucción de la forma de vida que Estados Unidos creó después de haber ganado la Segunda Guerra Mundial. Tras crear a tu avatar, se te permite explorar un poco del lugar que fue tu hogar en las últimas dos décadas y media, esto para aprender algunas de las mecánicas de juego, equiparte con algunas provisiones para tu aventura, además de por supuesto, entrar en contexto narrativo de en qué punto estás parado.

¿Es necesario haber jugado pasados Fallout para entender la historia que se nos cuenta en Fallout 76? Creo que mayormente podríamos decir que no, pues a pesar de que este mundo está repleto de referencias a lo que habíamos visto en el pasado de la franquicia, en realidad estamos hablando de una precuela de todo, misma que por la forma y estructura que le dieron, terminó haciendo de lado en buena medida su parte de historia.

Sé que soy de los que está completamente de acuerdo en que los desarrolladores mejor enfoquen sus esfuerzos en cosas como mecánicas de juego y diseño de niveles, en lugar de crear elaborados historias, sin embargo, en este caso, las razones por las cuales no tenemos una narrativa a la altura, simplemente no dieron los resultados que se esperaban; es decir, no valieron para nada la pena.

Absolutamente todos los humanos con los que te topas dentro de Fallout 76, están siendo controlados por una persona real en otra parte del mundo, por lo que podríamos decir que la presencia real de NPCs dentro del juego, no existe. Desde que esto se anunció, hubo preocupación sobre qué pasaría con la narrativa una vez que ya estuviéramos jugando, pues parte esencial de la serie, eran las sensacionales interacciones que teníamos con estos locos personajes que habitaban el mundo. 

En Fallout 76 sí te llegas a topar con algunos NPCs que normalmente son representados por robots, computadoras, inteligencias artificiales o memorias de personas que estuvieron en cierto punto hace ya un tiempo. En un inicio pensé que esto podría aliviar la ausencia de personajes más reales dentro del juego, pero la realidad es que sí terminó afectando la experiencia. Normalmente, estas formas que tiene el juego para comunicarse con nosotros son bastante pobres, presentando relatos que se sienten sueltos y sin un verdadero propósito. Prácticamente desde que arranca tu aventura, no sabes bien por qué estás haciendo lo que haces. Claro, tienes que sobrevivir y “reconstruir América”, pero ver más allá un conflicto o descubrir por qué se desató la guerra nuclear, son asuntos mucho más complejos.

Por su naturaleza, los RPG dependen en gran medida de la historia que nos van contando, asunto que según parece, Bethesda Game Studios no entendió del todo a pesar de su basta y gran experiencia creando este tipo de obras. No me mal interpretes, en más de una ocasión sonreí al enterarme del interesante destino que cierto personaje tuvo dentro de Fallout 76, sin embargo, esa falta de interacción con NPCs a través de memorables opciones de diálogos que bien podrían ser considerados como una mecánica de juego, es una parte que indudablemente le faltó a este juego y que constantemente se siente. Por supuesto, lo anterior deriva en que nunca tengas razones tangibles de por qué estás haciendo cierto quest.

La magia de la serie está presente

Decir que Fallout 76 se sale por completo de la línea de la franquicia a la que pertenece también me parece un tanto injusto, pues en su estructura base, mecánicas de juego, composición de quests y demás elementos, la realidad es que estamos frente a una nueva entrega hecha y derecha de Fallout, esto claro, con las carencias narrativas de las cuales ya te conté, así como deficiencias técnicas sumamente marcadas de las cuales te hablaré un poco más adelante.

A pesar de ser un juego completamente online que simplemente no te dejará pasar de la pantalla de inicio si no tienes conexión constante a internet  y claro, una suscripción a Xbox Live Gold o PS Plus si estás jugando en consola, Fallout 76 se puede jugar en solitario de principio a fin, es decir, a pesar de que estarás compartiendo mundo con otras 23 personas, no es necesario que convivas con ellas de manera directa para poder progresar en la campaña u otras de las actividades esparcidas por le gigantesco mundo que se nos presenta.

Una vez más estamos frente a un RPG de acción diseñado para jugarse en primera persona, tomando como base las mecánicas de un FPS tradicional, pero sin olvidarse del género al que de verdad pertenece. Los disparos y controles de Fallout 76 se siente mejor que nunca. Cada arma cuenta con sus propio peso y atributos, estando pensada para resolver diferentes tipos de situaciones. Aquí, muchas veces haber elegido la herramienta correcta y tener sobre ti equipo de calidad, será más importante que tu precisión al momento de jalar el gatillo. Repito, es un RPG más que un juego de disparos.

Seguro que te estarás preguntando algo como “si ahora estamos en mundo compartido, ¿cómo es que funciona el V.A.T.S?” Pues bien, te cuento que Bethesda no supo bien cómo resolver este asunto, pues ahora, ya no es posible detener el tiempo para elegir en qué parte impactar a nuestros enemigos con un disparo. Esta mecánica que casi convertía a Fallout en un juego por turnos, ha perdido completo sentido, pues al no poder alentar el tiempo, solo te queda usarlo para señalar algún enemigo que se haya perdido de tu campo de visión. Otro de los sacrificios que se hicieron con tal de tener un juego completamente online.

Sobre la estructura de Fallout 76, tenemos un juego en el que los veteranos de la serie se sentirán como en casa desde el minuto uno. Además de que todas las interfaces son casi idénticas a lo que vimos en Fallout 4, la composición de misiones primarias, secundarias y terciarías, se comporta de manera muy similar. Conforme vayas explorando el mundo de Appalachia, un montón de objetivos se irán agregando a tu siempre confiable Pit Boy, esto de manera indiscriminada. En poco tiempo tendrás toda la parte superior derecha de tu pantalla llena de indicaciones y tu brújula saturada de puntos de interés. Manualmente puedes activar o desactivar estas actividades, pero te aseguro que por más experiencia que tengas con la serie, te sentirás abrumado con tanta cosa.

La composición de los quests de Fallout 76 igualmente es bastante tradicional, estando divididos en distintas etapas, cada una siendo su propio reto. En cierto momento te encontrarás limpiando una zona de Super Mutants o ghouls, y en otro estarás haciendo un examen de conocimiento para unirte a los bomberos locales. Creo que en este punto es en donde algunos están siendo un poco injustos con el juego. Entiendo perfecto que en la parte narrativa son contados los quests que de verdad aportan algo, sin embargo, su diseño y la manera en la que siempre te están pidiendo hacer cosas que genuinamente se sienten distintas, esta tan bueno como siempre lo ha sido dentro de la franquicia. Lo que te quiero decir con esto es que aquí más que en cualquier otro apartado de Fallout 76, se siente la magia y lo especial que siempre ha sido la serie, pues incluso en actividades que pueden ser consideradas efímeras, se percibe la mano de un diseñador que colocó todo en cierto lugar por una razón en específico.

Las mecánicas de supervivencia vuelven a hacer acto de presencia. Cada determinado tiempo, tu personaje sentirá sed o hambre, lo cual, impactará de manera directa en sus Action Points y por consiguiente, en su barra de estamina que te permite hacer acciones como correr o saltar. Los recursos que consumas tienen diferentes efectos, la mayoría de ellos con consecuencias negativas. Mucha del agua y comida que te encuentras, tiene radiación que afectará a tu barra de salud. ¿Tienes sed y solo cuentas con agua de un río? Pues espera que tu necesidad se vea cubierta, pero al costo de tener algo de radicación en tu sistema. Dichos efectos pueden ser contrarrestados con medicina o transfusiones de sangre, pero también pueden ser completamente evitados si te encuentras con comida o agua limpia. De igual forma, puedes contraer enfermedades por distintas vías que afectarán tus stats.

Junto con todo este tema de la supervivencia que puede ser sumamente incómodo y tedioso para algunas personas, tenemos que Fallout 76 toma muchos de los elementos de crafting y construcción que vimos siendo expandidos en Fallout 4. En este juego existen diferentes estaciones de trabajo para reciclar la chatarra que hayamos juntado, o para que construyamos nuevo equipo, armas y municiones. Mi gran queja en este apartado es que cada uno de estos tres elementos requieren de su propio tipo de estación; es decir, si te quedaste sin balas y no tienes a la mano una mesa de trabajo para crear munición, pues estás en problemas. Creo que hubiera sido mucho mejor que solo existiera un tipo de estación y ya. El sistema actual se siente rebuscado e innecesariamente complicado.

La construcción de edificaciones fue una idea que vimos siendo introducida en Fallout 4 y que al menos en mi experiencia y de quienes conozco, jamás se convirtió en algo importante. De alguna manera, Todd Howard jura que todos amamos construir dentro de Fallout, por lo que en Fallout 76, la mecánica fue llevada a un nuevo nivel con el famoso C.A.M.P. Nuestra base o campamento será bastante importante dentro de la aventura. En este lugar podrás construir extractores de recursos y elementos que te ayuden en tu duro paso por Appalachia, además de que será un punto al que podrás hacer fast travel sin costo alguno. En caso de que sea invadido o completamente destruido por otros jugadores, lo podrás cambiar de lugar y hacer una copia de lo que ya tenías, siempre y cuando hayas generando un plano de él antes. El tiempo que le dediques a este apartado dependerá de ti, pues te podría decir que casi lo puedes ignorar y sobrevivir de otras maneras.

El sistema de progresión de Fallout 76 es bastante tradicional por un lado, pero diferente por el otro. Cada que alcanzas un nuevo nivel, se te permite asignar un punto de S.P.E.C.I.A.L a cualquier de tus atributos como siempre ha pasado, solo que ahora, también se te dan cartas que hacen las veces de perks y que pueden ser cambiadas cuando quieras. Lo anterior genera que puedas modificar las habilidades o ventajas de tu personaje en cualquier momento y sin hacer tanto esfuerzo. Sin lugar a dudas, una de las más interesantes propuestas que este juego trae a la serie. El precioso arte de estas cartas hace que las quieras coleccionar aunque no te sirvan. Otro dato importante es que las puedes intercambiar con otros jugadores.

Si le quitaremos todos los problemas técnicos y nos olvidáramos de lo pobre que es su historia, la verdad es que nos quedaría un Fallout sumamente sólido que sigue las convenciones que han hecho tan importante a su apellido. Explorar algunos de los calabozos que tiene este gigantesco mundo abierto, sigue siendo una experiencia sumamente especial que normalmente se ve premiada por esa pieza de equipo o armamento que tanto habíamos estado buscando. Ponerte por primera vez un Power Armor sigue siendo un momento cumbre, además de que el sentimiento de encontrarte en un mundo totalmente devastado en el que solo dependemos de nosotros mismos, está más presente que nunca.

Más Co-op que PVP

Ahora que ya te he expuesto que en estructura e incluso en sentimiento, Fallout 76 cumple de buena forma, me parece que es un excelente momento para pasar a contarte cómo se comporta su componente central de venta, es decir, la manera en la funciona su modo multiplayer.

Como te comentaba, para poder jugar Fallout 76 es necesario tener una conexión constante a internet, además de una suscripción vigente a Xbox Live o PS Plus si juegas en consolas. No, no existe ningún componente offline y si en algún punto, tu internet se viene abajo, el juego te sacará inmediatamente. 

Comparar a Fallout 76 con algo como World of Warcraft, por ejemplo, no es tan útil, pues el nuevo juego de Bethesda se encuentra a años luz de la complejidad y solidez del MMORPG de Blizzard. De igual forma, hablar de algo como Destiny también es poco acertado, por más que el título tome ideas claras de la propuesta de Bungie como los eventos públicos que se generan de manera aleatoria.

En Fallout 76 estaremos dentro de un mismo mundo con hasta 23 personas más. Aquí, podremos formar equipos de hasta cuatro para aventurarnos en cualquiera de las actividades que hay dentro del juego. Desde que sales de la Vault 76, es posible unirte a alguien más para superar cualquier quest que se te vaya poniendo enfrente, incluso es obvio que algunas de las zonas, están pensadas para que estemos acompañados a pesar de que como te decía, es posible pasarlas en solitario. Vale la pena aclarar que puedes formar equipo con cualquier persona que te encuentres de manera simple o por qué no, solo intercambiar algunos ítems, recursos o armamento que tengas.

En caso de que por alguna razón tu conexión se venga abajo pero se recupere rápidamente, el juego te regresará al servidor en el que estabas con el equipo con el que te encontrabas. Una de las grandes ventajas de jugar con alguien más además de sentirte acompañando en un mundo realmente solitario, es que si mueres, puedes ser reanimado en el mismo punto, además de que también, puedes hacer fast travel al lugar en el que se encuentren tus compañeros en cualquier momento que lo desees sin costo alguno. Fallout 76 es una experiencia que fue principalmente diseñada para disfrutarse en compañía de alguien más.

A pesar de contar con la posibilidad de también hacer enemigos, es más que evidente que la intención de los desarrolladores es que Fallout 76 sea un juego cooperativo antes que uno de enfrentamientos directos con otras personas. Lo anterior lo digo por cómo es que funciona su sistema de PVP. Para empezar, el juego cuenta con la opción de activar un modo pacifista en el que básicamente cierras la posibilidad de iniciar un combate con otro jugador. La segunda es que para que uno de estos choques inicie, los participantes deben de estar de acuerdo. Por ejemplo, si alguien llega y te dispara, el daño que te hará será muy reducido. Solo si tú contestas la agresión, entonces ya empieza un enfrentamiento directo.

¿Qué pasa si te matan? Perderás parte de tus recursos y dinero, nada tan trascedente en realidad. ¿Qué pasa si el otro jugador no responde a mis agresiones y de todos modos consigo matarlo? Serás marcado en el mapa para que todos te puedan ver y una recompensa por tu muerte será ofrecida a quien lo consiga. Al igual que muchos otros aspectos de Fallout 76, estas ideas suenan sensacionalmente bien, pero en realidad no son tan emocionantes. Debido a lo restrictivo que es el PVP dentro del juego, en todas estas decenas de horas que llevo, jamás me tocó ser parte de un enfrentamiento directo con otro jugador que se diera de manera natural. El sentimiento de sentirte amenazado cuando te topas con alguien más salió volando por la ventana gracias a la enorme cantidad de medidas que se tomaron para proteger a quienes no gustan de este aspecto.

Sí, jugar un Fallout completo con tres amigos está increíble hasta cierto punto, pero el PVP es prácticamente inexistente y nada parecido a lo que pensábamos iba a ser. Creo que aquí es donde reside el problema más grande de Fallout 76. Se nos vendió la idea de que un modo multiplayer robusto era lo mejor para la serie y que valdría completamente la pena sacrificar algunas cosas con tal de tenerlo. La realidad nos ha indicado que al menos en esta primera etapa del juego, todos los esfuerzos no han valido la pena y que sin lugar a dudas, estaríamos hablando de una mucho mejor experiencia si Bethesda se hubiera mantenido por un camino tradicional.

Por cierto, el PVP se te habilita una vez que alcanzas nivel cinco, asunto que debe suceder dentro del par de primeras horas de juego. Formar un equipo sí es algo que se da de manera simple y muy fácil con el presionar de un solo botón. Sobre los problemas de conexión y demás complicaciones técnicas de Fallout 76, te hablaré un poco más adelante en este misma reseña.

Un gigantesco mundo…

Una de las grandes razones por las que Fallout 3 hizo tanto ruido en su momento fue el maravilloso mundo abierto basado en Washington DC en el que nos ponía. Cada uno de los rincones de este espacio tenía algo guardado para nosotros, desde una interesante charla con algún NPC, un nuevo sidequest o esa pieza de equipo que tanto habíamos buscado. Dicho asunto se vio replicado en los siguientes juegos de la serie y ahora en Fallout 76, visitamos el wasteland de West Virginia conocido como Appalachia.

Tan solo en tamaño y según densidad de acuerdo con Bethesda, el mapa de Fallout 76 es cuatro veces más grande que el que vimos en Fallout 4, dato verdaderamente considerable si recuerdas lo enorme que se sentía el anterior juego de la serie. Dicho asunto tiene diferentes implicaciones, una positivas y unas que lo terminaron afectando de manera negativa.

Lo primero que hay que decir es que por la falta de NPCs, es completamente normal que el mundo de Fallout 76 se sienta completamente vacío y muerto, sin embargo, es importante aclarar que cada vez que pisas cualquier zona nueva, se te abren quests de algún tipo o cosas por hacer. Por dicha razón, creo que cuando decimos que estamos frente a un mundo abierto que está “muerto o vacío” debemos de tener mucho cuidado, pues en ningún momento sientes que se te hayan acabado las cosas por hacer. Claro que hay espacios muy grandes que recorres sin que gran cosa suceda, pero creo que es parte del sentimiento de desolación que se está intentando expresar.

Otro de los problemas que existen gracias al gigantesco tamaño del mapa de Fallout 76, es que 24 jugadores dentro de él resultan insuficientes para que los encuentros se den de forma más seguida. Pasaban varias horas hasta que me topaba de frente con algún otro jugador que casualmente se encontraba explorando la misma parte que yo. No sé si esto fue intencional o no, pero definitivamente se siente como algo que no está funcionando dentro de la experiencia.

Del diseño, composición y distribución de esta versión ficticia de West Virginia, es complicado quejarse. Su muy accidentado terreno hace que hasta en los espacios que podían ser considerados como vacíos, encuentres un reto para llegar del punto al A al punto B. Sus ciudades mayores están diseñadas a mano con interesantes interiores llenos de recovecos por los que nos podemos escabullir, mientras que sus dungeons o áreas por separado que requieren de una pantalla de carga para poder ser accesados, lucen también retos muy interesantes y formas que genuinamente te sumergen en la atmósfera que se nos está presentando.

Como te puedes dar cuenta, el mundo de Fallout 76 tiene sus pros y sus contras muy marcados. Me parece que de nueva cuenta, al decisión de no haber incluido NPCs en mayor número y complejidad, terminó impactando de manera negativa a la experiencia del juego, más que beneficiarla con esta supuesta innovación de que todo encuentro que tuviéramos con humanos, sería con personas de verdad. Hubiera sido espectacular encontrar uno de estos pueblos con algo de vida gracias a sus habitantes.

Por una parte tenemos un basto mundo que constantemente te está distrayendo con diferentes tipos de actividades y quests por hacer, pero por el otro, la falta de elementos tradicionales como la presencia de más NPCs, hacen que inevitablemente sintamos que algo le falta al teatro que tenemos enfrente. Repito, el tener a personas reales intentando llenar esos vacíos, simplemente no funcionó, al punto de que las únicas verdaderas historias que podrás crear, será solo si tienes con quien hacer equipo.

¿Bugs y problemas técnicos? ¡A la orden!

Desgraciadamente y a pesar del renombre de sus obras, Bethesda Game Studios tiene la fama de sacar juegos que se sienten no terminados en el aspecto técnico, presentando un montón de dificultades que hacen que los primeros días o semanas con ellos, sean verdaderamente incómodos para cualquiera que les da una oportunidad -Skyrim-. Fallout 76 no solo sigue con la tradición, sino que amplifica algunos de estos inconvenientes gracias a que justamente, estamos hablando de una experiencia que depende mucho de factores externos en los que todo puede salir mal.

Del lado de la conexión, mi encuentro con Fallout 76 ha sido bastante irregular. Hay largos lapsos de tiempo en los que todo se comporta como debería. Encuentro servidor de manera rápida y todo dentro de él funciona, sin embargo, también he tenido momentos en los que simplemente no se me deja iniciar sesión o que de la nada, se pierde comunicación con el servidor y me tengo que salir de manera manual. Además, incluso cuando no estoy cerca de otros jugadores, los enemigos llegan a tener lag. En más de una ocasión vi a scorched saltando entre posiciones, justo como cuando en una partida online hay latencia de consideración. Ni qué decir de las tres veces que el juego crasheó por completo.

El framerate es todo un tema en Fallout 76. Se nota que no se logró optimizar absolutamente nada desde el periodo de beta. Ver cómo es que los cuadros por segundo se caen de la nada o de plano se congela la imagen cuando la pantalla se llena de enemigos, es una fuerte constante que indudablemente sí afectó la experiencia que estaba teniendo. De igual forma, es complemente normal ver texturas que simplemente decidieron no cargar correctamente u objetos que están apareciendo tarde. 

Todo lo que te acabo de contar podría ser suficiente para pensar dos veces si entrar en este momento a Fallout 76, pero lo más frustrante es lo inconstante y poco confiable que llega a ser el sistema de guardado del juego. Hasta la cuenta he perdido de la enorme cantidad de horas de avance que se han ido desde que arranque con la aventura. A pesar de que seguía los pasos de salir manualmente del juego siempre que terminaba una sesión para que se guardara todo correctamente, me pasó varias veces que cuando regresaba, cierta parte de un quest que ya había sido completado, volvía a aparecer como no hecha, generando que tuviera que hacer de nueva cuenta todo. Verdaderamente frustrante y desesperante.

Para este punto, sobra decirte que los bugs, glitches y físicas sin sentido están a la orden del día, lo cual, evidentemente resulta en una experiencia complicada de consumir por la manera tan simple en la que somos sacados del teatro que se está intentando construir frente a nuestros ojos.

Fallout 76 es un juego que claramente fue forzado para ser estrenado el pasado 14 de noviembre. No me va a extrañar en lo más mínimo cuando empiecen a salir testimonios de gente al interior del estudio declarado que Bethesda adelantó el estreno incluso sabiendo que el producto no estaba listo para llegar a manos de usuarios. Fallout 76 se siente como una beta fallida a la que aún le restan meses de trabajo para poder ser un producto digno al menos en lo técnico. ¿Cuándo será prudente regresar? No tengo idea, probablemente todo esté perdido.

Rústico apartado visual

Todas las complicaciones técnicas, además de la negligencia por ya tener que estar disponible en el mercado, tiene un nombre: Creation Engine. El motor gráfico de Bethesda Game Studios tiene ya un gran cantidad de tiempo recibiendo parche sobre parche, al punto de convertirse en un software en forma de Frankenstein que se encuentra a años de la calidad gráfica que vemos hoy en día en producciones AAA.

Sí, las gráficas de Fallout 76 se sentían verdaderamente rústicas. Tanto los modelos de personajes, así como de elementos de terreno y ambiente, productos, objetos, texturas y en general todo lo que vemos en pantalla, se sienten como de generación pasada a lo mucho, incluso con las mejoras que se hicieron en el tema de la iluminación, tenemos un juego que queda a deber enormemente en el apartado visual.

Las animaciones son acartonadas y poco creíbles, esto sin mencionar que normalmente, las físicas se comportan de maneras sumamente extrañas. Del tema del audio no me puedo quejar. Además de que el soundtrack me pareció verdaderamente bueno y hasta memorable por momentos, cada arma u objeto que usamos, cuenta con su propio sonido. Lo avanzada que es la mezcla de audio, contrasta enormemente con el pobre trabajo visual que se hizo.

Claro que la excelente dirección de arte con la que cuenta Fallout 76 ayuda bastante a disimular las deficiencias gráficas del juego, luciendo paletas de colores muy variadas y distintas a lo que normalmente vemos dentro de la serie, no obstante, me cuesta trabajo pensar en algún momento en el que el paisaje me haya quitado el aliento por su belleza.

La decepción del año

No encuentro mejor manera de describir a Fallout 76 que como contrastante. En un momento parece que todo funcionará y que en efecto, las ideas nuevas darán frutos o que al menos tendremos un Fallout 4.5 cuando de la nada, un error técnico o falta de narrativa, nos caen como un rayo para resaltar las malas decisiones que se tomaron en todos los niveles. Fallout 76 es una experiencia frustrante, desesperante y sumamente incómoda de sobrellevar, con todo y que como te digo, hubo momento en los que la estaba pasando realmente bien.

Del lado del endgame tenemos actividades como activar silos nucleares para lanzar ataques que por la misma falta de relevancia del PVP, se sienten como algo vacío y sin razón de ser. Esperemos que al menos en este apartado, Bethesda agregue cosas de mucha mayor sustancia pues una vez que acabas la campaña o llegas al máximo nivel, no existen más razones para seguir jugando.

Por más que le he dado vueltas al asunto, no encuentro razones de peso para darle vuelta a los problemas del juego y así, poderlo recomendar aunque sea a cierto tipo específico de jugador. La enorme cantidad de complicaciones técnicas que presenta Fallout 76, son razones suficientes para decirte que al menos por ahora, te alejes de él completamente. Es una verdadera pena que la gran base y fundamentos de la serie estén ahí presentes, pero que al final, hayan sido completamente opacados por los problemas que te menciono y claro, por experimentos que en la teoría sonaban como grandes ideas pero que en la práctica, quedaron a deber muchísimo. Ya podemos ir poniendo a Fallout 76 como la gran decepción de este 2018.