PS4, XBOX ONE, SWITCH, PC
PC
Lizardcube / Guard Crush Games
Dotemu
30/04/2020
Más de 25 años tuvieron que pasar para que la mítica Streets of Rage tuviera un juego completamente nuevo. Dicho asunto, por supuesto, no hubiera sido posible sin la iniciativa de lo que bien podríamos considerar un grupo de apasionados fans con el talento y los recursos suficientes para hacer de este proyecto una realidad, pues si de Sega hablamos, la verdad es que existe muy poco o nulo interés por traer de vuelta a varias de sus franquicias. Después de habernos maravillado hace unos años con el remake de Wonder Boy: The Dragon’s Trap, los europeos de Dotemu y Lizardcube, unieron fuerzas con Guard Crush Games para darle vida a Streets of Rage 4, juego que demuestra que géneros como el de los Beat em’ up, pueden seguir siendo muy relevantes en pleno 2020, con todo y que en efecto, han estado guardados por un largo tiempo.
La ventaja que tienen proyectos como el de Street of Rage 4 sobre cualquier otro es que claramente, están siendo construidos por personas que tienen un deseo genuino por hacerlo, es decir, se le está imprimiendo amor verdadero y un cuidado que no sueles ver en otros juegos. Sí, es lamentable que empresas como Konami o Sega hayan tomado esta postura de olvidarse de su enorme legado, no obstante, puede que justamente esto haya causado que ahora, quienes crecimos con sus obras, tomemos la batuta para que puedan seguir existiendo. Esta cuarta entrega del clásico de los Beat em’ up es por mucho, la más grata sorpresa que me he llevado en lo va del año, pues además de respetar y tratar con enorme cuidado lo que significa la serie que se está interpretando, los desarrolladores supieron perfectamente en qué puntos se podía mejorar para traerlo a la modernidad, esto tanto en el aspecto audiovisual, como en temas de gameplay y de diseño de niveles.
Queda claro que el principal objetivo de Streets of Rage 4 es el de gustar a quienes disfrutaron de estos juegos de Sega Genesis en los años noventa. Si alguien nuevo llega a caer en su mieles está bien, pero lo que los involucrados buscaron con este juego fue justamente entregar una nueva secuela en toda la extensión de la palabra. ¿Lo lograron? sí, y con creces, aprovechando el momento para ponerse un poco nostálgicos y apelar a un montón de referencias de todo tipo a sus tres antecesores. No me mal interpretes, el título no solo es pura nostalgia y fan service sin sentido, incluso te diría que es mucho más que un tributo. Streets of Rage 4 es lo que representa su título. LA CUARTA ENTREGA DE STREETS OF RAGE.
Antes de pasar a contarte de la historia de Streets of Rage 4, creo que es importante mencionar que además de todas las referencias que uno ve a lo largo de los 12 niveles que componen al juego, se nos puso una serie de contenido extra que estoy seguro, muchos agradecerán. Además de los cuatro personajes que se te dan al inicio, puedes desbloquear a un quinto para que después, se te dé la oportunidad de ir sacando a los de los otros Streets of Rage. Sí, leíste bien. Es posible desbloquear a Axel del primer Streets of Rage, a Max de Streets of Rage 2, etc. Todos están ahí. La gran noticia es que no se tratan de skins solamente, sino que básicamente se te presenta al personaje del juego en cuestión con todos sus movimientos. Es como si estuvieras jugando Streets of Rage 3, por ejemplo, dentro del mundo de Streets of Rage 4.
Lo anterior nos habla del enorme cariño que los desarrolladores tienen por la serie, pues existe un cuidado muy importante en todos estos detalles, además de que seguramente, Sega cooperó con documentos para que la cosa pudiera salir lo mejor posible. Para rematar, Streets of Rage 4 viene con una galería de arte conceptual que te volará la mente, es casi como tener un libro de arte completo dentro del juego. Sin duda alguna, de esos agregados que se agradecen enormemente.
Ahora sí, pasando a la parte de la historia que la verdad, siempre ha estado en tercer o cuarto término cuando hablamos de esta franquicia, te cuento que los eventos de Streets of Rage 4 se dan 10 años después de los hechos que se nos contaron en Streets of Rage 3. Finalmente, Mr. X ha sido derrotado, sin embargo, sus hijos gemelos conocidos como los Y Twins, forman un nuevo sindicato del crimen para acabar con la paz que ya reinaba en Wood Oak City. El plan de los hijos del malvado villano es utilizar música hipnótica para controlar a la población y hacer que hagan lo que ellos quieran.
¿Tengo que haber jugado los pasados Streets of Rage para entrarle a este nuevo? No, definitivamente no. Como te decía hace un par de párrafos, la historia de los Streets of Rage nunca ha sido tan importante, así que si eres nuevo para la serie, no tendrás ningún problema para seguir el hilo. Algo que es importante mencionar es que si bien, la narrativa en Streets of Rage 4 sigue siendo bastante sencilla, ahora se intentó hacerla un poco más explicita y un tanto más profunda al utilizar cinemáticas entre los niveles, mismas que son muy bonitas, pero bastante sencillas, pues solo son artes estáticos con diálogos en texto.
Sobre los nuevos personajes, en Streets of Rage 4 tenemos el regreso de Axel y de Blaze, solo que en versiones mucho más maduras y claro, con algunos cambios en sus movimientos. Además, dos nuevos rostros se unen al universo de Streets of Rage. Por un lado tenemos a Cherry Hunter, hija de Adam Hunter que utiliza su guitarra eléctrica para acabar con los enemigos y que funge como el personaje ligero, es algo así como su tío Skate de Streets of Rage 2. Por otro lado está Floyd Iraia, nuevo personaje que perdió sus brazos en un accidente de trabajo pero que fue ayudado por el Dr. Zan, quien le implantó un par de brazos biomecánicos que le otorgan súper fuerza. Como seguro ya te lo estás imaginando, éste viene a ser el personaje pesado para sustituir a Max.
Sí, si eres fan de Streets of Rage, prácticamente en cada esquina, Streets of Rage 4 te sacará una gran sonrisa de alguna u otra manera, ya sea con un pequeño letrero que hace alusión a algunos de sus antecesores, o con uno de los míticos villanos del pasado que hace su regreso triunfal. Repito que si por el contrario, este va a ser tu primer encuentro con la franquicia de Sega, no tienes nada de qué preocuparte, pues a pesar de que estamos hablando de un juego “Retro” por definición, se supo perfectamente adaptarlo para que nuevas generaciones lo pudieran disfrutar.
Las razones por las que Streets of Rage es una de las series más queridas de Sega son muy variadas, sin embargo, creo que si tuviéramos que elegir una sola, ésta tendría que ver con que son títulos increíblemente divertidos que siempre lograron eliminar la monotonía propia del género gracias a mecánicas increíblemente bien pensadas y a una importante variedad de enemigos. La gente de Lizardcube no solo entiende a la perfección cuáles son los valores de esta franquicia, sino que también sabe qué es lo que ha hecho grandes a otras series de Beat em’ up como Final Fight o Double Dragon. Sí, por más que podríamos decir que estos juegos Arcade llevaban ya muchos años casi en el completo olvido, con Streets of Rage 4 se nos demuestra que traerlos de vuelta es algo completamente posible.
Durante los primeros minutos con Streets of Rage 4, sentirás que justamente estás frente a un título hecho y derecho de la serie que fue actualizado con un bello arte perfectamente animado con técnicas modernas. Conforme vas progresando y experimentando con cualquiera de los cuatro personajes que se te dan al inicio, te empiezas a dar cuenta que hay varios cambios. Probablemente, uno de los primeros que notarás es que ahora, la vida que cuesta hacer algún movimiento especial, se puede recuperar si es que justo luego de ejecutarlo, golpeas con ataques regulares a algún enemigo que tengas cerca. Hablando de especiales, cada personaje cuenta con una habilidad llamada Star Move, la cual, es justamente un ataque especial que suele hacer una cantidad de daño pero que consume estrellas, nuevos ítems que puedes encontrar tirados.
¿Fan de los combos? Si tu respuesta fue afirmativa, te alegrará saber que todo el sistema de combate de Streets of Rage 4 está completamente pensado para que te luzcas lo más que puedas con tus movimientos. Cosas como arrojar a los enemigos contra las paredes para causarles más daño, son solo algunas de las nuevas ideas que vemos en el juego y que claramente fueron concebidas para que nosotros como jugadores, nos pongamos creativos para que el contador de hits no deje de subir. De verdad, las cosas se empiezan a poner muy locas cuando te vas acostumbrado a los controles y posibilidades de este título.
La variedad de enemigos y encuentros contra jefes siempre ha sido un sello de la serie y en Streets of Rage 4, no se nos decepciona. Prácticamente en cada uno de los niveles, se nos presentan a nuevas amenazas a las cuales debemos de enfrentar, además de que éstos pueden ir variando en su tipo de ataque o peligrosidad. Los jefes, de igual forma, son una verdadera maravilla por cómo es que lucen sus diferentes patrones y formas de ataque, causando que cuando estás contra alguno de ellos, tengas que poner toda tu atención para poder salir adelante. Otro asunto que encontrarás súper encantador es la enorme cantidad de armas que se nos presentan y cómo es que cada una cuenta con propiedades distintas. Pasando por el clásico tubo y cuchillo, ahora también tenemos cosas como katanas, lanzas, cuchillos de carnicero, botellas rotas, entre muchas otras.
El gameplay de Streets of Rage 4 es simplemente fabuloso y altamente adictivo. Después de que lo comencé a jugar, no podía pensar en otra cosa que en regresar por más, pues justamente gracias a lo fáciles de entender que son sus mecánicas y a la vez, a lo complicado que es de verdad dominarlas, cada vez que juegas sientes que estás aprendiendo algo nuevo. Sé que no hay mucho contra qué comparar, pero no recuerdo cuándo fue que un juego Arcade me tuviera tan pero tan atrapado. Es adictivo agarrarte a golpes en este fantástico brawler.
Pasando un poco a los modos de juego que podrás encontrar, te informo que al inicio, solo se puede jugar el modo de historia en el cual, si llegas a perder todas tus vidas, podrás iniciar desde el nivel en el que te quedaste. Esto es una mera introducción del título, pues una vez que lo completas, se te abre el modo Arcade en el que claro, si llegas a morir, vas para atrás desde el inicio. Creo que en este modo es en donde mejor la he pasado. Vale la pena mencionar que también se desbloquea un boss rush en el que se te avienta contra los jefes, uno tras otro, para que pruebes tus verdaderas habilidades.
¿Qué hay del multiplayer? Todos sabemos que cualquier Beat em’ up se juega mucho mejor cuando estás en compañía, y Streets of Rage 4 no es la excepción. En modo local, puedes disfrutar de toda la acción con hasta tres amigos más. Sí, se puede de cuatro jugadores. En caso de que tengas planeado jugar a distancia por obvias razones, te cuento que en el online solo se puede de dos jugadores por ahora. Tengo entendido que hay planes para ampliar a cuatro, pero por ahora no se ha dicho cuándo podría llegar el parche. Consejo si eres nuevo. No apagues el friendly fire, pues el poder dañar por error a tus aliados, es una mecánica importante del juego.
Una de las cosas que casi siempre suelo mencionar al momento de hacer una reseña formal de cualquier juego, tiene que ver con la forma en la que el diseño de niveles tiene que funcionar para que la obra entera pueda cumplir con sus objetivos. Creo que hasta cierto punto, el género del Beat em’ up es una de esas extrañas excepciones a lo que bien se podría considerar como una ley, pues por la naturaleza de sus mecánicas de juego, la manera en la que están construidos sus escenarios suele no ser tan importante. Pero ¿qué pasa si a uno de estos juegos se le pone especial atención a este apartado?
Justamente, Streets of Rage 4 es ejemplo perfecto de lo anterior. Es un Beat em’ up al cual se le metió especial cariño y trabajo a la manera en la que se diseñó cada uno de sus 12 niveles. Creo que además de que los desarrolladores se salieron de muchas convenciones del género en términos de ambientación, es decir, además de visitar el clásico barco, puente, etc, también llegas a alocados lugares como una estación de policía, una galería de arte y hasta un concierto. Además de lo anterior, tenemos el fuerte dinamismo que hay en cada uno de estos escenarios. Con dinamismo quiero decir que además de la intensa variedad de enemigos que se te arrojan y de los cuales ya te conté, tenemos que el propio nivel cobra vida propia.
Fugas de gas, huecos en el piso, obstáculos para hacer más angosto nuestro paso, charcos venenosos y muchos más elementos, fueron agregados a los niveles de Streets of Rage 4 para que en ningún momento sientas que solo estás recorriendo un túnel de izquierda a derecha. Lo mejor de todo este asunto y en realidad, es como siempre ha funcionado la serie, es que tenemos que estos peligros pueden ser usados a tu favor, pues también afectan a los enemigos si sabes cómo aprovecharlos. Es verdaderamente impresionante ver cómo es que cada cosa que nos salta o aparece en estos detallados lugares, fue colocado cuidadosamente para hacer sentido con el flujo de las mecánicas del propio juego.
Podríamos decir que otro de los grandes atractivos que Streets of Rage ha tenido como serie es que su estilo visual y sonoro siempre han tenido una personalidad desbordante a la cual es difícil resistirse. A pesar de que esta cuarta entrega está ubicada una década después de los acontecimientos que vimos en Streets of Rage 3, los desarrolladores, creo yo, de manera muy acertada, decidieron conservar todo el estilo cyberpunk muy neón que nos recuerda a un montón de películas de los ochenta.
Como te decía al inicio de esta reseña, Streets of Rage 4 fue producto de la colaboración de Dotemu y Lizardcube con un estudio llamado Guard Crush Games, el cual, hace no mucho publicó un juego bajo el nombre de Streets of Fury. Si uno ve dicho titulo, lo primero que te viene a la mente es que es una especie de broma, pues básicamente utiliza fotografías de gente real para crear gráficas que nos recuerdan un poco a Mortal Kombat II, esto en un Beat em’ up que de primera instancia luce muy deficiente. A pesar de todo esto, si le pones más atención, se nota que hay algo especial con la tecnología que se uso para crear dicho título.
Justamente, la gente de Lizardcube y Dotemu notaron ese gran potencial, pues resulta que el llamado Guard Crush Engine tiene la capacidad de convertir en gráficas en tiempo real casi cualquier animación echa a mano que se quiera poner dentro del juego. Seguramente, sumado a lo anterior, los desarrolladores encontraron que la tecnología era fácil de aprender a usar, por lo que llegaron a un acuerdo para ésta fuera la base de Streets of Rage 4. No se pudo haber tomado una decisión más acertada.
Vale la pena recordar que la gente de Lizardcube demostró su talento utilizando arte casi conceptual dentro de gráficas en tiempo real con Wonder Boy: The Dragon’s Trap, por lo que más que usar Pixel Art, seguramente dentro de su propia lógica hacía mucho más sentido irse por este estilo muy de cómic que vemos impreso en Streets of Rage 4. Desde que el juego empieza a correr, uno queda completamente enamorado por la enorme cantidad de detalle que tienen todos los elementos en pantalla, sobre todo en términos de animación. De acuerdo con los desarrolladores, los personajes jugables cuentan con más de mil cuadros de animación cada uno, mientras que los enemigos llegan a tener hasta 400 cuadros. Una verdadera locura que nos hace pensar en cómo fue posible que solo cinco personas pudieran terminar el trabajo en un lapso de dos años.
Del lado técnico también tenemos que el motor de Guard Crush Games resultó ser un joya, pues todas las versiones de Streets of Rage 4 corren y se ven espectacularmente bien. Incluso en el Nintendo Switch, tienes un título que se despliega sin ninguna clase de contratiempo a 60 cuadros por segundo.
Además de toda la fabulosa ambientación visual que tiene Streets of Rage 4, se hizo un espectacular trabajo en la parte auditiva. Primero tenemos que los efectos sonoros apoyan muchísimo al gameplay. Cada golpe se siente visceral y muy directo, ya sea que lo des a puño limpio o utilizando alguna de las armas que te encuentras.
¿Qué hay de la música? Pues te cuento que el francés, Olivier Deriviere, logró llenar un espacio sumamente complicado de llenar si uno revisa el pasado musical de la serie. Dicho compositor consiguió mantener todo el estilo musical de Streets of Rage pero sin tener que apelar a arreglos ni mucho menos. Toda la música que escuchamos en Streets of Rage 4 es completamente original. La aún mejor noticia, es que el legendario Yuzo Koshiro también participa con algunas composiciones junto con otros grandes talentos de la talla de Motohiro Kawashima, Yoko Shimomura, Keiji Yamagishi y Harumi Fujita.
Ya para terminar todo este apartado, te cuento que la música dentro de Streets of Rage 4 es muy dinámica. Además de que cada nivel cuenta con hasta tres pistas diferentes, éstas se van comportando de acuerdo a lo que pasa en pantalla. Se hace un gran trabajo al poner una melodía tranquila cuando atraviesas un callejón vacío por ejemplo, mientras que cuando eres emboscado por ocho o nueve enemigos, la cosa se llega a poner a muy intensa.
Streets of Rage 4 es un videojuego simplemente brillante que alcanzó con creces cada uno de los objetivos que se fue planteando. El trabajo que Dotemu, Lizardcube y Guard Crush Games hicieron con este juego es mucho más que solo nostalgia o tributo a una de las grandes franquicias de Sega. Lo que se nos pone enfrente es un título completamente nuevo de Streets of Rage que no tiene ningún miedo de cargar con el apellido que tiene y más aún, no se achicó al momento en el que tuvo que proponer nuevas ideas dentro de un género que francamente podíamos considerar en proceso de fosilización.
¿Para quién es Streets of Rage 4? No suelo decir esto en una reseña, pero yo diría que para absolutamente todo el mundo. ¿Por qué digo eso? Pues básicamente porque cumple con la famosa arcana de tener mecánicas que son muy fáciles de entender, pero muy complicadas de dominar. De verdad, no importa si tienes o no pasado con la serie o con el género, este juego es algo a lo que le deberías de dar la oportunidad en cuanto puedas. Es un verdadero gusto jugar algo que siente tan clásico pero a al ves, tan fresco. Tenía mucho tiempo que un juego de naturaleza Arcade no me atrapaba de tal forma, causando que constantemente quiera intentar acabarlo en las dificultadas más altas usando la menor cantidad de vidas.