Después de que el proyecto de Rock Solid Games no saliera de la manera que esperaban, Linus Blomberg y Christofer Sundberg decidieron poner manos a la obra para levantar casi desde cero a un estudio completamente nuevo, ahora, con la misión de crear videojuegos que de verdad le dieran libertad al jugador en un mundo abierto. Así, en marzo de 2003 nace Avalanche Studios y tres años más tarde, lanzan de manera oficial su primer juego bajo el nombre de Just Cause con el apoyo de Eidos Interactive. Había nacido una nueva franquicia que definiría la personalidad de la marca y claro, reinventaría muchas de las convenciones del género que para ese entonces ya se encontraban muy arraigadas.
Este 4 de diciembre, Avalanche Studios estará lanzando la cuarta entrega de lo que podríamos considerar, su serie más emblemática y reconocida, esto gracias al característico sabor que ha tenido cada una de sus entregas gracias a la idea básica bajo la cual nació: “un juego en el que te lances desde un avión en paracaídas, aterrices en el techo de un coche y puedas seguir adelante”. Por supuesto que este tipo de locuras y libertad que tenemos en cada uno de los títulos de la franquicia, fueron posibles solamente gracias al Apex Engine, motor desarrollado en casa que está completamente pensado para justamente darle al jugador decenas de posibilidades en lo que podemos definir como un “auténtico campo de juego abierto”. Acompáñanos a repasar 12 años de historia desde que el primer Just Cause se lanzó para PS2, Xbox y PC.
Just Cause (2006)
La idea sobre cómo debían de ser los primeros pasos de la nueva compañía estaban claros, pero para poder lograrlos, se necesitaban de herramientas muy específicas. Sabiendo que desarrollar un motor desde cero y a la vez, una IP completamente nueva, no era práctico en términos financieros, Avalanche Studios comenzó a trabajar en el primer Just Cause usando principalmente Havok como tecnología, esto claro, mientras que de manera paralela, se construía el Apex Engine. A pesar de que en efecto, el primer intento de la nueva marca se sentía como un tech demo con misiones bastante repetitivas, los fundamentos sobre los cuales existía, se percibían con un enorme potencial, además de que en la parte comercial, el nombre de Rico Rodríguez encontró un espacio en el gusto del público para superar el millón de copias vendidas.
Just Cause 2 (2010)
Debido a que el primer intento de Avalanche Studios había tenido resultados bastante decentes en todo sentido, se ordenó que una secuela para Just Cause comenzara a ser trabajada, sin embargo, en esta ocasión, con la misión de ya tener listo el propio motor gráfico que de verdad abriría las posibilidades dentro de los llamados juegos de mundo abierto. Ya corriendo sobre lo que podríamos llamar, la primera versión del Apex y claro, con toda la potencia que ofrecían las consolas de nueva generación como el Xbox 360 y PS3, así como las PC modernas, Just Cause 2 llevó todo lo que presentó su antecesor a niveles que simplemente nadie veía venir. La forma en la que se comportaba el sistema de física dentro de este juego, permitió que prácticamente todo lo que nos imaginábamos que se podía hacer, efectivamente se pudiera ejecutar dentro del juego.
Just Cause 3 (2015)
La base de fans que la ahora franquicia ya tenía, hacían lógico que Avalanche Studios se lanzara por una tercera parte, sin embargo, Eidos ya no estaba en posición de seguir en su papel de publisher, por lo que se necesitaba de alguien más que confiara en su trabajo. Gracias a la expansión que Square Enix estaba teniendo a inicios de la década presente, sobre todo en el mercado occidental trabajando directamente con empresas no japonesas, fue que finalmente se pudo ordenar el desarrollo de Just Cause 3, juego que justamente fue pagado por la compañía nipona. Ahora en una nueva era para los videojuegos gracias a la llegada del PS4 y Xbox One, el estudio sabía que necesitaba llevar a su serie a nuevos niveles. Puede que esta tercera entrega no trajera demasiadas ideas a la mesa, pero la forma en la que una vez más, nos ponía dentro de un gigantesco mundo verdaderamente explorable en el que podíamos hacer cualquier cosa que se nos ocurriera, funcionó sensacionalmente bien, dejando satisfechos a los fans e incluso se hizo de un lugar en nuevos nichos.
Just Cause 4 (2018)
Sin lugar a dudas, una de las grandes sorpresas de E3 2018 se dio cuando durante la conferencia de Microsoft, se anunció que Just Cause 4 era toda una realidad y que estaría listo para finales de año. El juego nos presenta la más reciente versión del Apex Engine, el cual, no solo permite que la serie nos muestra su mejor rostro en la parte gráfica, sino que añade un sistema totalmente nuevo de clima dinámico que en tiempo real, puede afectar directamente la composición del mapa. Cosas como tornados, tormentas de arena y ventiscas árticas, causarán que repentinamente tengas que cambiar la forma en la que te estabas aproximando a cierta situación. Por supuesto, una de las cosas que más se esperan de este título es que gracias a lo que te acabo de describir, las locuras que podamos hacer con su sofisticado sistema de físicas, se conviertan en verdaderas locuras fuera de este mundo.
