Ya era hora

Todavía recuerdo como si fuera ayer aquel teaser que EA mostró en E3 de 2013 en el que un Snow Speeder era derribado por un AT-AT, confirmando que la amada saga de Battlefront estaría de regreso bajo la batuta de DICE. Sí, definitivamente fueron un par de horas muy mágicas con este título de 2015, el cual, no tardó en mostrar su verdadero rostro para enseñar lo que en realidad era. Ni qué decir de su secuela, juego que si bien, no era malo en su núcleo, quedó totalmente embarrado por uno de los sistemas de microtransacciones más abusivos que el medio haya visto. El publisher de Redwood junto con su estudio sueco, lo estaban haciendo terriblemente mal con la franquicia de Star Wars. Turno de Respawn Entertainment de saltar al ruedo y solucionar este verdadero desastre en medio de una época en la que también, las creaciones de George Lucas requieren de buenas noticia. Me alegra mucho decirte que Star Wars Jedi: Fallen Order es un conjunto de buenas decisiones que si bien, no entregan un producto perfecto, sí presentan uno que finalmente está a la altura del enorme legado con el que carga.

Los astros de una galaxia muy, muy lejana finalmente se han alineado para Star Wars. Luego del par de decepciones que representaron los Battlefront, Respawn se planta con todo el talento que ha demostrado desde un inicio para enseñarnos cómo se hacen las cosas, dejando de lado terribles decisiones al presentar un juego totalmente enfocado al modo de un jugador y por consiguiente, alejándose de cualquier cosa relacionada a loot boxes y microtransacciones. Además, se optó por utilizar Unreal Engine en lugar del conflictivo Frostbite, esto para crear una experiencia que se siente sumamente bien lograda y diseñada que toma inspiración de un montón de lugares. Sí, muy probablemente estemos frente al mejor juego de Star Wars, pues además de ser un título tremendamente divertido, Star Wars Jedi: Fallen Order nos cuenta una gran historia que sí aporta varias cosas sumamente interesantes al gigantesco lore de esta serie. 

Execute Order 66

Son días de verdadera oscuridad en la galaxia. Después de haber derrocado a la República, la bandera del Imperio reina en la mayoría de los sistemas conocidos, esto mientras los pocos Jedi que sobrevivieron a la purga del Emperador, son cazados brutalmente para acabarlos de una vez por todas. 

En Star Wars Jedi: Fallen Order tomamos el control de Cal Kestis, joven padawan que lleva cinco años escondido desde que se ejecutara la infame Orden 66 para acabar con todos los Jedi. Nuestro protagonista se encuentra trabajando en una fábrica de desmantelación de viejas naves de la era de las Clone Wars cuando luego de un hecho, no tiene más opción que usar sus poderes para salvar a uno de sus amigos y así, quedar expuesto. Tras un temido encuentro con la Second Sister, inquisidora del Imperio con el solo objetivo de continuar con la purga, el aprendiz de Jedi no tiene más opción que huir.

Para lograrlo y de manera milagrosa, aparecen Cere Junda y Greez Ditrus abordo de una nava conocida como Mantis. Al ver que no tenía ninguna otra opción para sobrevivir, Cal confía en este par de extraños y así, comienza su aventura a lo largo y ancho de la galaxia. Casi inmediatamente, este par de personajes te cuentan que tienen la intención de revivir a la vieja Orden Jedi para hacerle frente al Imperio, por lo que nuestro protagonista se les une para comenzar esta búsqueda de sobrevivientes y claro, de varios secretos de los famosos usuarios de la Fuerza.

A partir de ese momento, se crea un lazo bastante fuerte entre los ahora tres tripulantes de la Mantis, lo cual, justamente nos recuerda a la tripulación del Millenium Falcon o a la del Ghost de Star Wars Rebels. Esta temática de familia de los integrantes de una tripulación, es un tema recurrente dentro de Star Wars con el que claro, estamos fuertemente familiarizados todos los fans. 

Como te decía, la historia de Star Wars Jedi: Fallen Order se ubica cinco años después del final del Episodio III, por lo que estamos en medio de este mundo en el que la esperanza es poca, pues la creación de la Alianza Rebelde, apenas comienza a dar a sus primeros pasos. Algo que es importante mencionar y que la verdad, me encantó del relato del nuevo juego de Respawn, es que el objetivo de nuestros protagonistas no es el de participar en una rebelión militar, es el de instaurar de nuevo la antigua religión Jedi. Debido a esto, las aportaciones que se dan con esta historia completamente nueva a todo lo relacionado con la Fuerza, son sumamente interesantes. No te contaré más para no arruinarte nada, pero estoy seguro de que como fan de Star Wars, quedarás muy contento.

La verdad es que cuando fue revelado, me preocupaba que Cal se convirtiera en un personaje genérico y sin mucha vida, sin embargo, es claro que hubo una fuerte investigación en Respawn para crear a un entrañable protagonista con el cual, es difícil no sentir una fuerte empatía. Creo que lo más interesante de él es que estamos frente a un Padawan que estaba cerca de hacer sus pruebas para convertirse en Caballero Jedi, es decir, es un personaje con poderes y bastante conocimiento, pero también con mucho terreno por recorrer y cosas por aprender, tanto a nivel humano, como de su relación con la Fuerza. 

Por su parte, Greez y Cere son dos muy buenos acompañantes a los que seguramente les tomarás cariño. Greez como esta voz de la experiencia con cierto grado de amargura y humor involuntario muy bien logrado. Y Cere, como este personaje mucho más misterioso que te habla de cosas que al inicio, no hacen mucho sentido pero que sobre todo, a la mitad de la aventura, hacen un fuerte click que te hace entender un montón de cosas sobre ella. Del lado de la Second Sister, me parece que es un villano fuerte y que justamente, se siente directamente sacado de una de las nuevas series animadas de Star Wars. Sin duda un ser temido al que no querrás enfrentarte.

Con la relación entre BD-1 y Cal, tenemos que se utiliza de nueva cuenta esta fórmula en la que nuestro robot hace las veces de una especie de fiel mascota que siempre estará a nuestro lado. El carisma de este nuevo androide es una mezcla entre la ternura de BB-8 y lo sarcástico que puede ser R2-D2. Es un personaje a la segura, pero muy bien escrito que encaja a la perfección con todo lo que se intenta a nivel narrativo en  Star Wars Jedi: Fallen Order, esto sin mencionar lo importante que es para el argumento principal de la historia.

Te puedo decir que he quedado completamente complacido con la historia de Star Wars Jedi: Fallen Order, esto luego de la terrible decepción que me llevé con el pobre y olvidable relato que se nos contó en la campaña de Battlefront II. Lo anterior lo digo porque si bien, es una narrativa que siempre se lleva a la segura, sí hace un par de esfuerzos para ampliar todo lo que gira alrededor del concepto de la Fuerza y el papel de la religión tanto del lado de la luz, como de la oscuridad, en este maravilloso universo de Star Wars.

Siendo un Jedi

Blandir un lightsaber o usar la Fuerza para mover cosas, es algo con lo que muchos de nosotros hemos soñado y que gracias a los videojuegos, hemos podido vivir en cierta medida, claro, a veces con resultados de los que no nos gustaría acordarnos… ¿verdad, Kinect Star Wars? Partiendo de ese fundamento, el equipo de Stig Asmussen a quien seguro recordarás por haber sido el director de God of War III, creó un videojuego que en efecto, te pone en las botas de un Jedi como creo, nadie nunca antes lo había logrado.

La verdad es que desde que se mostró, todos pensamos saber perfectamente qué era Star Wars Jedi: Fallen Order como videojuego, sin embargo, creo que ninguno anticipamos que fuera a ser una mezcla de tantos ingredientes que se fuera a lograr de tan buena forma. El nuevo juego de Respawn es un Metroidvania con un toque de Dark Souls por su estructura general y de progresión. Es un Sekiro: Shadows Die Twice por cómo es que se comportan sus mecánicas de combate. También es un Tomb Raider y hasta un The Legend of Zelda por la manera en la que están construidos sus niveles con puzzles y para rematar, tenemos una fuerte presencia del ADN de Uncharted por estas secciones altamente cinemáticas, pero jugables que por supuesto, nos recuerdan que en cierto punto del proyecto, Amy Heighny estuvo involucrada. 

Creo que antes de pasar a contarte mucho más de la estructura que tiene Star Wars Jedi: Fallen Order y por qué es que no es este juego totalmente lineal que muchos creen, me parece que es importante hablarte de su core gameplay y de todo lo que puedes hacer con Cal Kestis. Al comparar a este título con lo último que hizo FromSoftware, nos referimos a que estamos frente a un juego que basa su combate en justamente el uso de un arma melee como lo es el lightsaber de nuestro protagonista.

Cal, al igual que todos los enemigos a los que te enfrentas, ya sean stormtroopers, monstruos u otra persona con una espada, cuenta con una barra de estamina, la cual, al momento de agotarse te deja totalmente vulnerable a un ataque enemigo. La forma en la que esta barra se gasta, es muy parecida a la barra de postura de Sekiro, es decir, tus movimientos a la ofensiva no consumen estamina, lo que la gasta es tu defensa. De igual forma, cuando uno de los enemigos te agrede y lo repeles con buen timing haciendo un parry, éste quedará a tu merced para acabarlo. El control se siente preciso y muy responsivo. Tal vez no al nivel que vimos en Sekiro, pero sí lo hace de buena forma.

Nuestra defensa también puede ser utilizada para por ejemplo, rebotar un láser que te hayan disparado y sí, el sentimiento de cubrirte en el momento exacto para ver cómo es que un stormtrooper muere con su propio disparo, es brutalmente satisfactorio. Aquí, el dicho de la defensa es la mejor ofensiva, aplica perfectamente.

Además de poder blandir su lightsaber haciendo ataques ligeros o pesados, Cal cuenta con un gran repertorio de trucos Jedi bajo la manga. Podrás atraer o lanzar objetos y enemigos utilizando tu comunión con la Fuerza. También los podrás congelar por unos segundos para después acabarlos. Creo que la integración de estos poderes con toda la mecánica del esgrima funciona a la perfección y más importante aún, sí logran darte ese sentimiento de que estás controlando a un Jedi poderoso, pero también bastante vulnerable si se equivoca.

Hablando de vulnerabilidad, te cuento que Star Wars Jedi: Fallen Order cuenta con cuatro diferentes niveles de dificultad. Desde un llamado Story Mode en el que el reto se anula casi por completo, hasta el Jedi Grand Master en donde tus habilidades de verdad serán puestas a prueba. Mi recomendación es irte por la tercera opción, pues aquí se te ofrece un buen reto, pero que tampoco está al grado de lo que FromSoftware suele hacer. Lo que te quiero decir es que sí te toparás algunos picos de dificultad, pero nada que no puedas superar entendiendo cómo es que debes de aprovechar las habilidades de Cal.

Puede que mi única queja verdadera del combate de Star Wars Jedi: Fallen Order es que la variedad de enemigos no es tan rica como pensé que sería. Sí, están los stormtroopers y fauna de los lugares en varias presentaciones, cada una con interesantes variantes de mecánicas, y de igual forma, creo que los Purge Troopers, nuevos soldados imperiales creados para el juego, son enemigos temidos, pero pasa poco tiempo cuando te das cuenta de que éstos se empiezan a repetir constantemente en todos los planetas que visitas, quitándoles algo de personalidad. Claro que al final, el combate del juego es tan divertido que esto puede ser pasado por alto, pero creo, es algo que notarás.

Algo que indudablemente me hubiera encantado es que nuestro lightsaber tuviera mucha más interacción con los lugares que visitamos. Sé que la idea de poder cortar todo es descabellada, sin embargo, sí me sorprendió que incluso cuando golpeas algunas paredes, éstas no se marquen al menos. Claro que cuando te topas con objetos que sí están diseñados para ser afectados por nuestro sable de luz, el sentimiento es fabuloso, ni qué decir de partir a un insecto o a un robot. Ojo, no hay desmembramiento humano, pero la verdad es que acabar con un stormtrooper a espadazos, se siente genial de todas formas.

Otro detalle que seguro llamará tu atención es que existen muchos cues tanto visuales, como auditivos al momento de estar en combate. Por ejemplo, cuando acabas con todos los stormtroopers con blasters, puede que quienes siguen en batalla, digan una frase como “Demonios, nos hemos quedado sin soporte a distancia”, indicándonos a nosotros los jugadores que ese tipo de enemigos ya fue acabado. De igual forma, tenemos que cuando un enemigo va a hacer un ataque del que no nos podemos cubrir y que tenemos que esquivar, éste se pinta completamente de color rojo. De esto en específico no he sido muy fan, pues si bien, creo que no tiene nada malo que se nos recuerde que estamos en un videojuego, creo que el cue visual pudo haber sido bastante más discreto.

La personalización y progresión de tanto de Cal, como BD-1, es otro aspecto que se trabajó a la segura dentro del juego. Cada vez que subas de nivel, se te dará un Skill Point que podrás cambiar en el árbol de habilidades, el cual, está dividido en poderes de la Fuerza, movimientos con el Lightsaber y capacidades de supervivencia. Aquí podrás aprender nuevos movimientos, así como el ampliar tu barra de salud o de la Fuerza. También hay un apartado para hacer cambios estéticos a ambos personajes, además de que en ciertos puntos, podrás modificar varias partes de tu lightsaber para hacerlo lucir de diferentes maneras. Repito, esto solo es estético y no tiene ningún impacto en el juego.

Conforme vas progresando y explorando los diferentes niveles, tanto Cal, como BD-1, van aprendiendo habilidades que te servirán para alcanzar nuevos puntos dentro de los diferentes mapas. BD-1 podrá abrir puertas, sobre cargar circuitos y hasta servirnos como soporte para cruzar una tirolesa. De igual forma, nuestro robot amigo es el que nos brinda los steam packs que sirven para recuperar nuestra salud. Por su parte, el Padawan tiene la habilidad de tocar algunos objetos y así, ver su pasado, justo como Rey en la nueva trilogía de películas. Este hecho sirve de justificación para que poco a poco, Cal se vaya acordando de su entrenamiento y así, vayamos adquiriendo nuevas habilidades.

Star Wars Jedi: Fallen Order es un juego en el que te vuelves adicto a pelear una vez que te sientes en control de todas sus posibilidades y más importante aún, es un título que de verdad te hace sentir que estás en control de un usuario de la Fuerza. Nos queda claro que Asmussen es un director que entiende perfectamente cómo es que funcionan los juegos de acción y sus mecánicas, tomando su propia experiencia e inspiración de varios lados para entregar algo verdaderamente divertido de controlar.

En una galaxia muy, muy lejana

Después de haberte descrito lo que ya se nos había adelantado en varias ocasiones, creo que es buen momento de pasar a contarte más sobre la estructura de Star Wars Jedi: Fallen Order, la cual, seguramente sorprenderá a más de uno, pues como te decía, de manera superficial parece que justamente estamos frente a un juego completamente lineal en el que todo lo que ocurre a nuestro alrededor, está siguiendo un guión de manera estricta. Lo anterior es falso en cierta medida, pero también muy cierto en otra.

Podríamos decir que la base que soporta a todo dentro de Star Wars Jedi: Fallen Order es una estructura de niveles a la Metroidvania, en la que tendremos que visitar lugares en los que ya estuvimos para ir descubriendo nuevas zonas con las habilidades y poderes que vayas obteniendo. Sí, la exploración es importante y normalmente se te recompensa por ella, pero tampoco diría que es algo crucial. Verás, el nuevo juego de Respawn es uno que fluye de una gran forma, es decir, normalmente sabes perfectamente por donde está el camino que debes seguir, pero también habrá algunos otros en los que  tendrás que consultar este mapa totalmente inspirado en el de los Metroid Prime, para saber qué sendero tienes que seguir. Normalmente se ta de un objetivo, pero no se te dice exactamente cómo es que debes de llegar a él.

Dentro de estos mismos niveles en los que supuestamente tenemos cierta libertad de movimiento y exploración, también hay estas secuencias totalmente guiadas y lineales en las que claro, se nos recuerda mucho a Uncharted, sobre todo por la manera en la que en más de una ocasión, todo alrededor de Cal se está destruyendo o en las que tienes que escalar por ciertas superficies para alcanzar un punto. Me sorprendió bastante la cantidad de platforming que tiene Star Wars Jedi: Fallen Order y más aún, el hecho de que si no haces un salto bien, terminarás cayendo en un precipicio.

Te diría que todos los niveles que visitas en Star Wars Jedi: Fallen Order se siente como un gran puzzle. Respawn no tuvo ninguna clase de miedo que su juego, se viera y se sintiera todo el tiempo justamente como un videojuego. Puede ser que hubiera sido mejor que estos ambientes tuvieran un look un poco más orgánico, sin embargo, estamos frente a un título que no teme presentar de manera bastante cruda su lenguaje a través su fabuloso diseño de niveles. Y para rematar, tenemos que estos intrincados espacios a su vez, contienen áreas totalmente enfocadas a los puzzles que nos recuerdan mucho a los templos de The Legend of Zelda o a la tumbas de los nuevos Tomb Raider, en las que normalmente tienes que usar físicas para resolver los problemas que se te presentan. La integración de las habilidades Jedi de Cal, con los puzzles de los niveles del juego, es verdaderamente buena y digna de destacar.

Para movernos entre los diferentes planetas que visitamos, tenemos que estar abordo de la Mantis. En esta nave podrás encontrar un mapa interestelar para seleccionar tu destino, además de que también es un espacio para meditar, modificar tu lightsaber, interactuar con tus compañeros y hasta coleccionar semillas de diferentes lugares. A pesar de que no es un espacio tan interactivo como nos hubiera gustado, sí es uno que se siente como el hogar de nuestros protagonistas.

Hablando un poco más de la estructura de los niveles de Star Wars Jedi: Fallen Order, es inevitable no mencionar a Dark Souls por varias razones. La primera es la presencia de los puntos de meditación, los cuales, son el equivalente a los bonfire, en donde podemos recuperar nuestra salud y los steam packs que carga BD-1 para poder recuperarnos en combate. Aquí también podrás invertir tus skill points para mejorar a Cal. La cosa es que si descansas, todos los enemigos reaparecen. Este hecho en específico tuvo algunas repercusiones. Si bien, por la forma del juego, esto hace sentido en materia de gameplay, del lado de la narrativa y coherencia de la historia no tanto. Lo anterior lo digo porque no tiene sentido que cada vez que descansemos, las situaciones en las que puedes ver a un grupo de stormtroopers, por ejemplo, siempre sean las mismas sin importar en qué punto de la historia estés. Si en la primera hora viste a un soldado imperial peleando con la fauna del lugar, puedes regresar a ese punto en la hora 20 y se repetirá exactamente lo mismo.

Si llegas a morir en combate, toda la experiencia que hayas obtenido desde el último skill point obtenido, se pederá, esto claro, con la oportunidad de recuperarla si golpeas al menos una vez al enemigo que te mató. Si ces antes de que esto pase, toda esa experiencia sí se perderá para siempre. Claro que aquí estamos hablando de que en realidad no estás subiendo de nivel como tal, solo estás obteniendo una unidad para mejorar tus capacidades, sin embargo, sí llega a ser doloroso perder algo de progreso debido a un descuido. Ya para terminar la comparativa con Dark Souls, te cuento que si bien, los niveles de Star Wars Jedi: Fallen Order están separados al ser representados por diferentes planetas que podemos visitar a placer en cierto punto, son estos laberintos conectados por atajos. Constantemente abrirás una puerta o activarás un elevador para darte cuenta de que estás de regreso en cierto lugar que ya habías visitado, solo que ahora, ya no tienes que hacer un gran rodeo para volver.

El diseño de niveles de  Star Wars Jedi: Fallen Order siempre tuvo en cuenta que antes que nada, se nos tenía que presentar un espacio de juego en el que las habilidades de nuestro personaje pudieran brillar, ser potenciadas y aprovechadas en todo momento. Desde correr por las paredes, jalar una liana para dar un gran salto o empujar una serie de bolas gigantes para ponerlas en su lugar correcto, en el nuevo juego de Respawn siempre sentirás que estás haciendo algo diferente y justo por eso, es que te decía que el título fluye de una gran manera, pues se tiene este gran ritmo gracias a la combinación correcta de secciones de platforming, combate intenso y solución de muy bien diseñados puzzles.  Star Wars Jedi: Fallen Order es un videojuego en toda la extensión de la palabra y no tiene ningún miedo de gritarlo.

Las inconsistencias de Unreal

Al inicio de esta reseña te hacía saber que el hecho de haber elegido Unreal para la creación de Star Wars Jedi: Fallen Order en lugar del problemático Frostbite, me había parecido una decisión de lo más acertada, asunto que reitero pero no sin antes decir que esto vino con algunos altibajos en temas de rendimiento y de consistencia visual que indudablemente notarás en más de una ocasión, sobre todo si tienes planeado jugar en un PS4 o Xbox One estándar.

Lo primero que hay que decir es que en un PS4 Pro y Xbox One X, es posible poner el juego en 4K y a un framerate de 30 cuadros por segundo o, si así lo prefieres, bajar a 1080p para que el juego corra a 60 cuadros. Sin duda alguna, esa última es la que te recomiendo. Por su parte, en PS4 y Xbox One estándar, el título se despliega a 1080p y 30 cuadros por segundo. Aquí es en donde seguro te toparás con algunos problemas de framerate. Sobre todo cuando estás en espacios abiertos, el rendimiento de Star Wars Jedi: Fallen Order sí sufre de manera notoria, asunto indudablemente molesto que esperemos, se corrija pronto con un parche.

Gráficamente estamos frente a un juego mayormente impresionante gracias a una fabulosa dirección de arte y a un fuerte sentimiento de escala que constantemente se nos está presentando, no obstante, también hay momentos en los que el juego nos recuerda que está corriendo en un motor genérico, pues en más de una ocasión puede que te topes con escenarios pobremente logrados en temas de texturas y detalles. Repito. La gran mayoría el tiempo,  Star Wars Jedi: Fallen Order se ve muy bien, pero tiene algunos detalles nada gratos a la vista.

Hablando de vista, algo que también seguro notarás es que hay cortes bastante abruptos entre cinemáticas y gameplay, con todo y que éstas están corriendo en tiempo real. Caso bastante extraño que espero, también se arregle en cierto punto. Esas llegadas de la Mantis a alguno de los puertos mientras varias texturas y objetos no han cargado todavía, es poco ideal.

Del lado del audio no hay ninguna queja, sobre todo con lo que se hizo en su mezcla y edición. Los efectos de sonido del lightsaber de Cal golpeando diferentes tipos de materia, sí te reflejan el enorme poder de esta arma. También puedes esperar que los motores de un Tie Fighter o el crujido del caminar de un AT-AT, te pongan la piel de gallina. Del lado musical tenemos a los talentos de Gordy Haab y Stephen Barton, quienes también trabajaron en Star Wars: The Old Republic y Star Wars: Battlefront, para deleitarnos con arreglos de viejos temas de la saga, así como con nuevas composiciones que sí le añaden bastante sabor a la aventura que estamos teniendo.

Como seguro ya te diste cuenta, el haber usado la más reciente versión de Unreal ha tenido cosas buenas, y otras no tanto. De cualquier forma, te puedo decir que Star Wars Jedi: Fallen Order se siente con la presentación y cuidado que esperarías de cualquier juego AAA de la época. Sí, tiene defectos técnicos de consideración, pero son de esos problemas que se deberían de corregir con un parche. Incluso puede ser que para cuando el juego se lance, éstos se hayan arreglado y que mis quejas caduquen por completo. Esperemos que así sea.

May the force be with you… always

Los fanáticos de Star Wars solemos ser bastante románticos cuando se trata de nuestra querida saga de ciencia ficción. La verdad es que a pesar de lo que se podría pensar por el fracaso en muchos sentidos que representó The Last Jedi y los dos Battlefront, la franquicia está en buenos momentos y en una gran época, pues recordemos, en estos días se dio el estreno de The Mandalorian y muy pronto llegará el esperado Episodio IX. Me parece que Star Wars Jedi: Fallen Order es prueba de que en las manos correctas y sin querer hacer los malabares que quizo hacer Ryan Johnson, los fans somos fáciles de complacer. Es simple saber qué fórmula funciona con todo este universo y justamente, esa fue la filosofía que Respawn aplicó para endulzarla con lo que mejor saben hacer: juegos sumamente divertidos y funcionales.

No sé si al final estemos frente al mejor juego con “Star Wars” en su nombre. De lo que sí estoy seguro es que Electronic Arts finalmente está entregando un producto digno y que cumple no solo con lo que los fans de esta franquicia están esperando, sino con lo que todo consumidor anticipa cuando está pagando por un juego AAA en 2019. Sobra decir que si eres amante de las creaciones de Lucas, Star Wars Jedi: Fallen Order debe de estar dentro de tus prioridades en esta intensa temporada de lanzamientos. También te diría que deberías de checarlo si te gustan los Metroidvania de gran producción. Curioso que estemos frente al segundo juego de este tipo en 2019 luego de lo que fue el increíble Control de Remedy. Ya era justo y necesario que tuviéramos un título de este publisher con grandes posibilidades de quedar en las listas de lo mejor del año, esto sin mencionar lo necesitados que estábamos de que Star Wars tuviera mucho mejor representación en el medio.