Existen muchos factores por los que tal o cual franquicia se convierte en una entrega anual, sin embargo, podemos decir sin temor a equivocarnos que el principal de ellos tiene que ver con su éxito comercial. Desde que Need For Speed II se lanzó en 1997, esta serie de carreras simplemente no se ha detenido (a excepción de 2001), dándonos toda clase de títulos que por supuesto, han tenido sus altibajos. A pesar del muy buen resultado que tuvimos con Need For Speed Rivals en 2013 gracias al trabajo de Ghost Games, Electronic Arts decidió darle un descanso a su IP durante 2014, esto para que en 2015, nos llegue el relanzamiento de la amada saga de autos.
Need For Speed está de regreso con lo que según se dice, es el título definitivo de la franquicia. Nuestras primeras impresiones con este título que está muy próximo a estrenarse son en general bastante positivas, pero algunos elementos hacen que el sentimiento de duda sobre lo que será el producto final, estén muy presentes.
Atomix tuvo la oportunidad de estar en las oficinas de EA en San Francisco, California para probar de manera anticipada este prometedor título de racing. Te contamos qué tal está todo.
Las súper producciones son cada vez más escasas hoy en día. Con el pasar de los años, los publishers que pueden financiar juegos que cuestan varios millones de dólares se han ido diluyendo, por lo que vender una gran cantidad de copias desde su lanzamiento, es más que crucial si hablamos de finanzas.
Para lograr todo lo anterior, es necesario que dichos títulos sean verdaderamente impactantes desde que uno los pone en la consola, esto claro, para cautivar a quien lo está consumiendo. Need For Speed hace justamente esto.
Mi primer par de horas con Need For Speed fueron verdaderamente espectaculares. La presentación gráfica, artística, sonora y en general de gameplay, rápidamente me atraparon, asunto que por supuesto, me hizo comenzar a considerar que en efecto, estaba frente a la versión definitiva de la franquicia.
La forma en la que el juego te va introduciendo a cada una de sus propuestas está perfectamente colocada para que te vayas sumergiendo en su universo, esto prácticamente sin darte cuenta de todo lo que estás aprendiendo en poco tiempo. Lo que quiero decir es que en casi nada, ya sabes controlar el auto básico, hacerle modificaciones visuales y de performance, así como a utilizar la interfaz que nos presenta cada una de las misiones para progresar en la historia.
Te repito, los primeros momentos con Need For Speed serán por demás satisfactorios para cualquiera que le ponga las manos encima, sobre todo si es fanático de la serie. Lo anterior también se puede dar gracias a que de primera instancia, esta nueva entrega nos quiere dar a entender que contiene cada uno de los elementos que han hecho a la serie todo un clásico del género, cosa que por supuesto, puede ser muy positiva pero que si no se maneja de la manera adecuada, puede desembocar en un resultado no esperado.
Mi punto es que este nuevo Need For Speed tiene la principal misión de darle una identidad definitiva a la serie, pues vale la pena recordar que entregas como Underground, Shift, Carbon o Most Wanted, caminaban por terrenos un tanto diferentes que incluso podían hacernos sentir que estábamos frente a juegos de series completamente diferentes.
Cuando uno supera el enamoramiento con Need For Speed, las cosas se comienzan a tornar un poco más claras. Al menos durante las primeras horas de juego, cada uno de los eventos que tenemos que completar, están divididos en solo dos grandes pilares: Drifting y carreras normales, cada uno con la única variación de hacerlo en solitario o con competidores a nuestro lado.
Puede que lo anterior no sea negativo para muchos de los seguidores de la serie, pues si uno se pone a pensar detenidamente en la historia de Need For Speed, la realidad es que siempre se ha tratado de esto; sin embargo, me resulta inevitable considerar el hecho de que al tratarse del reboot de una de las franquicias más importantes del género, no se hayan tomado riesgos más importantes en pro de la innovación.
Todo esto lo expreso después de haber jugado poco más de cinco horas de Need For Speed, asunto que bien podría cambiar un poco más adelante dentro del juego. La cosa es que al final, puede que la repetición tan constante de cada uno de los eventos, te llegue a cansar, sobre todo cuando supuestamente, la experiencia entera del juego está construida sobre cinco pilares principales que a su vez, están basados en los personajes que vemos en la historia, cada uno con una marcada personalidad que nos hace pensar que los retos que nos impongan, serán radicalmente diferentes a los de sus contrapartes, cosa que no pasa como ya te comenté.
Desde su revelación inicial, se nos dejó claro que este era el primer Need For Speed desarrollado teniendo enfoque exclusivamente en el poder de las consolas de actual generación, por lo que uno de los elementos que más sobresaldrían, tenía que ver con el apartado gráfico y sonoro de toda la experiencia.
El poder de Frostbite como motor gráfico está perfectamente probado y Ghost Games nos demuestra que tienen un gran dominio sobre esta tecnología. Need For Speed se ve y se escucha de manera espectacular. Cada uno de los elementos que se le presentan a nuestros ojos y oídos son verdaderamente impresionantes en todo sentido, lo que hace que tengamos una experiencia verdaderamente profunda.
Como seguramente ya sabes, muchas de las cinemáticas de este título están en Full Motion Video, es decir, se usaron actores y escenarios reales para contarnos una historia. Hace unos años, hacer esto habría sido muy mal visto, pues el poder de las consolas simplemente no daba para que todo se sintiera homogéneo, incluso yo era de los que no creían que en 2015, algo como esto no funcionaría correctamente.
Estaba completamente equivocado. El nivel de detalle de los autos es tan sofisticado, que hay cinemáticas en las que estamos viendo una máquina real y con una más que suave transición, el juego cambia a gráficas en tiempo real. Cuando se nos explicó esto, la verdad es que no pude hacer algo más que asombrarme.
De igual forma, Ventura Island, versión ficticia de Los Angeles, brilla por lo muy bien detallada que está. Lo que puede llegar a cansar es que siempre está de noche y con un clima lluvioso. Hay momentos en los que el cielo comienza a despejarse y el amanecer aparece en el horizonte, no obstante, en pocos minutos después, todo regresa a la obscuridad de la nada, cosa que si me lo preguntan, está medio rara.
A excepción de Shift, podemos decir que la serie de Need For Speed siempre se ha mantenido fiel y muy honesta a su forma de interpretar el género. A pesar de que los famosos simuladores como Forza Motorsport y Gran Turismo tiene dominada buena parte del mercado, aún existe un gran número de videojugadores que lejos de buscar tener una experiencia lo más cercana a la realidad, están buscando un título sólido si de gameplay hablamos.
Con Rivals, Ghost Games nos dejó claro que además de saber trabajar de muy buena forma con el Frostbite Engine, entendían perfectamente qué es lo que hace tan divertidos a los juegos de Need For Speed. Un control preciso que reacciona a cada una de las situaciones que se nos presentan y por supuesto, a las modificaciones internas de nuestra máquina, buen diseño de pistas y del escenario en general, son solo algunos elementos que hacen que como videojuego, esta nueva apuesta de Electronic Arts funcione correctamente.
En caso de que estés buscando un Need For Speed que en la parte del gameplay cumpla de manera correcta, seguro que este nuevo juego te dejará muy satisfecho, pues además todo lo que te acabo de platicar, el sentimiento de velocidad está más presente que nunca. Lo refinado que se ha vuelto ese efecto de temblor en la cámara cuando pisamos el acelerador a fondo, hace que sintamos cada uno de los caballos de fuerza que despliega nuestra máquina sobre el asfalto.
Desde hace un par de entregas, EA y sus estudios han hecho un gran esfuerzo para usar a Need For Speed como medio para contar una historia, incluso se lanzó una terrible película el año pasado. Con esta nueva entrega de 2015, se pone sobre la mesa la apuesta más ambiciosa en toda la historia de la IP si de narrativa hablamos, pues tan solo basta con las palabras de productor ejecutivo del juego, el cual, aseguró que además de estar haciendo un videojuego, literalmente rodaron un filme completo.
En Need For Speed estaremos acompañados por Spike, Manu, Amy, Robyn y un personaje misterioso. Cada integrante de este grupo de amigos adictos a la velocidad y adrenalina, cuenta con una personalidad y estilo muy marcada; es decir, cumplir las tareas de cada uno de ellos, nos permitirá ganar reputación (unidad principal del juego) de diferentes formas. Por ejemplo, si tenemos estilo al manejar haciendo drifts y saltos, Manu nos dará puntos, mientras que si lo nuestro es la velocidad y las carreras, la misiones de Spike son para nosotros.
Cada uno de estos personajes son interpretados por actores reales, los cuales, todo el tiempo le hablan a una cámara que nos representa a nosotros los jugadores y que en estos momentos, siempre está en primera persona sin decir nada, cosa que por supuesto, me recordó a cómo es que funciona Link en los juegos de The Legend of Zelda.
La forma en la que están escritos y ejecutados estos individuos me recordó más bien a una caricatura que a una cinta de Fast & Furious, serie en la que según yo, supuestamente está inspirado todo. A lo que me refiero es que a pesar de tener un buen guión, puede pasar que algunos sientan como algo negativo lo sobreactuadas que pueden ser algunas escenas. Need For Speed hace un enorme esfuerzo por hacer que cada uno de sus personajes sea entrañable y justo creo que ahí está el problema. Estar buscando caerle bien a todo el mundo no siempre es lo ideal, lo mejor es tener personajes mucho más sinceros, en mi opinión.
Como sea y a pesar de que el argumento principal y conflictos del juego se sienten bastante extraños en la parte narrativa (al menos en el inicio) la verdad es que no creo que sea como para decir que todo está completamente descarriado y fuera de lugar. Si buscas un extra en Need For Speed, puede que este elemento haga el trabajo.
El tema social llegó para quedarse y actualmente, cuesta trabajo pensar en una súper producción que no lo tenga muy considerado para formar parte de su gameplay y en general de la experiencia. Need For Speed no es la excepción, pues toma el concepto de universos compartidos en un intento por presentarnos un título en el que todos los usuarios son un equipo que debe competir contra la computadora.
En esta entrega, no puedes tomar el control de autos de la policía para cazar a otros jugadores como sucedía en Rivals, por ejemplo. De acuerdo con los desarrolladores, esta determinación se tomó para que la experiencia pueda ser mucho más placentera para todos, es decir, para evitar que vayas muy bien en una carrera y que de pronto, otro usuario te arruine todo al intentar atraparte.
El multiplayer de este nuevo Need For Speed funciona. La verdad es que hacer equipo con siete amigos más para superar cierta prueba de drifting o time trial, es algo muy divertido que casi siempre funciona. La integración de los universos entre jugadores se siente orgánica y no importa si uno de tus amigos va más adelantado o atrasado en la historia, siempre te puedes conectar con él.
La cosa deja de funcionar tan bien cuando los jugadores que están en tu mundo, no tienen tantas ganas de cooperar o simplemente dejan su auto estacionado a medio camino. Es posible que vayas en una carrera a más de 200 kilómetros por hora y de pronto te estrelles contra el coche de un jugador que se paró al baño, por ejemplo.
Creo que esto se da por la simple razón de que es imposible poner pausa en Need For Speed, ni siquiera si presionas el botón de home de tu consola. De todos modos, creo que si Ghost Games ve que la cosa no está funcionando de esa forma, tan solo bastará con un parche para arreglar cualquier inconveniente.
En mi opinión, o el multiplayer de Need For Speed es algo excelente que llevará la experiencia hacia un nuevo nivel, o será algo que la arruine. Veo complicado que nos quedemos en un punto intermedio.
En general, puedo decir que el sabor de boca que me dejaron las primeras horas con Need For Speed es muy grato, sin embargo, existen algunos elementos muy marcados que me hacen tener dudas. El principal de ellos tiene que ver con la aparente falta de innovación en mecánicas de juego y variedad de las mismas. En caso de que esto se cumpla, creo que podríamos estar hablando de un título que a pesar no ser malo ni mucho menos, simplemente se estaría quedando a la mitad, sobre todo si tomamos en cuenta que estamos frente al reboot de una de las franquicias más importantes del género.
Te invitamos a estar muy al pendiente de todos los contenidos que estaremos publicando de nuestra visita a Electronic Arts, por supuesto, incluida la reseña completa de Need For Speed, el cual, se lanza este martes 3 de noviembre. Esperamos tus comentarios al respecto.