Es sorprendente que una sola persona pueda crear juegos fantásticos y memorables. Creo que uno de esos casos podría ser Tunic, título de corte indie que fue presentado en la conferencia de Xbox como exclusiva y que está dando de qué hablar. No sólo por cómo luce y se juega es que ha sido relevante esta semana, también por el hecho de que está siendo creado por una sola persona: Andrew Shouldice.
Tunic nos recuerda lo maravilloso que es crear mundos virtuales. Tan pronto tomas el control es imposible no tener un flashback a nuestra infancia y recordar esas tardes jugando un título de Zelda, especialmente uno como A Link to the Past o los primeros del NES.
Con una propuesta visual isométrica y un sistema de juego fiel a la vieja escuela, en Tunic tomaremos el control de un adorable zorrito con el que tendrás que explorar cada rincón de los niveles para encontrar accesorios valiosos e indispensables para la progresión del juego.
Al jugar por primera vez Tunic te hace sentir vulnerable e indefenso pero conforme avanzas entiendes que atacar es un arte para combatir en el que debes de tener cuidado o morirás muy pronto y así llegar al fin de tu partida. Afortunadamente existen puntos de guardado, pero es claro que Tunic no quiere ser algo fácil para los usuarios.Detrás de ese encantador look hay un juego que obligará a sacar lo mejor de tus habilidades.
Obtener tu espada como el primer paso esencial es lo que te permitirá explorar nuevos niveles y territorios así como la obtención de tu escudo se siente igual que la primera vez que nos sucedió en Zelda. Es un juego que estoy seguro será un obligado a jugar tan pronto salga para los jugadores veteranos. Otro aspecto del sistema de juego para el combate es la acción de “lock on (apuntar como lo hicimos en Ocarina of Time)” apretando el gatillo y un botón para atacar. El reto está en el número de enemigos que salen conforme se avanza y será interesante saber cómo es que funciona la combinación de ítem más adelante.
El estilo visual es, sin duda, una de sus más grandes virtudes con sus colores y formas en conjunto con un sonido exquisito que encaja perfectamente con lo que se ve. Si bien Tunic había sido presentado desde el año pasado, fue en este E3 cuando empezó a tomar más forma y llamar la atención de los asistentes.
Las mecánica de Tunic son simples: ataca, cubre y espera para atacar nuevamente. El reto está en cuidar tu vida al máximo por la falta de elementos de regeneración. El timing y precisión en el combate así como la exploración a fondo son esenciales en esta propuesta que aún no tiene fecha estimada de lanzamiento y que ha sido asegurada como exclusiva para Xbox hasta el momento.
Es poco lo que vimos de Tunic pero nos han quedado muy buenas impresiones. Esperemos que el tiempo de su lanzamiento no esté años luz por lo que implica. En verdad sigan de cerca este título que promete ser la próxima promesa indie de la que todos hablarán…sino es que ya está sucediendo.
