La ciencia ficción es uno de los géneros que más pasiones levantan en el mundo del entretenimiento por lo que a lo largo de su historia, hemos visto a un sin fin de propiedades intelectuales haciendo época. Sin lugar a dudas, una de las más importantes es la de Alien, franquicia que nació en 1979 con una cinta dirigida por Ridley Scott que marcó a toda una generación. La expansión de esta serie no tuvo precedentes, teniendo representación en prácticamente todos los medios. Por supuesto que los videojuegos no se salvaron de lo anterior y a pesar de que en su gran mayoría, los títulos con Xenomorphs son bastante malos, hay unos cuantos que valen mucho la pena. A continuación te presentamos a los que consideramos, son los cinco mejores.
A pesar de que para mediados de los años noventa, la saga de Alien ya se había diluido bastante con películas muy malas y un extraño crossover con Predator, la fiebre por esta serie se encontraba muy encendida. En 1994, Capcom se encargó de lanzar un título para arcade bajo el nombre de Alien VS Predator, el cual, fue muy bien recibido por toda la comunidad. Este beat em’ up muy apegado a lo que se hacía con el género durante la época, presentaba acción verdaderamente frenética con visuales sumamente atractivos. Era impresionante ver el tamaño de los sprites de este título, además de que sus efectos visuales eran toda una locura para el tiempo en el que se lanzaron al mercado.
Después de la auténtica estafa que resultó ser Aliens: Colonial Marines de Gearbox, las ilusiones y expectativas por un nuevo juego de esta serie se encontraban por los suelos, sin embargo, Sega nos demostró que se podían hacer cosas bastante decentes con el Xenomorph y compañía. Alien Isolation tomó la esencia y muchas ideas de la primera cinta de esta franquicia y las adaptó dentro de un survival horror en primera persona en el que tomamos el control de la mismísima hija de Ellen Ripley. La atmósfera de este título es verdaderamente impresionante, pero el logro más importante de toda esta experiencia fue que con un sólo enemigo, se logró crear una experiencia completa que en su gran mayoría funcionaba como debía.
Para inicios de esta década, el nombre de Alien se mantenía con un perfil bastante bajo, esto gracias a que su actividad dentro del cine había sido muy deficiente, sin embargo, un año antes del estreno de Prometheus, Sega y WayForward nos sorprendieron con un fantástico título para el Nintendo DS que muy pocos vieron venir y que por consiguiente, no muchos disfrutaron. Aliens: Infestation estaba basado en la segunda cinta de la saga, asunto que capturó de muy buena forma al ponernos en control de un grupo de marines que debía de irse abriendo paso en escenarios muy bien diseñados. Lo interesante de este juego es que si uno de nuestros personajes moría, éste no regresaba, justo como pasa en título como Fire Emblem, por ejemplo.
Sabemos perfectamente que combinar Alien con Predator nunca fue lo más inteligente del mundo, sin embargo, este crossover siempre tuvo un sabor bastante interesante por alguna extraña razón. Un año antes de que terminara el milenio, Rebellion Developments con el apoyo de diferentes publishers como EA y Fox Interactive, decidió lanzar Aliens versus Predator, un shooter en primera persona que sorpresivamente resultó ser bastante decente. Algo que hasta ese momento no había pasado, es que por fin se nos dio la oportunidad de ponernos en los pies de un Xenomorph. Así es, luego de muchos años de estar matando y sobreviviendo a estas terroríficas criaturas, se nos permitió convertirnos en una de ellas para ahora, nosotros ser los cazadores.
Alien 3 fue una película que causó reacciones muy encontradas entre los fanáticos. La mayoría se encontraba defraudado, pues la verdad es que jamás se sintió como una secuela digna para la maravillosa Aliens de James Cameron. A pesar de eso, Probe Software y LJN decidieron lanzar un título para el Super Nintendo que tuvo resultados bastante positivos. Este título de acción nos ponía en varias de las escenas más icónicas de la cinta, mismas que debíamos de superar echando mano de diferente tipo de armamento. El diseño de niveles era grandioso y los controles se sentían sumamente precisos en todo momento.
