Es un hecho que Halo Infinite resulto por no ser uno de los juegos más queridos de los últimos años, sobre todo porque decepcionó a quienes esperaban algo más sólido en cuestión de multiplayer, y eso se nota al verificar que casi no hay usuarios conectados al servidor. De hecho, hace poco se ha revelado información relevante en la parte de su desarrollo, donde se culpa directamente a los dueños de la saga.
Un excolaborador de 343 Industries, Briggs William Crane, ha señalado directamente a las políticas de contratación de Microsoft como responsables del descenso en la calidad de sus juegos exclusivos, incluido el último juego de la empresa. Crane, quien trabajó en control de calidad, comentó en un vídeo de YouTube que el problema central radica en la manera en que la empresa gestiona sus empleados temporales, lo cual, según él, afecta gravemente el desarrollo de títulos como el popular shooter.
Crane explicó que las políticas limitan la duración de los contratos a 18 meses, lo que crea inestabilidad laboral y dificulta que los desarrolladores alcancen su máximo potencial. Esta rotación constante de empleados genera una fuga de talentos, ya que los trabajadores, una vez capacitados y en pleno dominio de sus funciones, son obligados a salir justo cuando podrían aportar más. Además, destacó que los estudios rivales se benefician de esta situación, ya que absorben a estos talentos en cuanto son despedidos.
También mencionó que una parte significativa de la plantilla en el estudio está compuesta por trabajadores contratados, lo que incluye al equipo responsable de Halo: The Master Chief Collection. Según él, este enfoque ha sido perjudicial no solo para Halo Infinite, sino para otros títulos exclusivos de Xbox. La falta de estabilidad y el ambiente de incertidumbre laboral, sumado a la constante fuga de talentos, han llevado a un notable descenso en la calidad de los juegos de la marca.
Este tipo de problemas señala una tendencia preocupante en la industria, especialmente para los estudios propios de Microsoft. Los juegos exclusivos son fundamentales para el éxito de cualquier plataforma, y la calidad de estos ha sido tradicionalmente un sello distintivo de Xbox. Sin embargo, si no se revisan estas políticas, es posible que el declive continúe afectando la reputación de la compañía, arriesgando su capacidad para competir en un mercado cada vez más exigente.
Vía: YT
