TRENDING
PS4, SWITCH, PC, PS5, XBOX SERIES X, XBOX SERIES S
SWITCH
Mistwalker
Square Enix
05/12/2024
Hironobu Sakaguchi es una de las personas más importantes en la industria de los videojuegos. Su trabajo con Squaresoft durante las décadas de 1980 y 1990 logró popularizar a los JRPG en occidente. El impacto de los Final Fantasy en los que participó es sumamente importante, ayudando tanto al Super Nintendo y al PlayStation a convertirse en las consolas más populares de sus respectivas generaciones. Sin embargo, tras su salida de Square Enix, muchos le perdieron la pista, y es que su trabajo con Mistwalker, el estudio que creó después de dejar a la compañía japonesa con la que muchos lo asociaban, nunca alcanzó la popularidad de sus previas obras. A pesar de ello, fue capaz de entregarnos algunos de los exponentes más interesante del género durante una época en donde el estilo tradicional del JRPG estaba decayendo en occidente, y es algo que continúa haciendo hasta el día hoy.
Durante la generación del PS3 y Xbox 360, Sakaguchi y Mistwalker nos entregaron juegos de culto como Blue Dragon y Lost Odyssey. Sin embargo, tras el lanzamiento de The Last Story en el 2011, el director enfocó todos sus esfuerzos al mercado móvil, algo que ocasionó que su nombre fuera abandonando la boca de los jugadores a nivel mundial. Aunque su legado seguía siendo importante, muchos lo consideraban una reliquia del pasado. Afortunadamente, el director no tomó esto como algo negativo, y en 2018 comenzó a trabajar en un título inspirado en Final Fantasy VI, el cual le daría la oportunidad de demostrar que aún sigue siendo capaz de entregarnos experiencias de calidad. En el 2021 este objetivo se cumplió con el lanzamiento de Fantasian. Lamentablemente, pocos le prestaron atención debido a su exclusividad con Apple Arcade.
Para la fortuna de todos, Fantasian por fin ha dejado las garras de Apple, y dentro de poco estará disponible en consolas con su versión Neo Dimension. De esta forma, no solo el nombre de Sakaguchi vuelve a estar en la boca de todos, sino que la turbulenta relación entre el director y Square Enix parece que por fin se ha enmendado, puesto que los dueños de Final Fantasy son los encargados de la publicación de este esperado título. ¿Es Fantasian Neo Dimension el regreso al JRPG clásico que todos esperábamos? ¿El ser originalmente un juego de móviles afecta a la experiencia? Descubre las respuestas a estas y más preguntas en nuestra Atomix Review.
En más de un sentido, Fantasian es un juego de la época del Super Nintendo. El objetivo de Hironobu Sakaguchi fue hacer un título que se sintiera similar a Final Fantasy VI. Esto quiere decir un gran elenco de personajes memorables en una misión bastante sencilla de entender, en donde el objetivo principal es detener a un Dios y, en el camino, viajar a diferentes mundos. El aspecto macro funciona como un fundamento, y es el apartado que más importancia tiene durante las primeras horas de la aventura, pero una vez que llegamos a la segunda mitad, son los protagonistas, así como sus conflictos internos y externos, los que toman el escenario principal, algo que tiene resultados positivos y negativos.
Fantasian nos presenta a Leo, un joven aventurero que pierde la memoria después de una misión fallida en un mundo de máquinas. Al regresar a su dimensión, se encuentra con un continente infectado por una plaga de otra realidad. Motivado por descubrir su pasado, nuestro protagonista se embarca en una aventura para reencontrarse y, en el camino, ayudar a un grupo de guerreros que se encuentran en una situación similar. Mientras esto sucede, un malvado Dios amenaza con la destrucción total del multiverso y, eventualmente, detenerlo se convierte en la tarea principal que Leo, Kina, Cheryl, Zinikr, Ez y otros más emprenden.
Originalmente, Fantasian llegó a Apple Arcade en dos partes, y esto se nota fácilmente. Las primeras horas del juego son lineales, en donde la exploración está limitada a un par de misiones secundarias. El objetivo aquí es recuperar los recuerdos de Leo y tratar de detener a Vam, el malvado Dios que se interpone en nuestro camino. La narrativa nos lleva de punto a punto de una manera sencilla, creando un ritmo espectacular, en donde 20 horas se sienten como cinco. Más allá de Kina y Cheryl, cada uno de los personajes que encontramos en esta sección tiene como función avanzar la trama de la mejor forma posible, dejando el espacio suficiente para que su personalidad brille en un par de momentos, pero sin robarle el centro de atención al protagonista y su misión principal.
Una vez que llegamos a la segunda mitad, las cosas cambian por completo. Fantasian nos ofrece tres diferentes mundos para explorar, y en lugar de tener un objetivo principal, el juego nos presenta múltiples tareas importantes que puedes cumplir en el orden que más lo desees, esto sin mencionar todas las misiones secundarias y retos opcionales que están escondidos. Si bien la enorme libertad es algo que le da un mayor peso a la exploración, esto afecta el ritmo de la aventura. Debido a que no sabes exactamente qué hacer para avanzar por la trama principal, puedes pasar horas y horas realizando diferentes objetivos sin un sentimiento de progresión. Sin embargo, esto permite que el título se tome el tiempo suficiente para explorar a todos sus personajes de una forma que les da un trasfondo necesario.
Kina, por ejemplo, se une a Leo de una forma poco natural durante la primera mitad del juego, pero una vez que nos encontramos en la segunda mitad, el juego se toma el tiempo necesario para explicar su pasado, la relación que tiene con Cheryl, y la forma en la que se enfrente a su verdadera identidad. Lo mismo sucede con personajes con Zinikr, quienes se lidian con una serie de problemas de identidad que, si bien nunca llegan a ser explorados de una forma que no hayamos visto en el pasado, son bastante entretenidos de ver. Sin embargo, también es cierto que parte del elenco principal no tiene la misma atención, y claramente se nota quiénes son los favoritos.
Junto a esto, la libertad que ofrece la segunda mitad del juego es artificial. Si bien hay múltiples objetivos principales y secundarios disponibles en todo momento, cada uno tiene un nivel recomendado. Sin embargo, cumplir con este requerimiento es una obligación gracias a la alta dificultad del título. Puedes intentar una misión de nivel 47, pero si eres 43, es probable que no puedas completarla, obligándote a realizar otra tarea hasta que estés listo. Esto ocasiona que 10 horas se puedan sentir como 30 horas. Es un balance extraño que afecta sustancialmente la experiencia durante la segunda mitad.
Por un lado, el enfoque que se le da al elenco principal y secundario es bienvenido, ya que los personajes hacen que la experiencia a nivel micro sea mucho más entretenida, pero no existe un balance con el aspecto macro. Como resultado, una vez que retomas la tarea principal, la urgencia que encontramos en la primera mitad desaparece, y en lugar de sentir que todo lo que has hecho durante casi 50 horas te ha llevado a la esperada conclusión, el enfrentamiento final es solo otra tarea más en la lista de objetivos que tienes que cumplir.
Fantasian Neo Dimension sí logra sentirse como un juego de la época de los 16 bits, pero al mismo tiempo falla al capturar lo sencillo que eran estas entregas clásicas. La primera mitad nos presenta una aventura bien construida que logra balancear de gran forma el peligro y la inmediatez de la tarea principal con las carismáticas interacciones del elenco principal. Sin embargo, la segunda parte de la aventura logra romper el gran ritmo y crea una libertad artificial en donde el objetivo principal desaparece durante horas, y si bien el enfoque que se le da a cada personaje hace que sea entretenido recorrer cada mundo, la urgencia e importancia de vencer al Dios en turno nunca se recupera, afectando sustancialmente la experiencia, y no me sorprendería si más de una persona decide abandonar el título a las 30 horas.
Uno de los aspectos por los cuales Fantasian llamó inmediatamente la atención en su momento, fue su apartado visual. En lugar de una estética tradicional, o una dirección de arte estilo pixel art, Mistwalker optó por crear dioramas de todos los escenarios, los cuales digitalizaron y usaron como fondos pre-renderizados en el producto final, algo que no solo ayudó a ahorrar dinero, sino que también le da una identidad única a la experiencia, y el resultado final es un apartado que logra resaltar en todo momento, y ayuda a transmitir la sensación de jugar un JRPG de finales del siglo XX.
Si bien los acercamientos ocasionan que los escenarios se vean algo borrosos, gracias a que el juego usa una cámara fija, siempre vemos los mejores ángulos posibles de cada maqueta. Aunque Fantasian no rompe terreno nuevo durante la primera mitad de su aventura, ya que nos muestra las típicas locaciones de un juego de fantasía con elementos tecnológicos, en la segunda parte encontramos locaciones un poco más atractivas, como un mundo robótico que está construido como una fábrica gigante, y un universo de caos en donde el rojo y el blanco dominan la pantalla, otorgándole una sensación de desolación a una región en decadencia.
Pese a que uno podría llegar a pensar que el uso de dioramas es un truco que rápidamente deja de sorprender al jugador, la realidad es que esto no sucede. Durante toda la aventura es imposible no asombrarse con la atención a detalle que aquí encontramos, y es de admirar el gran trabajo que se hizo para crear cada pueblo, tienda, calabozo, pequeño cuarto y gigante castillo en la vida real. Claro, hay un contraste notorio cuando vemos a los personajes, los cuales están construidos de una forma más tradicional, caminar por estos escenarios. Afortunadamente, todo trabaja a favor del sentimiento de estar jugando un título que bien pudo salir en el PlayStation original.
Si bien el elenco principal no logra resaltar por sus diseños, más allá de la extraña similitud que hay entre Leo y Kainé, el protagonista de NieR, son los monstruos los que se llevan las palmas. Estas son criaturas que toman un par de elementos tradicionales que ya todos conocemos de los animales, pero han sido alterados de una forma que los hace verse más robóticos o como el resultado de un experimento fallido. Aunque el título recae en la clásica práctica de utilizar un repertorio no tan grande y solo cambiar sus colores conforme avanzamos en la historia, siempre es interesante ver todo lo que el juego tiene para nosotros.
Al igual que Lost Odyssey, Fantasian cuenta con una serie de historias que son contadas como si fueran un cuento, con todo e ilustraciones únicas que solo se usan en estas secciones. Cada una de estas partes están bien trabajadas, con una serie de relatos relacionados directamente con la trama principal y enfocados en darle un mayor trasfondo a cada personaje, así como una narración que logra cobijar al jugador con su cálida voz, y un aspecto visual que hace de esta experiencia algo mucho más amena de disfrutar, algo que se agradece considerando la duración de algunas de estas partes.
Fantasian Neo Dimesion no se encarga de mejorar el aspecto visual en comparación con el lanzamiento original de Apple Arcade, y no lo necesita. Lo único que agregan las versiones de consolas es una mayor resolución y, en el caso del Switch, jugar en portátil es algo que se siente 100% natural. El uso de los dioramas es un aspecto que funciona a la perfección con el objetivo de Mistwalker de ofrecer una experiencia sacada de la década de 1990, y le da un toque único al juego que es difícil no apreciar. Si bien los diseños de los personajes caen en lugares comunes, los monstruos logran ofrecer algo llamativo durante la mayor parte de la aventura. Este es un juego lleno de carisma que logra sobresalir en todo momento.
Uno de los aspectos en donde Fantasian Neo Dimension sobresale en comparación con su lanzamiento original, es en el apartado auditivo, y es que esta versión agrega actuaciones de voz, aspecto que, extrañamente, estaba ausente en Apple Arcade. De esta forma, podemos disfrutar de una experiencia completa, en donde la historia tiene un mejor ritmo, y la intención de cada escena se puede disfrutar de mejor forma.
Al igual que muchos aspectos del juego, el trabajo de Mistwalker cumple muy bien su trabajo, pero en ningún momento ofrece algo que sea sobresaliente. Cada uno de los actores de voz logra encapsular sus roles a la perfección, como la realeza que hay en Cheryl, la juventud de Ez, y la edad y sabiduría de Zinikr. Sin embargo, los momentos más sobresalientes no están protagonizados por ninguno de estos personajes, sino que las secciones de voz más memorables son los pequeños cuentos en donde una narración nos guía por el pasado de alguien miembro del equipo. Notablemente, el cuento opcional, el cual es básicamente Pinocho, logra ser tan efectivo gracias a la forma en la que esta persona logra transmitir diferentes emociones e incluso darle vida a dos robots de una forma que un padre lo haría para su hijo antes de dormir.
Por su parte, Fantasian no solo representa el regreso de Sakaguchi como director, sino que también nos ofrece un soundtrack a cargo de Nobuo Uematsu y, como era de esperarse, lo que el legendario compositor nos presenta es calidad pura. Si bien su trabajo es de primer nivel, en donde encontramos canciones que utilizan instrumentos como el acordeón y una exploración electrónica que nos demuestran que Uematsu sigue experimentando en cada una de sus participaciones, el resultado final no es tan memorable como a muchos les gustaría.
El tema de batalla principal, por ejemplo, rápidamente se vuelve repetitivo, y es probable que muchos se harten de él. Afortunadamente, el resto de composiciones de este estilo logran resaltar más, y hacen que cada pelea contra jefe, mini jefe y momento importante logre resaltar. Sin embargo, también hay un par de canciones que suenan muy similar a lo que escuchamos en Final Fantasy VIII, lo cual tiene sentido, pero es probable que sorprenda a más de una persona.
Continuando con las novedades que nos ofrece la versión Neo Dimension, gracias a que Square Enix publica este título, encontramos múltiples canciones de Final Fantasy dentro del soundtrack. Estas composiciones son usadas solo para los temas de batalla, y sustituyen el nuevo trabajo de Uematsu, por sus clásicas composiciones, lo cual funciona muy bien en ciertas secciones, pero en otras sobresale de más.
Fantasian Neo Dimension nos ofrece una gran experiencia auditiva. El trabajo de voces complementa de gran forma la historia, y resulta extraño que hubo un tiempo en donde este apartado simplemente no existía. La música, por su parte, tal vez no sea el mejor trabajo de Uematsu, pero sigue siendo un apartado lleno de calidad, y uno que le dio al compositor el espacio suficiente para experimentar con géneros e instrumentos, que es en donde el juego brilla más, y el agregado de Final Fantasy es algo que a muchos les gustará, pero le roba la atención a la música que ya está aquí.
Al igual que su presentación visual e historia, Fantasian Neo Dimension nos ofrece un gameplay muy tradicional para el género. Si bien el juego tiene dos enfoques diferentes en cuanto a progresión y exploración, los conceptos del sistema de combate se mantienen sencillos en todo momento, al grado de que cualquier persona que tenga una idea de qué es un JRPG, podrá empezar a jugar sin algún problema, lo cual es uno de los puntos positivos que tiene el título. Cualquiera puede comenzar esta aventura y disfrutar de ella sin algún tipo de problema gracias a lo sencilla que es, aunque esto pueda ser un problema para algunas personas.
Fantasian nos presenta un sistema JRPG por turnos muy tradicional, en donde un equipo de tres personajes se enfrenta un repertorio de enemigos mientras atraviesa uno de los tantos calabozos con algún jefe resguardando un ítem especial o el siguiente capítulo de la historia. Lo que hace interesante a esta entrega es la enorme cantidad de enemigos con los que tienes que pelear, así como el sistema de dimengeon, los cuales van de la mano para hacer que la experiencia no sea tan pesada, eliminando los encuentros random y ofreciendo un sistema enfocado en hacer la mayor cantidad de daño posible a un gran grupo de contrincantes.
Si bien el juego nos da la oportunidad de recorrer cada calabozo de una forma tradicional, en donde peleas con enemigos de una forma al azar de forma constante, Fantasian incluye un sistema conocido como dimengeon, el cual no permite almacenar a todos los enemigos que usualmente encontramos cada 10 pasos, y los lleva a una dimensión especial que funciona como una cárcel. Una vez que las celdas se llenan, es momento de pelear contra todos los contrincantes al mismo tiempo. Esto significa que en lugar de tener cinco o seis enfrentamientos, cada uno conformado por tres o cuatro rivales, solo tendrás que someterte a uno en donde tienes que pelear contra un ejército conformado por 30 o hasta 50 monstruos, los cuales van apareciendo de forma gradual conforme derrotas a cada uno.
Esto es un arma de doble filo. Por un lado, elimina lo tedioso que es tener que detenerse de forma constante, pero también te pone en una situación en donde, si no estás listo, es muy probable que pierdas ante un gran grupo de enemigos. Afortunadamente, el sistema de combate está construido para que esta sea una tarea fácil. Cada personaje cuenta con una serie de habilidades especiales que son capaces de atravesar a los enemigos en línea recta, curva, o causar daño en una zona específica, los cuales puedes ajustar para atacar a la mayor cantidad de enemigos. Esto quiere decir que el objeto de cada enfrentamiento no está en derrotar a un contrincante a la vez, sino que tienes que vencer a múltiples objetivos en un instante. Gracias a que el juego marca el orden de los turnos, es muy fácil enfocarte en un par de monstruos que se interponen entre los miembros del equipo. Si juegas bien tus cartas, no sufrirás daño en estos combates.
La única excepción a los combates dimengeon son los jefes, los cuales utilizan tácticas que involucran pequeños ayudantes o tienen múltiples elementos que puedes atacar. Estos son los mejores enfrentamientos de todo el juego, puesto que ponen a prueba tus habilidades con las mecánicas del combate. Junto a esto, cada uno cuenta con un elemento especial que te obliga a cambiar tu estrategia al instante, ya sea que tienes que atacar cierta parte de cuerpo para evitar un ataque destructivo, o es necesario usar diferentes movimientos dependiendo de si hay una barrera en el camino o no.
Para todo esto, tienes a tu disposición ocho personajes, cada uno con un enfoque en cierto elemento y todos se sienten lo suficientemente únicos para que constantemente cambies a tu equipo. Zinikr, por ejemplo, no solo puede hacer daño de tierra, sino que es capaz de atraer la atención de los enemigos y hacer uso de una habilidad que reduce todo el daño que recibe. Prickle, por su parte, tine el poder de crear escudos que eliminan por completo cierta cantidad de ataques enemigos. Kina es la curandera. Valrika disminuye el ataque y la defensa de tus contrincantes. Cada uno se complementa a la perfección con el resto.
Por su parte, la división del juego en dos partes se llega a sentir especialmente fuerte en el gameplay. La primera mitad del juego es completamente lineal, y el título determina el equipo que vas a tener en determinado momento. La segunda parte es más abierta, y tienes la oportunidad de visitar cada área en el orden que lo desees, junto a la agrupación que consideres adecuada para alguna tarea adecuada. Junto a esto, una vez que llegas a la segunda sección se introduce un árbol de habilidades que ofrece más opciones de personalización al momento de crear a la pandilla que mejor te agrade. Sin embargo, no puedes aprovechar por completo esto gracias a la alta dificultad y a la extraña repartición de puntos de experiencia.
Fantasian Neo Dimension es un juego difícil, especialmente conforme nos acercamos al final. Lo extraño, es que una vez que llegas al nivel 35, la cantidad de experiencia que recibes disminuye sustancialmente, al grado de que puedes vencer a dos o tres jefes, y solo subir un nivel. Esto no solo provoca que no explores adecuadamente el árbol de habilidades, sino que hace que cada enfrentamiento sea más complicado de lo que debería, y reduce sustancialmente el impacto del sistema dimengeon. Al no ganar tanta experiencia, el pelear contra 50 enemigos ya no tiene el mismo peso, y termina por ser algo tedioso.
Este es el mayor problema que presenta Fantasian. La segunda mitad es un gran contraste que probablemente aleje a más de una persona. Neo Dimension, por su parte, introduce una dificultad que reduce la complejidad de los enfrentamientos, la cual es más que bienvenida, pero aun así el título sigue presentando un alto reto. No es imposible llegar a los créditos finales, pero es más complicado de lo que debería. Al final del día, esto estropea la aventura en sus últimas horas, y alcanzar a los créditos finales se llega a sentir como un compromiso.
Fantasian Neo Dimension es una gran mirada al pasado, una en donde todo era más simple. El más reciente trabajo de Hironobu Sakaguchi, más que innovar en conceptos que ya todos conocemos, se enfoca en ofrecer una experiencia entretenida que reduce algunos de los elementos monótonos que encontramos en el género por medio de sistemas que hacen que los combates sean más rápidos y complejos, algo que seguramente surgió al momento de crear un título que originalmente estaba planeado para dispositivos móviles. Si bien es cierto que la segunda mitad de la experiencia no es tan fuerte como las primeras horas, y comete varios errores que pueden arruinar la experiencia de más de uno, Fantasian sigue siendo un JRPG que todos los amantes del género pueden apreciar.
Fantasian Neo Dimension es un regreso a la fórmula tradicional del JRPG, aunque no se olvida de que es un juego contemporáneo. La historia, aunque muy sencilla, brilla en las interacciones entre personajes. La primera mitad tiene un gran énfasis en la aventura en general, mientras que la segunda sección permite que el jugador conozca de mejor forma al equipo que lo acompaña. Si bien esta estructura no siempre es óptima, el resultado sigue siendo entretenido, con una serie de secuencias interesantes, y personajes entrañables.
El uso de dioramas no solo es un elemento que le ofrece una identidad visual al juego, sino que también funciona a su favor al momento de crear una experiencia que se siente sacada directamente de la colección de PlayStation que cualquier niño tendría en 1999. Uno de los mejores apartados de la versión Neo Dimension son las voces, las cuales elevan sustancialmente la historia. La música de Nobuo Uematsu es la joya de la corona, y si bien la integración de composiciones de Final Fantasy puede opacar el trabajo original, es bueno ver que el compositor aún tiene el espacio para experimentar con diversas ideas, entregando resultados generalmente positivos.
El gameplay es sencillo y adictivo. Las mecánicas de combate son fáciles de entender, y se complementan a la perfección con el sistema de dimengeon, eliminando parte de lo tedioso que puede ser un JRPG clásico, y sustituyéndolo por una alternativa que pone a prueba las habilidades de cada jugador. Si bien la segunda parte comete un par de errores, alejando a más de una persona por su alta dificultad y lenta progresión, el resultado final sigue siendo entretenido, y todos aquellos que buscan un reto, lo encontrarán aquí.
En una época en donde cada JRPG nos ofrece experiencias complejas, con cientos de horas de contenido y múltiples sistemas a nuestra disposición, Fantasian Neo Dimension es un pequeño chocolate de baileys. La primera mordida es algo que todos pueden apreciar, lo dulce atrapa inmediatamente al jugador, pero una vez que llegas al final del bocado, es probable que sientas algo demasiado fuerte para ti, pero al mismo tiempo es adictivo, y es difícil no comerte otro.