Entre los diversos estudios de animación japonesa, Bones cuenta con un lugar especial entre los fans del anime. La productora ha estado detrás de megaproducciones como Eureka Seven (ahora en un revival dividido en tres películas), Wolf’s Rain, Soul Eater y la exitosa My Hero Academia (Boku no Hero Academia), al igual que Bungo Stray Dogs y que llevaron a la pantalla chica en 2014. La obra original de Kafka Asagiri combina elementos por los cuales Bones es conocido; una estética impecable, personajes complejos y que muestran sus oscuros matices con el paso de los episodios. En el caso de Dead Apple, su primera película, las cosas no cambian demasiado.
LA LITERATURA TOMA FORMA HUMANA… Y SOBRENATURAL
Como te compartía, Bungo Stray Dogs ya lleva un par de años en tendencia, moviéndose en la escena del anime gracias a sus dos temporadas y una OVA. Pero, ¿de qué va la obra? Asagiri-san creó un mundo de apariencia pop, pero cuyos personajes guardan oscuros secretos y enormes poderes, además de devastadores. Teniendo como protagonista a Atsushi Nakajima, Bungo Stray Dogs nos cuenta la historia de una agencia de investigación que se encarga de los casos más extremos entre los cuales, sí, se destacan los súper poderes, la magia y lo sobrenatural.
No obstante, la obra tiene tiempo para el buen fanservice yaoi, la violencia y la introspección, pues tanto los personajes como sus poderes están inspirados en autores de la literatura japonesa y universal como Osamu Dazai, Edogawa Ranpo (conocido por sus relatos de terror y exponente del Ero-Guro), H.P. Lovecraft, Fyodor Dostoyevsky y muchos más. A diferencia de otras series que se clasifican de inmediato como yaoi, Bungo Stray Dogs solo tiene algunos toques de esta demografía, pues se enfoca en la pelea de bandos y la resolución de casos paranormales, mientras se va tejiendo una guerra entre los mismos dotados, como se le denomina a estas personas excepcionales.
Una vieja queja de las películas de anime es que, a menos que sean un recuento, es difícil seguir el hilo de sus tramas; en el caso de Bungo Stray Dogs no es que la regla se cumpla, pero tampoco sale exento de la misma. Verás; si bien se dan algunos matices de los personajes y podrías no entender algunas “enemistades”, lo cierto es que, si eres un seguidor de la serie o al menos has visto la primera temporada anime, disfrutarás muchas de las situaciones en la película.
UN LIGERO TROPIEZO PARA BONES
Dead Apple nos lleva a un momento en el cual la guerra entre bandos de los dotados no ha calmado, sino todo lo contrario; tras un suceso devastador, una extraña neblina se apodera de la ciudad de Yokohama, haciendo que los propios poderes de los dotados se pongan en su contra. Quién lo ha hecho y porqué es la misión de esta película (que roza en los 90 minutos) y peca de una animación envidiable casi toda su duración.
Takuya Igarashi-san repite su rol como director de la serie animada en Dead Apple, por lo cual hay gran continuidad en la personalidad de los involucrados, al igual que funge como un gran aliciente para todo aquel que esté familiarizado con Bungo Stray Dogs. Por otro lado, Bones hace que Dead Apple funja como un repliegue de presupuesto bien invertido, cuya animación roza en la excelencia… salvo el último acto de la cinta. Usualmente este acto sirve para tener peleas bestiales y efectos especiales por doquier, aunque, en mi opinión, todo esto no logra maquillar la falta de detalle en los personajes y los matices en su ropa y expresiones. Sin duda es algo que deja un precedente para todo aquel que adore ver anime en el cine.
Bones hace que “Dead Apple” funja como un repliegue de presupuesto bien invertido, cuya animación roza en la excelencia… salvo en el último acto de la cinta.
Sin embargo, la música es mucho más “pop” que apoteósica, a pesar de los momentos de extrema introspección y revelaciones que se hacen en Dead Apple, mientras la resolución que Yoji Enokido-san (autor del libreto) no le hace justicia a los primeros 60 minutos de la película. No hablemos ya de atar los cabos sueltos, sino una resolución que no solo es veloz, sino que aporta poco al universo de Bungo Stray Dogs.
Por otro lado, siempre es grato ver que el período de tiempo entre los lanzamientos de estas películas en Japón y su exhibición en México no dejan de acortarse, pues Bungo Stray Dogs: Dead Apple se lanzó en abril de este año. En lo que respecta a la calidad de la adaptación y los subtítulos, KEM Media ha hecho una labor muy buena y que no deja de superarse; la calidad del sonido es impresionante (lo cual simboliza una compresión casi nula) y que ya habíamos podido experimentar en cintas como The Irregular at Magic High School.
EL DULCE SABOR DE LA VERDAD
Bungo Stray Dogs: Dead Apple podrá decaer en su último acto, pero esto no arruina el resto de la experiencia. Para los seguidores de la obra de Kafka Asagiri, el rediseño a manos de Bones y su impresionante calidad de animación serán un deleite durante la mayor parte de la película, mientras el público que goce de personajes con problemas existenciales, los súper poderes y la violencia (aderezado con una pizca de yaoi) se sentirán como en casa.
Dead Apple es una gran confrontación, que carece de un último acto memorable, aunque continúa forjando el camino de las producciones niponas en cines mexicanos.
Bungo Stray Dogs: Dead Apple estará disponible en cines de México este 25 y 26 de agosto.
