3DS
3DS
Atlus
Atlus
16/02/2018
La cantidad de RPGs que se producen en todo el mundo es verdaderamente abrumante. A pesar de que muchos anticipaban la muerte del género hace unos años, quienes se dedican a hacer este tipo de juegos han encontrado la manera no sólo de mantenerse vigentes, sino de entender cómo es que estas experiencias consigan atacar a audiencias de todos los niveles. Lo anterior nos ha beneficiado enormemente a quienes amamos los juegos de rol, pues constantemente estamos recibiendo propuestas de distintos tipos. En 2010, Atlus, uno de los desarrolladores que cargan con parte del estandarte del género en Japón, lanzó para el Nintendo DS, Radiant Historia, título que nos recordó una vez más lo mágico que es traer un gran mundo dentro de una consola para llevar. Estamos en 2018 y Radiant Historia: Perfect Chronology ha aterrizado en el eterno 3DS con el objetivo de difundir esta fantástica obra creada por gente que también ha estado involucrada en Shin Megami Tensei.
Hablar de nueva cuenta de si es bueno o no ponerle atención a un port o remasterización de un juego lanzado hace casi 10 años, me parece totalmente inútil, pues como lo he expresado en más de una ocasión, este tipo de productos pueden ser vistos de distintos puntos de vista. Yo prefiero pensar que es una grandiosa oportunidad para entrarle a algo que se te pudo haber pasado, pues aceptémoslo, es simplemente imposible jugar todo lo que se está lanzando, o por qué no, para revivir algún título que disfrutaste hace tiempo. Radiant Historia: Perfect Chronology es justamente eso, la reaparición de un gran JRPG que se pudo haber perdido entre las montañas de juegos que se publicaban a diario en el DS y que ahora, puede ser disfrutado en la comodidad de un 3DS.
Siempre suele ser complicado colocar en alguna categoría a algo como Radiant Historia: Perfect Chronology, esto gracias a la falta de formalización de términos como remake o remasterización. Al menos desde mi forma de ver las cosas, estamos frente a un port con toques de remasterización y algunos extras que seguro agradecerá quien haya jugado la versión original de Radiant Historia. Claro que la pregunta de si vale o no la pena regresar está sobre la mesa, misma que al final, depende enormemente del perfil de cada persona.
De entrada te puedo comentar que Radiant Historia: Perfect Chronology nos presenta una resolución aumentada respecto a la versión original. Ahora, el juego corre a 800×240, es decir, de manera nativa 1:1 en la pantalla del 3DS. Esto por supuesto que es una gran noticia, pues hace que los sprites 2D del juego, así como sus escenarios 3D, se vean de muy buena forma. La mala noticia es que el juego no usa el 3D estereoscopico de la portátil. Un extraño problema que detecté es que cuando tienes activada esta característica y sólo dentro de cinemáticas, se produce una especie de V-Sync error sólo dentro de los sprites. Dicho asunto se reduce bastante cuando apagas por completo el 3D, pero igualmente se llega a notar por momentos.
Pasando de manera más concreta a los extras que vienen con Radiant Historia: Perfect Chronology, tenemos que ahora casi todos los diálogos de los personajes principales, cuentan con voces de actores reales. La ejecución es bastante buena, pues a pesar de que no se pueden poner en japonés, su versión en inglés es muy decente. En caso de quieras una experiencia más cercana a la original, puedes apagar estas voces y basarte por completo en lo que se vaya contando en los textos.
Lo anterior es bien recibido, pero podríamos decir que la verdadera razón para regresar a Radiant Historia es la tercera línea del tiempo que presenta. Algo que es importante mencionar es que antes de empezar con tu aventura, el juego te pregunta si quieres iniciar con la experiencia original o prefieres que este nuevo arco narrativo sea agregado. Por supuesto que la recomendación es que si no habías jugado este título antes, elijas la opción de que no se te agregue el extra desde el inicio.
Esta nueva línea de tiempo es básicamente una tercera rama de toda la historia que compone al juego. Además de mostrar hechos y eventos que no vimos en la versión original, nos presenta a una nueva personaje llamada Nemesia, la cual, evidentemente es de suma importancia para el desarrollo de esta nueva narrativa. Sin arruinarte nada, te puedo decir que a pesar de ser breve, el funcionamiento y aportaciones de esta adición, son sumamente interesantes y sin lugar a dudas, algo que no te deberías perder.
No todos los juegos se atreven a poner palabras como “Historia”, “History” o similares dentro de su título, pues de entrada, se nos está vendiendo la idea que viviremos un relato muy especial en comparación con cualquier otra cosa, más si tomas en cuenta que estamos frente a un género que depende en buena forma de cómo es que nos presenta su narrativa. Radiant Historia: Perfect Chronology le hace honor a su nombre, relatando hechos que son emocionantes, sentimentales y sumamente personales casi en todo momento, causando que fácilmente te enamores de la mayoría de sus personajes gracias al excelente guión que escribió Yoh Haduki, Souzou Tonami y Kazuhito Okayama.
La historia de Radiant Historia: Perfect Chronology arranca en medio de una fuerte crisis política y humanitaria. El continente de Vainqueur está siendo siendo consumido por una plaga que convierte a las personas en arena y que acaba con la tierra fértil. Dicho asunto aviva las tensiones entre Alistel y Granorg, dos reinos que llevan en guerra una buena cantidad de tiempo y que por supuesto, los tiene muy desesperados.
Aquí es donde entra Stocke, agente de la inteligencia de Alistel que recibe como misión ir a rescatar a un espía que supuestamente trae consigo información crucial que daría un giro a la guerra. En cierto punto del prólogo, algo sucede y el protagonista recibe los poderes de un libro místico que le permite a su poseedor, viajar en el tiempo a ciertos puntos para cambiar la historia. Dicho elemento es lo que le da esencia a Radiant Historia: Perfect Chronology y lo diferencia de otros RPGs. Un poco más adelante te detallaré cómo es que funciona todo este asunto, pues es un poco complicado.
Lo que te puedo contar sin arruinarte nada ni hacerte un spoiler de importancia, es que además de que tenemos personajes entrañables y situaciones memorables, todo este asunto de poder regresar en el tiempo para cambiar algún hecho, hace que la narrativa tome un sabor bastante especial. Resulta sumamente curioso ver a los otros personajes preocupados por cierta situación de peligro que por supuesto, nosotros ya vivimos en cierto momento. La verdad es que me sigue volando la mente el nivel de complejidad y profundidad que el equipo de escritores del juego alcanzó, pues básicamente puedes saltar entre distintos momentos constantemente sin que la historia pierda el hilo o el sentido.
Algo que siempre se disfruta de cualquier historia que se nos cuenta es lo impredecible que puede ser, es decir, que en realidad no sepamos bien hacia dónde nos está llevando el autor. Radiant Historia: Perfect Chronology es un juego que cumple con esto de manera magistral, pues básicamente no sabes qué efecto pueda tener alguna de las decisiones que tomes o hacia qué lado te pueda llevar. Tal vez ese camino que creíste que tendría un desenlace bueno, en realidad sea un callejón sin salida que cause que forzosamente tengas que regresar en el tiempo para cambiar alguno de tus movimientos.
Como te decía en los párrafos anteriores, la principal característica de Radiant Historia: Perfect Chronology tiene que ver con que podemos viajar a placer entre las diferentes líneas que se van formando, esto para modificar ciertos hechos de la historia y así, abrir nuevas posibilidades. A pesar de que en efecto, todo está preconstruido y guiado por un guión previamente escrito, la complejidad de la estructura del juego hace un maravilloso trabajo creando la ilusión de que somos nosotros los que estamos en control de cómo es que se van desenvolviendo todos los hechos.
Todo el viaje en el tiempo de Radiant Historia: Perfect Chronology funciona de la siguiente manera. Conforme vas progresando en la historia, te encuentras con hechos cruciales, los cuales normalmente tienen dos caminos distintos que podamos tomar. Dependiendo de lo que escojas, será la línea temporal que se abrirá. Algunas de ellas terminan en un callejón sin salida que no te deja progresar más, por lo que tienes que regresar en el tiempo para cambiar tu decisión. De igual forma, los caminos que tomes cambian la forma en la que te relaciones con otros personajes.
También es posible que ninguna de las elecciones que hagas te sirva para progresar. Por ejemplo, hay un punto en el que se te pide elegir entre esperar a un informante o mejor adelantarte a una batalla. Si te adelantas, sucede algo verdaderamente malo, mientras que si esperas, te das cuenta de que dicho personaje jamás llegará. Posteriormente se te informa que alguien más está cambiando las líneas de tiempo, por lo que tienes que regresar para avanzar en otro arco histórico y así, generar la situación que permita que el informante que te menciono, aparezca con lo que necesitamos para seguir adelante en el camino original que habíamos tomado.
Un punto bastante interesante es que el daño, niveles que ganes y demás modificaciones que le hagas a tus personajes, no cambiarán si regresas en el tiempo. La explicación narrativa que se le da a esto es bastante simplona, pero hubiera sido todo un desbarajuste si esto no funcionara así.
¿Te suena complicado? No te culpo. Al inicio puede parecer un verdadero desorden todo lo que está pasando dentro de Radiant Historia: Perfect Chronology, pero conforme vas conectando puntos, te das cuenta del maravilloso trabajo que se hizo para que la narrativa no pierda sentido y que incluso, este asunto de estar saltando entre líneas del tiempo le dé un sabor sumamente especial a la experiencia que estás teniendo. No creo que sea prudente compararlo con algo como Chrono Trigger, pero también resulta inevitable no recordar lo que Square Soft hizo hace ya tanto tiempo con toda la temática de viajar en el tiempo.
Sobre la estructura de los niveles que exploras dentro de Radiant Historia: Perfect Chronology, te comento que estamos frente a escenarios con diseño de calabozo bastante clásico; es decir, recorres amplios lugares compuestos por pasillos que a su vez, lucen distintos tipos de enemigos, así como puzzles que debemos de resolver, por lo que este elemento dentro del juego, también funciona de gran forma. Algo que es también importante de resaltar es que los encuentros con enemigos no se dan de manera aleatoria, por lo que siempre puedes decidir si entrar en combate o no.
Te repito. La idea de traer un juego de estas dimensiones que por cierto, al menos te tomará unas 30 horas de completar, en algo como un 3DS, me parece increíblemente encantador y hasta irresistible. No digo que todo lo que haga Radiant Historia: Perfect Chronology sea totalmente original, pero la verdad es que tenía tiempo que no jugaba algo que se sintiera tan fresco y distinto a otras cosas que pudieran lucir similares en su superficie.
Muchos podrían pensar que el concepto de viaje en el tiempo y creación de distintos arcos históricos, representaría suficiente complicación para que Atlus se hiciera más difícil la vida diseñando un sistema de combate con diferentes variantes que de primera instancia, podrían parecer tradicionales pero que en poco tiempo, te das cuenta que sus elementos de estrategia harán que de verdad te tengas que poner a pensar para poder salir adelante en las peleas más importantes.
La base de las mecánicas de juego de Radiant Historia: Perfect Chronology es un sistema de combate por turnos, en el que eliges distintos tipos de ataque o defensa entre los miembros de tu party. La cosa se pone interesante por la forma en la que se colocan los enemigos. Éstos Individuos aparecen en una cuadrícula de 3×3, en la que el lugar que ocupen afecta directamente sus stats. Por ejemplo, si uno de ellos nos golpea estando en la línea más cercana a nuestros personajes, el daño que les hará es mayor.
Lo anterior nos lleva a todo el tema de combos y skills. Algunos de los skills que tenemos a la mano tienen el poder de mover a los enemigos del espacio en el que estén. Por ejemplo, podemos lanzar a uno de los que esté enfrente a un espacio de los de atrás. Si éste cae en un cuadro ya ocupado por otro personaje, éste segundo también recibe el daño hecho. De esta forma puedes armar combos. Si primero juntas a dos enemigos con el skill de uno de nuestros personajes y posteriormente atacas con otro, se empieza a armar una cadena. Entre más larga sea la cadena, más daño haces y al final del enfrentamiento, recibes más experiencia para subir de nivel.
Otro punto sumamente interesante es la forma en la que se van dando los turnos de cada uno de los involucrados en la batalla. Dependiendo de su velocidad o status, será el punto en el que cierto personaje podrá actuar. En caso de que quieras usar a cierto personaje pero no sea su turno, se lo puedes ceder, la cosa es que quien ceda su turno, queda completamente vulnerable a ataques enemigos, recibiendo daño adicional. Toda esta mecánica le agrega muchísima profundidad al gameplay de Radiant Historia: Perfect Chronology, pues el pensar a futuro es crucial para salir con la victoria.
La cantidad de variantes que hay en cada combate de Radiant Historia: Perfect Chronology es impresionante, haciendo que cada uno de ellos sea sumamente emocionante y que el grinding, no se reduzca a apretar sólo un botón sin estar pensando en muchas cosas. Sí, la base de todo tiene que ver con la tradición de actuar por turnos, pero cosas como la cuadrícula en la que se mueven los enemigos, así como el sistema en el que se asignan los turnos, por momentos me hicieron sentir que estaban jugando un RPG de estrategia o algo por el estilo.
Contrario a lo que se pensaba a mediados de los años noventa cuando vino la revolución de las gráficas en 3D, los sprites en 2D siguen sumamente presentes en la industria no sólo entre desarrolladores independientes, sino también en grandes estudios. Claro que para cuando salió la versión original de Radiant Historia en 2010, seguía siendo común ver juegos de todo tipo que usaran assets planos, pero su look, sin lugar a dudas nos regresaba de manera muy marcada a aquella era dorada de los 16 bits.
Ahora, con Radiant Historia: Perfect Chronology en el 3DS, la sensacional dirección artística de este juego resalta como pocas cosas. La definición de cada uno de los sprites que vemos en pantalla es sensacional, lo cual es fácil de notar gracias a su enorme tamaño. De igual forma, la gran cantidad de animaciones que tiene cada personaje dentro y fuera de batalla, hace que cada uno de ellos cobre vida. Puede que algunas las texturas de los escenarios en 3D que componen al juego no estén en la mejor calidad del mundo, sin embargo, me parece que cumplen, pero si me lo preguntan, preferiría que el juego estuviera construido 100 por ciento con pixel art.
En general, el estilo de Radiant Historia: Perfect Chronology nos recuerda mucho a lo que hizo Final Fantasy VI hace ya tanto años, el cual, justamente combinaba elementos de fantasía medieval, con algunos de ciencia ficción y hasta steampunk. No sé exactamente por qué estos dos o tres géneros saben tan bien juntos, pero sin lugar a dudas es algo que me gustaría ver mucho más seguido.
Siempre que se hace un port existe el riesgo de que el juego no corra de lo mejor en la nueva plataforma, sin embargo, te puedo decir que técnicamente, Radiant Historia: Perfect Chronology es prácticamente impecable.
Mi única queja importante que por cierto, ya te había mencionado, tiene que ver con el que juego no esté en 3D. Me parece que Atlus dejó pasar una oportunidad inmejorable para hacer que el juego luciera aún mejor. Constantemente recordaba lo increíblemente bien que lucen los Fire Emblem de 3DS, con esos sprites 2D que hacen todo el sentido con el precioso efecto 3D del que es capaz la consola. También está el tema del V sync que ya te había detallado, pero nada tan grave.
Vale mucho la pena mencionar que algunas cinemáticas del juego en puntos muy importantes de la historia, vienen en full motion video, presentando secuencias anime verdaderamente impresionantes y muy bien logradas en todo sentido, asunto que una vez más nos deja ver que Radiant Historia: Perfect Chronology es una producción de tamaño considerable que creo, no debería de ser tomada como un título más de este tipo.
La idea de entrarle de lleno a un RPG que seguro te tomará alrededor de 30 horas de completar -en el mejor de los casos-, puede ser bastante intimidante, sobre todo en estos tiempos en los que decidir qué jugar y qué no, es bastante complicado. Sin embargo, si eres consumidor de dicho género, sabes bien a lo que te atienes. Radiant Historia: Perfect Chronology es un representante brillante de esta forma de diseño de videojuegos. Su sofisticada estructura, profundo gameplay, historia que te atrapa, una dirección de arte sublime y claro, el encanto de tenerlo en una portátil, lo convierten en un verdadero imperdible para cualquiera que sepa apreciar los valores que te expresé a lo largo de esta reseña.
Me faltan palabras para recomendarte más Radiant Historia: Perfect Chronology si es que no le entraste a la versión original en su momento, esto claro, si sueles consumir juegos de rol hechos en Japón. Estoy seguro de que cada una de sus capas te harán sentir eso que sólo los videojuegos pueden conseguir. Recomendarlo como entrada a los RPG sí se me hace un poco más arriesgado, pues además de tener fundamentos de por sí complejos, su capa superior de mecánicas y hasta narrativa, lo convierten en un producto denso y no de tan fácil digestión. Como sea, Atlus una vez más demuestra la maestría y cuidado que tiene al momento de crear cada una de sus obras. Cruzo los dedos para que las ventas de este port sean lo suficientemente buenas para justificar una secuela.
Mención honorífica a la bella Launch Edition que se lanzó, la cual, viene con un pequeño pero bonito libro de arte, así como con una planilla de estampas de los personajes del juego. Tengo entendido que su tiraje fue relativamente alto, por lo que podrías encontrarla aún, esto claro, dependiendo de en qué momento estés leyendo esto.
