PS4, XBOX ONE, SWITCH, PC
PS4
NetherRealm Studios
Warner Bros. Entertainment
26/05/2020
Mortal Kombat es una de las franquicias más importantes, no solo en la historia de los juegos de pelea, sino también en la historia de los videojuegos en general. Los primeros tres títulos de la saga dominaron los arcades durante los años 90 gracias a su visceral y brutal violencia, misma que convirtió a la serie en un fenómeno mediático. Evidentemente, esto atrajo a cientos de miles de personas ajenas a los videojuegos, solo para conocer el juego que estaba causando tanto furor en las noticias. Recordemos que durante esta época los videojuegos seguían siendo un mercado relativamente pequeño a comparación de lo que son ahora, por lo que era más fácil que los desarrolladores y estudios de creación sucumbieran más fácilmente ante la crítica de las personas. Pero a pesar de esto, Ed Boon y John Tobias, co-creadores de la franquicia, decidieron seguir adelante con el proyecto hasta lo que conocemos hoy en día, pero no sin unos cuantos tropiezos en el camino.
Como mencionaba anteriormente, Mortal Kombat gozó de sus años dorados en los 90’s, cuando docenas de jugadores hacían filas en los arcades para ejecutar sus Fatalities favoritos. Aunque obviamente el atractivo de la saga era su violencia, Midway Games no podía seguir recurriendo hacia la misma fórmula una y otra vez con la esperanza de triunfar, por lo que en un intento por innovar, se nos presentaron unos cuantos spin-offs muy extraños como Mortal Kombat Mythologies: Sub-Zero, Mortal Kombat: Special Forces y muchos años después, Mortal Kombat: Shaolin Monks.
Fue justamente en la transición del 2D al 3D cuando Mortal Kombat empezó a sufrir, ya que la saga parecía no poder despegarse de sus raíces y cada título nuevo en la franquicia nos traía elementos que no resonaban con los jugadores como lo hacían anteriormente. No fue hasta el 2010 cuando Warner Bros. creó NetherRealm Studios y lo fusionó con Midway Games en un intento de darle nueva vida a la aclamada franquicia, y vaya que lo hicieron.
Un año más tarde llegó a nuestras manos Mortal Kombat 9, un soft reboot de la saga que logró retomar todos los elementos que tanto amamos de la saga y los hizo relevantes para audiencias modernas. De hecho, MK 9 sigue siendo considerado uno de los mejores juegos de toda la franquicia. Gracias a su enorme éxito, Mortal Kombat resurgió de las cenizas y como resultado tuvimos Mortal Kombat X, y ahora también Mortal Kombat 11. Ya ha pasado más de un año desde el lanzamiento de esta última entrega, y ahora sus desarrolladores nos han sorprendido a todos con la revelación de Aftermath, una expansión que añade muchas nuevas cosas a este popular título de peleas, pero ¿vale la pena? ¿es suficiente para regresar a MK 11? Acompáñanos a responder estas preguntas y más en nuestra reseña.
Es inusual que un juego de peleas destaque por su campaña de un solo jugador, sin embargo, desde Injustice 2, NetherRealm demostró tener un gran potencial para contar historias sensacionales con personajes previamente establecidos y lo mismo sucedió con Mortal Kombat 11. La historia de estos dos juegos son tan buenas que fácilmente podrían pasar como una miniserie de televisión. De hecho, recuerdo que pocos días después del lanzamiento de MK 11, los foros oficiales se llenaron de peticiones de los fans que querían más contenido de un solo jugador, pero debido a que sus desarrolladores nunca antes habían hecho algo similar, las esperanzas rápidamente se esfumaron. Pero ahora, Aftermath está aquí y su historia es tan increíble como la del juego base.
La historia de Aftermath se desarrollo justo después de los acontecimientos originales, cuando Liu Kang y Raiden finalmente logran derrotar a Kronika. Justo cuando todo parece ir bien, Shang Tsung, Fujin y Nightwolf aparecen repentinamente de un portal para advertirle al ahora Dios del Fuego y Trueno que deben recuperar la corona de Kronika, de lo contrario nunca podrá restaurar la línea de tiempo a como estaba. Desconfiado del malvado hechicero, Liu Kang aún así accede a sus planes, pero como el nuevo protector de Earthrealm, le es imposible abandonar el presente, por lo que estos nuevos personajes deberán ser los encargados de cumplir la misión.
Aftermath añande cinco capítulos adicionales, cada uno enfocado en los cinco personajes DLC que sí forman parte del canon oficial, es decir, no esperes ver a Joker, Terminator, Robocop o Spawn dentro de la narrativa. Aunque similar en tono al juego base, esta nueva historia logra presentar unas escenas de acción increíbles que muy pocas veces vemos en las grandes producciones de Hollywood, además de que también hace un excelente trabajo en darle su respectivo tiempo en pantalla a cada héroe y villano.
En total, yo diría que la historia la puedes terminar en unas tres o cuatro horas, algo que me sorprendió bastante ya que yo esperaba que solo fuera un simple epílogo con unas dos horas de duración como máximo, pero no. De hecho, en el menú principal Aftermath es listado como la “Segunda Parte” de MK 11. Si estabas preocupado porque esta expansión de un solo jugador no cumpliera con la misma calidad que el juego base, entonces quédate tranquilo porque hay partes en las que Aftermath incluso la supera. Otra gran narrativa por parte de NetherRealm, aunque definitivamente predecible.
Por supuesto, Aftermath no solo añade más contenido para la historia, sino que también añade tres personajes adicionales que, a diferencia de todos los demás DLC, ya están disponibles y los puedes descargar a los tres desde que adquieres la expansión. Ahora ya sabemos por qué el tiempo entre cada peleador era más extenso que como fue en Injustice 2.
Empecemos por Sheeva, un personaje que no ha sido jugable desde Mortal Kombat 9 hace nueve años. Esta peleadora está diseñada para estar constantemente presionándote, y tiene grandes herramientas en su set de movimientos que sirven para acercarnos a nuestro oponente. Sus combos son muy sencillos de ejecutar, pero no esperes cosas tan apantallantes como Goro en Mortal Kombat X. Sus tres variaciones ofrecen movimientos muy útiles para todo tipo de ocasión, y el hecho de que su potencial de combos no se vea afectado por estas variaciones es algo que se agradece enormemente.
Por otra parte, tenemos a Fujin, Dios del Viento y hermano menor de Raiden, cuyo estilo de juego es algo totalmente diferente a cualquiera de los otros peleadores en el juego. Fujin añade muchas cosas nuevas a la mesa, como la habilidad de caminar en el aire, además de un tornado que debes dirigir manualmente para poder ejecutar sus combos e inusuales condiciones para poder ejecutar sus Crushing Blows, los cuales no son nada de fácil de lograr, pero son sumamente satisfactorios cuando lo hacemos correctamente. Fujin también tiene un par de herramientas para atacar a distancia, su ballesta principalmente, pero en general pasarás más tiempo corriendo hacia tu oponente que de él. Es un personaje con el que deberás entrenar por horas para dominar, pero te prometo que tus rivales se la van a pasar muy mal cuando deban enfrentarse contra ti.
Me duele decirlo, pero RoboCop es el personaje menos interesante de los tres, y posiblemente el más aburrido. Su potencial de combos es sumamente limitado, y es un peleador enfocado en el combate a distancia, ya que casi todos sus movimientos especiales son proyectiles diseñados para mantener la distancia entre tú y tu rival. Si nuestro oponente logra acercarse, RoboCop tiene unas cuantas opciones para defenderse, como un escudo que funciona como parry o un command grab que te permite mejorarlo para mandar volando a nuestro enemigo, pero como dije, su fortaleza recae en la distancia y no tanto en el combate cuerpo a cuerpo. Eso sí, bien por NetherRealm por conseguir al actor de las películas originales, Peter Weller, tanto para la captura de movimiento como para su voz.
En general, estos tres personajes son muy divertidos de usar, y creo que todos los jugadores encontrarán algo que les atraiga de cada uno de ellos, ya sea que prefieras estar presionando constantemente a tu rival, engañándolo con juegos mentales o destruyéndolo desde la distancia. Pero también es un poco decepcionante que NetherRealm no haya aprovechado la oportunidad para corregir una de las críticas que más recibió Mortal Kombat 11: el limitado potencial que tiene cada personaje en cuanto a combos, sobretodo Fujin.
Creo que hubo un poco de confusión cuando se anunció Aftermath, esto porque, además de la expansión de la historia y los personajes, NetherRealm también cofirmó la llegada de una expansión gratuita que añadiría más contenido como nuevos escenarios, Stage Fatalities, Friendships y por supuesto, los típicos ajustes de balance. Muchos creyeron que estos elementos serían parte de Aftermath, pero no, son totalmente gratuitos y lo único que debes hacer para conseguirlos es actualizar el juego a la versión más reciente.
Como parte de los nuevos escenarios tenemos la clásica Soul Chamber y Dead Pool, además del escenario totalmente nuevo conocido como Retro Arkade, que los fans más viejos de la saga sin duda alguna apreciarán. Acompañando a estos escenarios también llegan los Stage Fatalities, y aunque por ahora solo hay tres, se dice que más serán añadidos gratuitamente en el futuro.
Si lo que estabas buscando eran nuevas maneras de humillar a tu oponente, pues NetherRealm te tiene cubierto. No solo están de regreso los Friendships, sino que cada uno de los personajes dentro del juego, incluso los nuevos, tiene uno a su disposición. No será necesario desbloquear los inputs para ejecutarlos, ya que todos vienen desbloqueados desde un inicio, mismo con los Stage Fatalities.
El sistema de mejoras y aumentos también ha sido reestructurado por completo. Ahora también tenemos un tipo de aumento llamado Jinsei que solo puede ser engarzado al tercer espacio, el cual ya está disponible, y tiene poderosas habilidades que afectarán drásticamente al gameplay. Las mejoras ya no requieren de una ranura en específico, pero sí de un tipo de entrada en particular. Adicionalmente, se incrementó el número de recompensas que obtienes en las Torres del Tiempo, así como las recompensas que obtienes por completarlas en el modo Brutal.
Mortal Kombat 11: Aftermath es justo lo que este juego necesitaba para seguir siendo relevante en su segundo año de vida. La historia es corta pero muy entretenida y llena de fan service, además de que también podría darnos una pista sobre el futuro de la saga dirigiéndose hacia Mortal Kombat 12. Los nuevos personajes son divertidos de usar, aunque el hecho de que sigan teniendo muchas habilidades enfocadas en el zoning es algo que a mí en lo personal no me agrada demasiado. Por supuesto, los nuevos escenarios y Friendships son una adición muy interesante, pero al igual que los Fatalities, éstos últimos se vuelven un poco tediosos cuando ya los hemos visto por décima vez.
En general, Aftermath es un paquete muy completo con grandes adiciones, pero a mí parecer es solo el inicio de una serie de mejoras y actualizaciones que NetherRealm tiene planeado para el juego, por lo que su valor inicial de 40 dólares se me hace un poco costoso. Recordemos que estos 40 dólares únicamente te dan acceso a la nueva historia y personajes, ya que todo lo demás es gratis. No sé si Aftermath sea suficiente para atraer a nuevos jugadores a este título de peleas, pero si eres fan de Mortal Kombat 11, entonces esta es una expansión que no te puedes perder.