PS3, PS4
PS4
SCE San Diego Studio
Sony Computer Entertainment
29/03/2016
Los videojuegos son un medio de entretenimiento verdaderamente especial por diferentes razones. Para muchos, la posibilidad de visitar mundos imposibles es lo más atractivo del mundo, mientras que otros buscan recrear situaciones de la vida real en un ambiente virtual. Los títulos de deportes normalmente buscan esto, incluso hasta el punto de olvidarse de cosas bastante básicas como mecánicas de juego funcionales. Son muy pocos aquellos que consiguen combinar realismo con gameplay práctico y para fortuna de todos los fanáticos de la pelota caliente, MLB The Show 16 es uno de ellos.
Desde hace ya unos cuantos años, Sony decidió cobijar a San Diego Studio para que el beisbol pudiera tener representantes dignos en la industria de los videojuegos, esto luego de que durante los noventa y buena parte de la década pasada, tuviéramos a un montón de exponentes que entregaron productos muy diversos si de nivel de calidad hablamos. Después de un par de entregas más que acertadas en todo sentido, llega MLB The Show 16 para ratificarse como uno de los mejores juegos de deportes de los últimos años.
Desde que el beisbol nació como deporte hace más de cien años, se establecieron reglas increíblemente claras que lo convirtieron rápidamente en el pasatiempo favorito de Estados Unidos. Debido a lo ortodoxa que es esta disciplina, el proceso de transportarla a un videojuego siempre ha sido bastante limpio, sin embargo, con el pasar de los años se ha venido haciendo verdaderamente sofisticado, esto hasta el punto de tener algo del nivel de MLB The Show 16.
Creo que lo mejor será comenzarte a hablar de cómo es que funciona este juego cuando uno está a la defensiva, pues creo yo, aquí es en donde más brilla como producto de entretenimiento interactivo. El pitcheo es parte más que esencial de toda la experiencia. Además de poder elegir el lanzamiento que haremos, deberemos de indicar el punto exacto en el que queremos que llegue a la mascota del catcher. La precisión de éste dependerá del momento en el que ordenemos que la acción se haga, justo cuando el círculo indicador se encuentre en el punto más pequeño.
Además de esto deberás de tener muy en cuenta el estado en el que se encuentra el lanzador. Por un lado tenemos su energía y por el otro la moral o confianza. La primera de ellas es bastante obvia; entre más fresco esté el brazo del pitcher, los disparos a la registradora serán mucho más precisos. El tema del ánimo sí es mucho más impredecible, sobre todo cuando estás jugando una temporada completa. En caso de que tu jugador haya tenido un par de partidos no tan buenos o que sus últimos lanzamientos no hayan dado en el blanco, su baja moral podría causar errores impredecibles.
Por el lado del control del resto del equipo, el esquema de botones es muy similar al que vimos en la última entrega de esta serie. Cada base es representada por cada uno de los botones que forman el diamante en el control, lo cual, hace que todo se sienta muy orgánico y natural cuando lo estamos controlando. Con el objetivo de que el gameplay sea aún más dinámico, tenemos la posibilidad de anticipar lanzamientos según haya sido el batazo que nuestros jugadores deben resolver. Por ejemplo, si sale un batazo a dónde está colocado nuestro segunda base, podemos irle diciendo desde antes de que tome la pelota que dispare a primera en cuanto ésta esté en sus manos. Lo anterior ayuda mucho a ejecutar jugadas a la defensivas mucho más complejas como un double play.
Puede que el control más libre de los jugadores te parezca un tanto extraño en un inicio, esto gracias a lo increíblemente realistas que son las animaciones que vemos en pantalla. Lo que quiero decir es que en MLB The Show 16, sientes literalmente que estás controlando a un ser humano y no ha una pieza dentro de cierto mundo que no obedece a las reglas de física reales. Te repito que al principio, podrías sentir que la cosa no funciona y que es injusto que cierto batazo no haya podido ser fildeado, sin embargo, te puedo asegurar que tan solo es cuestión de tiempo para que te acostumbres y que las cosas puedan fluir de mucho mejor manera.
Cuando estamos a la ofensiva, las cosas también son bastante interesantes. El bateo en sí funciona de manera bastante tradicional. Con un botón haces un swing regular, con otro puedes aumentar el poder de tu batazo y con otro solo tocar la bola en caso de que tengas otro plan en mente. La dirección que tome la pelota cuando ésta haga contacto con la madera del bat, dependerá de dos cosas principalmente. La primera tiene que ver con la anticipación con la que hagamos contacto con la esférica y la segunda, con la posición en la que se encuentre el análogo izquierdo cuando la golpeemos. Claro que otros factores como el clima e incluso la altura del campo en el que te encuentres jugando, afectan el lugar en el que caerá la bola.
Otro de los puntos que más interesantes me parecieron es la forma en la que controlas y le das ordenes a los corredores que tienes en las bases. Con uno de los gatillos le puedes pedir que avancen y con el otro les ordenas que regresen. La verdad me impresionó lo preciso que es este control para un actividad que de primera instancia, podría parecer un tanto simple. Lo anterior funciona como si los corredores estuvieran pegados con una liga a cada una de las almohadillas; si dejas presionado por cierto tiempo el botón de avanzar, la conexión se romperá y el jugador se moverá a la siguiente base, igualmente para regresar. Este sistema hace que difícilmente des una orden equivocada.
La verdad es que en cuanto a mecánicas de juego y control en general, San Diego Studio hizo un más que sensacional trabajo, provocando que además de que MLB The Show 16 se vea realista, éste sea divertido en todo sentido. Me falta platicarte más sobre cómo es que funciona todo esto en una de las modalidades del juego, no obstante, me parece que merece su propio apartado.
El beisbol siempre ha sido un deporte sobre tomar decisiones basadas en complejas estadísticas, asunto que poco a poco, ha sido integrado de mucho mejor manera en los videojuegos que intentan representarlo. Sin temor a equivocarme te puedo decir que MLB The Show 16 es uno de los juegos deportivos que jamás haya jugado en los que la estrategia juega un papel tan importante, sobre todo cuando estás en las dificultades más elevadas.
Si eres de esos nerds de los números dentro de la pelota caliente, te puedo asegurar que pasarás cientos de horas recorriendo los menús y tablas que vienen en MLB The Show 16. La profundidad de estas cifras es verdaderamente impresionante en todo sentido y lo mejor, es la manera en la que estás impactan directamente en el gameplay. Algo tan simple como el promedio de cierto jugador al momento de enfrentar a lanzadores zurdos, por ejemplo, podría ser determinante en un partido apretado. Lo que quiero decir es que este título te fuerza a estar considerando todo tipo de elementos como el que te describí para poder salir adelante, incluso llegándose a sentir como si fuera un RPG por turnos en el que debes de poner al personaje adecuado que le haga daño a cierto enemigo.
Por supuesto que el tema de las decisiones no se limitan al momento en el que el juego se encuentra en etapas pasivas, pues cuando la pelota está en juego después de un batazo, también debemos tener en cuenta que normalmente, debes pensar de manera rápida y precisa para poder sacar ese out y poderte robar una base. Es sensacional la manera en la que MLB The Show 16 nos genera adrenalina con cada una de las situaciones que nos pone enfrente.
MLB The Show 16 cuenta con diferentes modos de juegos, la mayoría regresan de la última entrega con diferentes modificaciones que las hacen mucho más funcionales en casi todo sentido. Creo que volverte a contar que puedes armar un equipo desde cero para buscar llevarlo a ganar una Serie Mundial, o que también tienes la posibilidad de utilizar una franquicia real para conducirla a la gloria, sobra por completo, pues sería imperdonable que un juego de deportes no te diera esa posibilidad.
De lo que sí creo vale mucho la pena hablar, es del modo en el que podemos crear a un solo jugador llamado Road to the Show. Aquí, solo nos debemos concentrar en nuestro personaje y en hacer que sus habilidades vayan creciendo hasta convertirse en una estrella de la Grandes Ligas. La mejor manera de describir esta modalidad es comparándola con una especie de pequeño RPG. Lo anterior lo digo porque como pasa en los juegos de este género, aquí, nuestro personaje tiene stats, experiencia y su equipo puede ser mejorado para que su desempeño dentro del campo de juego sea más eficiente.
Al inicio de tu carrera podrás crear a un personaje de la forma de que mejor te parezca en la parte visual, así como en sus atributos iniciales como pelotero; es decir, tienes que elegir una posición en la cual te desarrollarás a lo largo de tu carrera. Por ejemplo, yo elegí ser short stop, por lo que mi única tarea a lo largo del resto de actividades que hice, solo estuvieron centradas en esta posición.
Road to the Show está divido en una serie de mini juegos que tienen que ver con la posición que elegiste. En mi caso, el primer campamento de entrenamiento antes de los partidos de visorias consistió en entrenar un par de fildeos y en bateo. Cada que aciertas en alguna de estas actividades, te dan puntos para ir mejorando a tu personaje. Lo mejor es que por ejemplo, el fildeo en esta modalidad funciona de una manera completamente distinta a cómo lo hace en un partido regular de MLB The Show 16. Aquí, además de tener que acomodar manualmente al jugador, cuando tienes la bola en las manos, se activa una especie de QTE en la que debemos apuntar y lanzar correctamente hacia la base en la que se necesite el out. Evidentemente, el bateo funciona de manera regular.
Debido a que esta modalidad solo se centra en nuestro jugador, los momentos de los partidos en los que no estamos participando, pueden ser simulados, aunque también existe la posibilidad de presenciar todas las jugadas de un encuentro para tener una experiencia mucho más realista e impredecible.
Al menos en mi caso, esta modalidad fue la que más disfruté de todo lo que tiene que ofrecer MLB The Show 16, cosa que creo, es bastante qué decir, pues la verdad es que la cantidad de contenido que viene dentro de este juego, pude llegar a ser verdaderamente abrumante, cosa que por supuesto, contrasta con la tendencia que hemos visto a lo largo de los últimos meses con otros videojuegos.
Como te comentaba hace un par de párrafos, el contenido que viene en MLB The Show 16 es por demás abundante, por lo que muchos podrían verse abrumados, sobre todo si no se tiene tanta experiencia con este tipo de juegos. Si eres de los que apenas le dará una oportunidad a esta serie, te puedo decir que no tienes de qué preocuparte en este sentido, pues la verdad es que el juego hace un más que sensacional trabajo en explicarte cómo es que funciona cada una de sus modalidades de juego.
Además de presentarnos menús muy bien diseñados en la parte visual, estos tienen una gran organización de todo lo que contienen, por lo que llegar a cierta cifra o dato que necesites, es algo bastante simple. En términos de interfaz dentro del gameplay, también se hizo un grandioso trabajo, pues cada uno de los controles y opciones que tenemos a la mano en el campo de juego, se sienten perfectamente colocados y claros.
Al ser un videojuego que intenta emular una situación de la vida real, la parte visual en MLB The Show 16 es uno de los elementos más importantes de toda la experiencia. Me resulta verdaderamente complicado pensar en un título de deportes que cuente con una atmósfera tan profunda como la de éste, pues además de tener bellísimos visuales que incluso nos dejan ver expresiones muy realistas en la cara de cada uno de los jugadores, nos hace sentir como si de verdad estuviéramos viendo la transmisión de un partido en ESPN o Fox Sports.
Es verdaderamente impresionante cómo es que el juego explota todas las capacidades del PlayStation 4 para correr a una resolución de 1080p sin caídas de frame rate. Cada una de las texturas del pasto, uniformes o equipo que usan los jugadores, consiguen hacerte sentir que estás viendo un partido real de la MLB.
Por supuesto que el sonido no se podía quedar atrás. En caso de quieres disfrutar de MLB The Show 16 como se debe, te recomendamos encender tu sistema de audio a un buen volumen o ponerte tus mejores audífonos. El sonido del público aplaudiendo una jugada, el estruendo de un bat haciendo contacto sólido con una bola a casi cien millas por hora o la arcilla levantándose por una barrida en segunda, te harán vibrar de una manera muy intensa.
Por más que le he dado vueltas al asunto, simplemente no he encontrado un punto verdaderamente relevante qué criticarle en la parte negativa a MLB The Show 16. Puede que valga la pena mencionar que en un par de ocasiones, me topé con un bug en el que la mascota del catcher atravesó el cuadro que marca la zona de strike de cada bateador. Fuera de eso y que probablemente, algunas personas no encuentren tan atractivas sus mecánicas de juego, te puedo decir que estamos frente a una experiencia redonda que merece que le des una checada si es que sientes la más mínima curiosidad por él.
Espectaculares gráficos y sonido, mecánicas de juego profundas y muy bien diseñadas, grandes modalidades de juego y cientos de cosas por hacer, convierten a MLB The Show 16 en uno de los juegos deportivos más destacados de todos los tiempos, siendo una autentica carta de amor para todo el que gusta de las competencias y por supuesto, del famoso rey de los deportes.