PS4, XBOX ONE
PS4
Bamtang Games
Bandai Namco
17/01/2017
Sin lugar a dudas, podemos decir que los videojuegos son un medio de entretenimiento que se mueve a velocidades vertiginosas que por supuesto, muchas veces causan que ciertas tendencias o géneros se queden en el camino sin saber cómo evolucionar para poder seguir siendo relevantes. Los Beat ’em Up tienen una larga y muy interesante historia dentro del medio, sin embargo, podríamos decir que fueron de los que desgraciadamente, pasaron a cuarto término cuando se dio el salto al 3D. Mighty Morphin Power Rangers: Mega Battle no sólo intenta traer de regreso a esta exitosa franquicia de los noventa, sino que busca darle frescura al estilo de diseño antes mencionado, pero por desgracia, se tropieza demasiado en el camino, esto claro, sin ser un completo desastre ni mucho menos.
La mayoría de los crecimos en los años noventa tenemos un muy especial cariño por los Power Rangers, sobre todo por la primera generación. Dicho show de televisión que posteriormente se vio coronado por una espectacular película (al menos así la recuerdo), se convirtió en una franquicia multimedia muy exitosa en la parte comercial, y luego de haber pasado por muchísimas manos y extraños experimentos, en este 2017 estará recibiendo una especie de relanzamiento en la pantalla grande. Como era de esperarse, dicho evento intentará ser capitalizado de diferentes maneras y una de ellas es a través de los videojuegos, pero para infortunio de nosotros los fans, Mighty Morphin Power Rangers: Mega Battle simplemente no le hace justicia ni al nombre que lleva, ni al género que representa.
Me parece que antes de empezar ha hablar de los elementos que componen a Mighty Morphin Power Rangers: Mega Battle, es importante entender de dónde es que salió y quiénes son los que están detrás del proyecto. Ser un juego de franquicia nunca ha sido una tarea sencilla, por tal motivo, es verdaderamente sorprendente que Bandai Namco haya decidido poner a este pequeño, pero importante proyecto en manos de alguien como Bamtang Games, estudio peruano que hasta este momento, sólo había creado títulos 2D de muy bajo perfil.
No me mal entiendas, sé perfectamente que en más de una ocasión, estudios completamente desconocidos han aparecido de la anda para presentarnos brillantes propuestas que vienen a cambiar la forma en la que miramos el medio, no obstante, cuando hablamos de un juego que de un inicio está atado ha una franquicia ya establecida con reglas muy bien delimitadas, la cosa cambia bastante. A lo largo de mi paso con Mighty Morphin Power Rangers: Mega Battle, me quedó claro que la gente de Bamtang Games hizo un loable esfuerzo por entregar un título digno y a pesar de que en efecto, estamos frente a un producto muy presentable, me resultó inevitable no sentir aburrimiento por lo estéril y poco angelado que es todo su gameplay.
Como te comentaba al inicio de esta reseña, Mighty Morphin Power Rangers: Mega Battle es un Beat ’em Up en dos dimensiones que rápidamente me llevó a recordar lo que Konami hizo con el género durante los años ochenta en las arcades. En un inicio, los controles y mecánicas básicas del juego parecen funcionar de buena forma, incluso parecen tener potencial para evolucionar hacia cosas mucho más interesantes, no obstante, tras completar dos o tres niveles, su deficiencias se empiezan a volver sumamente evidentes.
Creo que el primer y mayor problema de Mighty Morphin Power Rangers: Mega Battle es la casi nula variedad de enemigos con los que cuenta. A lo largo de todo el juego, te enfrentarás una y otra vez contra los mismos minions de Rita Repulsa, los cuales, tienen patrones sumamente sencillos de leer y por consiguiente, de contrarrestar. Estoy seguro de que antes de que termines la primera sección del juego, prácticamente ya habrás visto todo lo que éste tiene que ofrecer en términos de enemigos ocasionales.
Al darme cuenta de lo anterior, no tuve más opción que poner todas mis esperanzas en lo que fueran a ser los jefes, momentos que por supuesto, siempre fueron los más emocionantes de la serie de televisión. Dichos enemigos están compuestos por tres fases. La primera de ellas es una escena convencional a pie en donde tenemos que eliminar su barra de vida intentando esquivar diferentes ataques en patrones bastante tradicionales. No malos, pero lejos de ser innovadores.
Una vez que superas dicha escena, comienza ha sonar el icónico tema de los Power Rangers, asunto que por supuesto, causó que como fan de la serie, me emocionara mucho, pues era momento de conocer a los Zords que luego de una linda animación de introducción, se combinan para darle vida al Megazord. Aquí, comienza la segunda fase, la cual, es una toma desde la cabina del mecha gigante en la que debes disparar a puntos débiles del jefe con una mecánica sumamente pobre que se limita a mover unas miras sobre un plano… la cosa ya pintaba bastante mal. Al superar la etapa, pensé que sería todo, pero llega el momento de pelear mano a mano con el monstruo gigante.
En este punto se nos pone en una perspectiva exterior del Megazord en la que lo vemos junto con el Kaiju, muy parecido a la toma de un juego de peleas 2D tradicional. Al ver esto, justo pensé que sería una escena basada en una mecánica de pelea, sin embargo, el asunto se limita ha apretar una serie de botones como en un QTE para hacerle daño al enemigo. Lo único interesante de todo esto es que si estás jugando con alguien más, todos deben meter la combinación correctamente al mismo tiempo para hacer daño. Luego de completar el proceso unas cuatro veces, el villano cae y el nivel es superado.
Como te puedes dar cuenta, ni estos enfrentamientos salvan al gameplay de Mighty Morphin Power Rangers: Mega Battle. En cuando a la forma de progresión, existe un sencillo árbol de habilidades que le va dando nuevos movimientos a los Rangers según la experiencia que vayamos obteniendo. La cosa funciona de buena forma pero gracias a la poca variedad de enemigos, su potencial jamás salió a relucir.
Hablando de movimientos, cada Ranger puede golpear y patear con el uso de un botón, mientras que con otros dos, puedes disparar con la pistola de rayos que portaban estos personajes o blandir una de sus armas melee. Algo que me pareció interesante fue la mecánicas de la energía. Esta barra azul necesita estar llena para poder convertir a nuestros personajes en los Power Rangers, cosa que evidentemente les da mucho más poder de pelea que cuando sólo están en su modo normal.
No te voy a mentir. Cuando vi el tráiler revelación de Mighty Morphin Power Rangers: Mega Battle, no pude evitar sentir emoción y mucha ilusión, pues me parecía de lo más acertado que la primera generación de esta franquicia regresara a los videojuegos por medio de un título 2D con arte muy de caricatura que además, intentara refrescar a un género de como el de los Beat ‘em Up. Es una verdadera desgracia que al final, el resultado haya sido tan pobre en todo sentido si hablamos de gameplay. Creo que a pesar de que la intención era bastante buena, tanto el estudio desarrollador a cargo, como el publisher que los eligió, quedaron a debernos bastante a quienes esperábamos contar con una experiencia mucho más profunda.
El tema de lo repetitivo dentro de un videojuego siempre me ha parecido por demás interesante, pues a pesar de que este término es utilizado una y otra vez para dar contexto negativo, la realidad es que no necesariamente tiene que ser así. Por su misma naturaleza, los Beat ‘em Up nos piden hacer una y otra vez lo mismo basado en sus mecánicas de juego, y para crear la ilusión de que no siempre estamos repitiendo la misma acción constantemente, echan mano de cosas como el diseño de niveles.
Mighty Morphin Power Rangers: Mega Battle es de esos juegos que conforme vas progresando en ellos, coquetean con la idea de que en la siguiente escena, te presentarán algo que llegará a darle frescura a los escenarios en los que se va desenvolviendo toda la acción, sin embargo, dicho evento jamás llega.
A pesar lo pintorescos que los niveles de Mighty Morphin Power Rangers: Mega Battle pueden llegar a ser gracias a la referencias que esconden de la franquicia en la que está basado el juego, la verdad es que en todo momento se sienten sumamente planos y sin vida propia más allá de los enemigos que se nos dejan venir una y otra vez. Al igual que muchos juegos del género, tienes que ir matando a todos los villanos de cierta área para poder seguir adelante con tu camino. El problema aquí es que a pesar del evidente cambio estético entre las zonas, su estructura es exactamente la misma.
Regresando al tema de lo repetitivo, creo que en el caso de Mighty Morphin Power Rangers: Mega Battle, esta palabra puede y debe ser usada justo como lo que quiere decir: el juego te hace hacer lo mismo una y otra vez hasta que aparecen sus créditos en pantalla. Si bien estamos hablando de una experiencia bastante corta, resulta sumamente notable que no dejas de hacer exactamente las mismas acciones una y otra vez hasta llegar al final. Las únicas variaciones que se dan es al momento de enfrentar a los jefes, sin embargo, aquí tampoco vemos un diseño de niveles que sirva para acentuar las mecánicas de juego.
Así es, Mighty Morphin Power Rangers: Mega Battle es un túnel vestido de diferentes maneras que por más que se acerca a querer dar algo de variación, jamás lo consigue de verdad. Creo que es una pena que se haya perdido de la mira algo tan esencial para un videojuego como lo es la construcción de los escenarios en los que se desarrolla toda la acción. No sé si esto haya sido deliberado o simplemente fue falta de experiencia por parte del estudio que estuvo detrás de todo.
Sin lugar a dudas, la decisión de traernos un juego contemporáneo de los Power Rangers utilizando un estilo visual caricaturesco como el que se aprecia en Mega Battle, fue la correcta en todos los sentidos. Creo que tener estas extracciones un tanto abstractas pero perfectamente reconocibles de estos personajes que formaron parte de una serie de televisión Live Action, es justamente lo que se necesitaba, pues a pesar de que en términos de animación el juego deja bastante qué desear, lo colorido que son cada una de sus escenas, consigue transportarnos a todo el mundo de estos súper héroes.
Ver a cada uno de los Rangers junto con Alpha y Zordon en este estilo de presentación visual tan sencillo, pero a la vez tan encantador, es sumamente atractivo, pues incluso se logró que los villanos conservaran su esencia a pesar de haber estado representados por caricaturas que lucen colores sólidos bastante vivos que contrastan de muy buena forma con los escenarios.
A pesar de que en la dirección de arte se tuvo un claro acierto, creo que en la parte de animación sí se quedó a deber bastante. Entiendo que parte de la idea era dar ese sentimiento como de stop motion a las gráficas, sin embargo, creo que el resultado final no fue tan bueno, pues más bien creo que vemos movimientos muy acartonados que no cuadran de ninguna manera con un juego de acción como lo es Mighty Morphin Power Rangers: Mega Battle. Cada vez que algo en pantalla se movía, no podía evitar recordar aquellas animaciones hechas en flash que inundaban internet hace diez años.
Por supuesto que Mighty Morphin Power Rangers: Mega Battle echa mano de la nostalgia y del famoso fan service para sacarnos una o dos sonrisas a lo largo de la aventura, pues su estructura intenta emular a la de la serie de televisión, es decir, los eventos se van dando en el mismo orden que en el show que tanto nos gustaba. La épica aparición de Tommy y su posterior unión al grupo como el Green Ranger está presente, esto sin mencionar los diálogos ridículos y over the top que los villanos siempre decían luego de haber sido derrotados por nuestros héroes.
En términos estéticos y de presentación en general, creo que Mighty Morphin Power Rangers: Mega Battle hace un buen trabajo, pues como fan de la primera generación de estos personajes, resulta casi inevitable no sentir atracción por el juego. La carga de fan service es correcta y está bien aterrizada en casi todo momento. El gran “pero” es lo pobre y poco actual que se siente su animación.
Tenemos que aceptarlo. A pesar de todos los intentos que se han hecho por llevar a los Power Rangers a los videojuegos, la verdad es que nunca se nos ha entregado una experiencia que de verdad sea digna de este nombre… al menos del de la primera generación. Por tal motivo, un proyecto modesto como lo fue Mighty Morphin Power Rangers: Mega Battle, encendió cierta esperanza e ilusión en algunos de nosotros. Es una verdadera pena que lo anterior se haya extinguido en tan poco tiempo por errores que un estudio que está lanzando un juego para consolas de actual generación, no debería de cometer de manera tan clara.
Mighty Morphin Power Rangers: Mega Battle es un intento loable por traer de regreso a esta franquicia, no obstante, lo medianas que son sus mecánicas de juego y el pobre trabajo que se hizo con el diseño de niveles, seguramente lo convertirán en un título que se olvidará rápidamente. Me cuesta trabajo recomendar un juego tan aburrido y con tan pocas cosas qué aportar a un género que simplemente no ha resistido el paso del tiempo. Creo que a pesar de que sientas atracción por su bien lograda presentación visual que causa que la nostalgia te invada, lo mejor será que lo pases por alto.
