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PS4
Dennaton Games / Abstraction Games
Devolver Digital
10/03/2015
En 2012 un juego se convirtió en el centro de las miradas entre el catálogo de juegos independientes. Hotline Miami, título desarrollado por Jonatan Söderström y Dennis Wedin –conocidos mejor como Dennaton Games–, dio mucho de qué hablar por su polémica violencia extrema y porque funcionaba muy bien como videojuego con mecánicas de top down shooter que pusieron frente a nosotros un juego sumamente difícil. Elementos como su píxel art y su maravilloso soundtrack también fueron ampliamente aclamados.
En resumen, el estandarte de Hotline Miami se puso tan alto que resultaba difícil pensar en una secuela, y cuando se supo que existía, las expectativas fueron tan altas que resultaría complicado superar lo que logró el primer título. Aquí estamos frente a Hotline Miami 2: Wrong Number una vez más con toda la violencia que caracteriza a la serie a tal grado de advertir que el usuario puede saltar automáticamente las escenas de violencia sexual que pudieran resultarle ofensivas; el juego regresa con las mecánicas que hicieron grandioso al primer título pero, ¿está a la altura de lo que merece la serie como secuela? En los siguientes párrafos vamos a discutirlo.
Entrar a un edificio lleno de mafiosos a masacrar gente no es algo que haría cualquier persona en su sano juicio, son sentimientos que sólo en medios como los videojuegos se pueden experimentar. En atención a los que no sepan lo que es Hotline Miami, escribimos un par de líneas para describir lo que se siente al jugar esta serie.
Tenemos frente a nosotros un juego de disparos top-down view muy difícil y por lo tanto no recomendable para cualquier jugador. Un disparo y estás muerto, así de sencillo.
En el juego te tienes que infiltrar en una serie de lugares plagados de rivales –por lo general muy bien armados– que tendrás que asesinar; lo que más importará en este sentido es la estrategia que tomarás para abordar a los enemigos y jalar el gatillo o soltar el golpe antes de que ellos lo hagan y te dejen desangrándote en el suelo.
Esas mecánicas básicas de Hotline Miami están de regreso en su secuela y es algo que celebramos ampliamente. Es un juego sumamente frustrante al punto de quizá arrojar el control de la desesperación pero es eso precisamente lo que lo convierte en una experiencia muy adictiva que cautivó a muchos fans.
Cada que vas a abrir una puerta un sudor frío te recorrerá la espalda y tus manos se llenan de tensión, sabes que aunque ya hayas acabado con la mayoría de los enemigos sólo basta un descuido para que todo se acabe y tengas que reiniciar el checkpoint. Muchas veces ese impulso lleno de ira y coraje que resulta de morir decenas de veces en el mismo lugar será la clave para hacer el combo más largo y pasar finalmente esas secciones que tanto te mortifican.
La tensión del juego aumenta por la presión de un marcador que compite contra todo el mundo y te ayuda a obtener mejores calificaciones. El pasar rápidamente un nivel y con el mayor número de asesinatos enlazados es un fuerte distractor que muchas veces causará tu muerte. Hotline Miami es definitivamente un juego que siempre te mantiene al filo del asiento y saca un lado muy agresivo de tu persona que canaliza toda esa tensión dentro del videojuego.
Aunque Hotline Miami 2 sigue en muchos sentidos la línea que marcó su predecesor considerándose un “más de lo mismo”, en el buen sentido de la expresión, existen diferencias palpables en el videojuego que lo hacen convertirse en una secuela más que una expansión.
Una primer notoria diferencia es el la manera en que se nos cuenta la historia. A diferencia del primer juego en el que seguías una sola historia, en este caso tendrás a varios personajes con sus propias líneas, mismas que se van entretejiendo con el paso de los diferentes capítulos.
¿Qué tiene que ver esto con un juego cuyo principal atractivo es el gameplay? Bastante, puesto que la mecánicas cambiarán en función de los personajes que protagonicen las distintas escenas. Así es, en lugar de los cambios de máscara que aplicaban modificaciones a la manera en que jugabas, ahora tendrás más personajes en la historia cada uno con sus particularidades.
No les vamos a hacer muchos spoilers, pero para ilustrar lo anterior podemos mencionarles que hay un personaje que sólo usa ataques melee, otro que tiene dos pistolas, otro en el que controlas a dos asesinos de forma simultánea (uno con una motosierra y otro que dispara), un militar que sólo puede recargar su poderosa arma en cajas de munición y muchas otras opciones.
No lo vamos a negar, extrañamos ese cambio de máscaras en todos los niveles, pero tampoco resulta un desacierto total la nueva división de escenas con limitantes que el juego te impone al hacerte pasarlo con un personaje en específico o con un rango de elección limitado entre ellos. Pueden sentirse incómodas en momentos las limitantes específicas de cada personaje y escena del juego, pero con el tiempo terminas dándote cuenta que es algo completamente intencional para darle un nuevo sabor al juego entre lo que ya teníamos bien conocido de la primera entrega.
Otra de las diferencias sustanciales en la nueva entrega de Hotline Miami se deja ver en sus escenarios, mismos que son más amplios respecto a los que vimos en el primer juego. Algunas de las escenas de sus capítulos siguen conservando el modelo de espacios cerrados en los que puedes armar muy bien tus estrategias de ataque y encadenamiento de asesinatos.
La tendencia general del diseño de escenarios es hacia espacios mucho más abiertos, elemento que en ocasiones llega a ser más frustrante considerando que desde muy lejos los rivales te derriban con un par de balazos sin que los veas en los márgenes de tu pantalla. Lo anterior te impulsa a ser mucho más precavido y a sustituir muchas veces el sigilo por las distracciones ruidosas que atraigan a los rivales hasta que sean visibles y estén a la distancia de tus ataques, lo que sacrifica un poco la estrategia clásica del primer juego –palpable en combos largos y frenéticos– y se convierte así en uno de los pecados de la secuela.
El juego cuenta también con un editor de niveles, un añadido interesante que puede darle potencial al juego a largo plazo.
En una época en la que recibimos videojuegos incompletos o técnicamente no muy bien pulidos, obras como Hot Line Miami 2 no se libran de este lamentable mal. La versión que nosotros probamos fue la de PS4 trasladada a consolas por Abstraction Games, desconocemos si los errores que experimentamos sólo se presentan en esta versión de consolas o también en la de PC.
No son problemas de resolución o framerate, las fallas que nos referimos incluyen bugs dentro del juego como paredes invisibles que desembocan en que te quedes trabado en partes del escenario y tengas que reiniciar el nivel de forma forzosa. Para ponerles un ejemplo más claro, puedo mencionarles que me pareció interesante la mecánica de controlar a dos asesinos de forma simultánea con el personaje que tiene dicha habilidad, pero me encontré con el problema recurrente de que mi personaje secundario que dispara se quedaba atorado en una pared llevándome a una muerte segura. Al ser recurrentes, estos problemas pueden sentirse muy tediosos y nos sorprende mucho su presencia puesto que el primer título de la serie fue impecable en este sentido.
Lo que sí no nos quedó a deber en esta ocasión es la selección musical en la que piezas de artistas como Carpenter Brut, Light Club, Moon, Megadrive, entre otros te harán ponerte audífonos y disfrutar del juego a todo volumen.
La presentación del juego sigue siendo muy atractiva, respeta el estilo del primer juego lleno de vivos colores que favorecen el tono violento del juego que nos traslada a las décadas de los años ochenta y noventa. Ver los capítulos en forma videocasetes y el menú de pausa al estilo de los menús de una videocasetera, son detalles que hacen brillar la presentación general del título.
Evidentemente estamos ante un juego que por sus cambios se siente como una secuela, aunque ciertamente no se sale mucho de las mecánicas bien probadas con las que triunfó la primer entrega de la serie. Aunque se pulieron muchas de esas mecánicas de gameplay para entregarnos un juego más retador, algunos de sus nuevos escenarios se alejan un poco de la perfección que vimos en el primer título.
La variedad de personajes con limitantes propias suponen nuevos y más amplios retos, aunque ciertamente la curva de aprendizaje no es muy amigable para adaptarse a ellos y nos deja extrañando el cambio de máscaras en cualquiera de los niveles.
-Mismas mecánicas que hicieron triunfar al primer juego.
-Difícil, frustrante, divertido.
-Excelente música y presentación.
-Introducción de nuevos personajes con habilidades que aportan diferencias interesantes al gameplay.
-Abundantes contenidos.
-Presencia de bugs.
-Pérdida de visibilidad de rivales en escenarios abiertos que evitan generar una estrategia.
Pese a sus errores técnicos y sus cuestionables cambios en el diseño general del juego, Hot Line Miami 2: Wrong Number conserva las mecánicas que hicieron triunfar al primer título con el toque de dificultad y frustración que nos hacen amar la serie. Es mas de lo mismo en el buen sentido de la palabra, por lo que quienes amaron el primer título seguramente lo van a disfrutar.
Si es tu primer experiencia con Hotline Miami te recomendamos que primero conozcas la primer entrega de la franquicia, si ya terminaste dicho juego y quieres más frustración te recomendamos esta nueva entrega que es mucho más extensa y te dará horas de sus difíciles y violentos retos.
