El creador de la saga, Hwang Dong-hyuk, reveló recientemente que la serie pudo haber tenido un cierre alternativo. En lugar del desenlace que se mostró, contemplaba una salida más coherente para el protagonista Gi-hun, quien habría escapado con vida de los juegos y viajado a Estados Unidos para reencontrarse con su hija. Esta opción no solo habría cerrado su arco de forma más significativa, sino que también habría servido de base para futuras temporadas.
Sin embargo, la historia tomó otro rumbo. En lugar de enfocarse en desmantelar la organización que traumatizó a Gi-hun, la trama repitió mecánicas ya vistas, mostrando nuevamente al protagonista atrapado en los juegos, sin avances reales ni desarrollo emocional. Aunque al principio parecía que se convertiría en un personaje combativo, su evolución terminó siendo incoherente y, para muchos espectadores, decepcionante.
Tampoco aportaron los nuevos personajes, como la jugadora 120 o el enigmático “Thanos”, quienes no lograron sumar en profundidadla historia. El vínculo entre Gi-hun y el líder quedó desdibujado y su conexión con el policía fue irrelevante. A pesar de los intentos por explorar nuevos conflictos, la narrativa dio la sensación de estancarse, desaprovechando lo que había generado expectativas desde la primera temporada.
El final alternativo sugerido por el propio director habría dado más sentido al sufrimiento del protagonista y ofrecido un cierre emocional más fuerte. Incluso podría haber dejado la puerta abierta para futuras entregas sin repetir estructuras narrativas. En cambio, el desenlace de El Juego del Calamar ha generado críticas por su falta de lógica y por desperdiciar el desarrollo de personajes clave, dejando la sensación de que la serie priorizó su continuidad sobre la coherencia.
Recuerda que está disponible en Netflix.
Vía: 3DJ
Nota del autor: No he visto ni la primera temporada, por lo que no tengo mucho que opinar. Habrá que ver si sacan un episodio adicional con ese final.