Una de las series más importantes entre las exclusivas de PlayStation es God of War, cuyos dos primeros títulos dejaron una huella muy importante entre los recuerdos que tenemos del PlayStation 2 y que ya han llegado a otras plataformas como PlayStation 3 y ahora al PS Vita. Si algo hizo memorable esta serie fue presentar una historia llena de acción, personajes fuertes, mitos griegos reimaginados y sobre todo un adictivo y violento gameplay que tocó puntos muy especiales del género hack’n’slash convirtiéndose en una leyenda de la industria.
Sanzaru Games fue el estudio al que se encomendó la tarea de adaptar al la portátil de Sony la God of War Collection, edición remasterizada que incluye God of War y God of War II que originalmente trasladó el estudio Bluepoint Games al PlayStation 3. Es conveniente dejar muy claro que un PS Vita no es un PlayStation 3, por lo que las diferencias de rendimiento entre ambas consolas requieren de mucha optimización para no hacer muy evidente el downgrade. Al haber cambios también en los controles, es importante que quien haga el port logre una experiencia satisfactoria con los recursos disponibles en la portátil.
De entrada puedo decirles que esta versión no me dejó un muy bien sabor de boca a pesar de lo grandioso que es llevar tan buenos juegos en la comodidad de tu bolsillo.
Al iniciar el juego te reciben fondos de pantalla en los momentos de carga que lucen realmente espectaculares en la pantalla del PS Vita y hasta el momento en que llegas al menú de selección del juego todo va bien. Ya una vez dentro del juego que hayas elegido comienzan las malas impresiones, te recibe un menú mal escalado (tal pareciera estar aplastado) con letras enormes y mal presentadas además de una resolución que evidentemente no es la nativa del PS Vita.
Todo luce realmente obscuro a pesar de que pongas el brillo de la consola a lo máximo, lo que hace que jugarlo en presencia de luz externa sea prácticamente una pesadilla. Cuando crees que quizá en las opciones del juego puedes encontrar ajustes básicos, como cambiar el aspecto de la pantalla (resolución nativa) o su brillo, te encuentras con que el juego no te permite prácticamente ninguna libertad al respecto presentando “opciones” casi inútiles. Los menús de opciones son todavía más desagradables, siendo el colmo la guía de controles que es casi ilegible. Todo lo anterior nos da a entender que quizá esta edición fue realizada sin cuidado o a la carrera.
Cuando toca el momento de comenzar la partida te reciben terribles escenas cinemáticas que para nada recuerdan lo que vimos en la HD Collection de PlayStation 3, y más bien parecen ser las de PlayStation 2 sólo que mal escaladas, a pésima resolución y con una bajísima calidad de audio; me recordó a las películas piratas que por su calidad de audio y baja resolución parecen haber sido grabadas con un celular dentro de la sala de cine. Si a lo anterior se suma un audio en español no localizado a Latinoamérica, desearás cambiar el idioma a la consola con tal de no escuchar el doblaje y disfrutar de su audio original.
Una vez que sobreviviste a los menús y las paupérrimas escenas cinemáticas comienza lo que nos interesa, que es el juego. Aquí es donde quizá el juego tiene sus ventajas y hace que le perdonemos muchos de sus errores pues realmente se siente cómodo en la consola portátil. La resolución y los aspectos técnicos en las secuencias de gameplay mejoran evidentemente y aunque no lucen a la resolución nativa de la consola o como algunos de sus mejores juegos, tiene la calidad tolerable para poder disfrutar de una sesión con gusto.
Los controles son tan fluidos como en la versión de consola casera gracias a los dos sticks análogos de la portátil, y aunque en ocasiones resulta un poco incómodo en algunas interacciones con la pantalla táctil, o el panel trasero de la consola, suplen de manera adecuada la falta de algunos botones en el PS Vita.
El framerate es otro problema constante en este port, y aunque no suele ser una gran molestia para la estabilidad de la partida, suele caerse al estar en los menús y en algunos momentos con varios personajes en pantalla. A pesar de lo anterior, podemos calificar a este port como algo estable que permite el disfrute de las partidas con todo el frenético y violento gameplay de este hack’n’slash.
Disfruto mucho de las consolas portátiles y soy partidario de los ports de consola casera siempre y cuando estén bien hechos. Jamás me imaginé que la grandiosidad de títulos como God of War y God of War II pudieran estar en una consola portátil y el hecho de que estén en el PS Vita es algo que me alegra por la posibilidad que ofrece pero me entristece por las desventajas que carga.
Uno de mis momentos favoritos en las consolas de PlayStation es la batalla contra el Coloso de Rodas que sucede en God of War II, y a pesar de que estos ports en PS Vita no son tan buenos, toda la genialidad de esos épicos momentos se conserva y es un gusto traerlos en el bolsillo, disponibles para ser disfrutados en cualquier momento.
Con God of War Collection para Vita llevas en el bolsillo dos juegos que podrían fácilmente considerarse entre lo mejor del género hack’n’slash y es por ello que pese a sus fallas sigue siendo una gran opción de entretenimiento al permitir partidas estables que te darán horas de diversión para llevar.
Conclusión
A pesar de que el sueño de llevar obras maestras como God of War y God of War II a un formato portátil se haya materializado, nos da tristeza que quizá no haya sido como lo hubiéramos esperado. Tenemos muy buenos ports en PS Vita de juegos que hemos visto en PlayStation 3; por mencionar un sencillo ejemplo está la HD Collection de Metal Gear Solid, por lo que no es pretexto que estar frente a un mal port se deba a las capacidades de la consola. El mismo Sanzaru Games hizo un port bastante decente de Sly Cooper: Thieves in Time para Vita que, con todo y sus downgrades, luce realmente bien en la portátil.
La llegada del dios de la guerra al PS Vita pudo haber sido mucho mejor y no perdemos la esperanza de un juego de la serie hecho a la medida de la consola, como sucedió con dos grandes títulos que en su tiempo recibió el PSP de mano de Ready At Dawn.
• Momentos épicos para llevar, dos de los mejores títulos de PlayStation en formato portátil.
• Con todo y sus porblemas técnicos el juego funciona de forma muy fluida y permite partidas cómodas en la portátil.
• Algunos movimientos ejecutados en la pantalla táctil se sienten incómodos.Se hubiera agradecido varias opciones en la configuración de controles.
• Pobre resolución y escalado del juego, sobre todo en las terribles escenas cinemáticas.
• Hubiera sido bien agregar en las opciones un ajuste del brillo, de lo contrario resulta muy difícil jugarlo fuera de casa.
• Problemas de audio generales, son muy notorios sobre todo al usar audífonos.
• Caídas de framerate constantes que aunque no afectan la fluidez del título resultan bastante incómodas.
La puntuación que le otorgamos a este título se la lleva el hecho de que se trata de dos excelentes títulos de PlayStation. El port que recibimos para PS Vita deja una mala impresión y consideramos que si así serán muchos de los títulos que se prepararán para la consola no es un paso acertado por parte de Sony. Hay un amplia variedad de juegos en la PS Store de Vita que pueden hacer valer mucho más tu dinero que esta versión de God of War Collection. Si por algo ya la tienes en tus manos o llegará a tu consola este título al venir en el paquete con el nuevo modelo de Vita, no nos queda más que desearte que lo disfrutes, a pesar de todas sus fallas termina siendo algo que podrá ser satisfactorio al tratarse de dos grandes juegos de las consolas de Sony y que, con todo y sus fallas, podrá ser disfrutado bastante.
