Movie Review – Fairy Tail: Dragon Cry

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Una película que marca el inicio del fin de la popular obra de Hiro Mashima

A inicios de este año los fanáticos de Fairy Tail se enteraron de una triste noticia que, siendo honestos, muchos ya veían venir: el manga pronto llegaría a su fin. Tras más de 10 años de publicaciones casi ininterrumpidas el autor de la obra, Hiro Mashima, se encontraba listo para concluir con la que es, hasta ahora, su obra más famosa.

Al ser éste un acontecimiento tan importante el mangaka sabía que debía de hacer algo muy especial para conmemorar la conclusión de su querida historia de magos y dragones y fue por ello que optó por realizar algunos proyectos paralelos. Precisamente de entre los contemplados se encuentra una película titulada Fairy Tail: Dragon Cry, misma que nos relata una historia completamente original que, de cierta forma, logra coincidir y acoplarse con el clímax que en estos momentos se vive dentro del manga. Sin embargo y aunque ésta parecería ser simplemente un pretexto más que busca aprovecharse de la fama que aún le queda a la franquicia, el resultado que nos ofrece es el de un film que cuenta con todo lo necesario tanto para dejar sumamente satisfechos a todos los fans y de hacerle justicia a todo ese legado que ha dejado la obra.

Ese poder… ¿Será esperanza o destrucción?

Tal y como suele suceder con películas de anime que se basan en series populares existentes, Fairy Tail: Dragon Cry nos presenta una historia nueva que guarda cierta relación con la obra original pero que nunca llega a niveles canónicos (o al menos no a primera vista). En esta ocasión su trama gira en torno al Dragon Cry, un misterioso báculo con inmenso poder que ha sido robado por Zash Caine, un hombre que traicionó al reino de Fiore y que contempla usarlo con fines malévolos. Con tal de evitar una posible catástrofe el monarca del país solicitará la ayuda de Natsu, Lucy, Gray, Erza, Wendy y los demás magos del gremio de Fairy Tail para que recuperen el bastón y, de paso, detengan los planes del perpetrador. No obstante y conforme más se adentran en su misión, nuestros héroes irán descubriendo los oscuros y profundos secretos que yacen dentro del artículo y que podrían poner en riesgo al planeta mismo.

Como tal la historia de la cinta sigue una estructura similar a la que hemos visto en muchas de las sagas de Fairy Tail (o hasta de cualquier otro manga shonen) y eso podría hacerla ver como algo muy “choteado”. Si bien esto es parcialmente verdadero, por fortuna ésta cuenta con varios vuelcos y sucesos inesperados que la sacan de lo predecible y que la dotan de varias sorpresas que son sumamente agradables de ver.

Un detalle adicional que note de la película es que ésta recurrió al mismo esquema del que siempre ha hecho uso Mashima-sensei en el manga. Es decir que, a la par de su trama de acción, ésta nos presenta algunas subtramas que complementan a la premisa principal y que son abordadas de manera rápida y fluida, sin extenderse de manera innecesaria. Ciertamente este es uno de los aspectos que más disfrute de la película ya que le añade variedad a la narración con todos los diferentes ángulos que nos muestra del acontecimiento central y que la alejan de encasillarse solamente en un hecho o personaje determinado.

Lamentablemente, esta brillante aproximación se ve dañada por el ritmo de su narrativa, el cual tiende a caerse de golpe en varias ocasiones al llevarnos de escenas plagadas de acción a repentinos momentos de calma y paz, sólo para posteriormente adentrarnos de nuevo en otras secuencias de trepidantes enfrentamientos. En sí esto es algo muy tolerable, pero en verdad desconcierta la manera en la que la película corta tan abruptamente el buen paso que llega a alcanzar en situaciones clave.

El manejo de los personajes es otro apartado que llamó mucho mi  atención debido a lo desigual que se percibe. Por un lado y aunque ésta busca darle prioridad a Natsu, la película mantiene un balance adecuado entre el elenco de personajes de la serie. Comparado con su predecesora – Fairy Tail the Movie: Phoenix Priestess – que tendía a cargar todo hacia Lucy y Eclair (el personaje original de aquel film), aquí las intervenciones de los demás magos del gremio como Gray, Erza, Wendy, Happy, Juvia, Charle, Gajeel o la propia Lucy son acertadas y nunca se sienten forzadas. Por el otro, la cosa cambia cuando nos centramos en los personajes nuevos ya que hay algunos a los que no se les da el peso y énfasis que deberían tener. Por mencionar un ejemplo, al villano Zash se le da mayor importancia que a Sonya, la misteriosa chica que lo acompaña y que de igual manera juega un rol importante dentro de la trama. Con esto no quiero decir que esté mal manejado sino que pudieron haber trabajado todo este apartado de mejor manera.

Una mejor producción de la que fue Phoenix Priestess

Otro aspecto sobresaliente del film recae en la calidad de su producción general, misma que supera en todos los aspectos a la que vimos en Fairy Tail the Movie: Phoenix Priestess. Dragon Cry tiene animaciones mejor trabajadas, ilustraciones más detalladas, goza de ambientaciones y fondos más espectaculares y, además, hace un genial uso de los efectos especiales y animaciones por computadora. Como si esto no fuera suficiente el diseño de todos los personajes que vemos en pantalla, tanto de los viejos como de los nuevos, es igualmente vistoso e interesante y va muy de la mano con el concepto exótico de la cinta.

Aunque la presentación de la cinta es uno de los puntos más fuertes que ésta tiene, en definitiva lo que se lleva las palmas de ésta son todos esos elementos que han cimentado la fórmula de Fairy Tail: explosivos y frenéticos combates, bromas simpáticas y chistes jocosos, vistosos ataques y movimientos de magia, o sus dosis exactas de picante fanservice, son algunos de esos componentes que enriquecen aún más la historia. Adicionalmente ésta también nos muestra un rostro diferente de varios de los personajes, los cuales ahora demuestran ser mucho más maduros y conscientes de su crecimiento. Vaya, puros elementos que a los aficionados les encantan.

Por desgracia y aunque me fascinó, siento este tipo de aproximación es también un gran defecto. Fairy Tail: Dragon Cry es una cinta que no teme en demostrar lo que es: una producción dirigida enteramente para los seguidores del manga/anime original. Por tal motivo ésta suele recurrir y hacer referencia a muchos de los términos, personajes, lugares y sucesos que conocimos en la obra de Mashima-sensei y da por hecho que quienes acuden a verla los conocen o saben de ellos. Debido a esto y a que las explicaciones de muchas de estas cosas son escasas y simples, las personas que acudan a verla podrían no comprender y hasta confundirse con todo lo que acontece en pantalla. Aunque vamos, esto es algo que se puede evitar fácilmente si es que acudes a verla con un poco de contexto y trasfondo de por medio.

Musicalmente hablando la película ofrece muy pocas novedades ya que recurre al uso de varias melodías que ya hemos escuchado en el anime. Siendo objetivos esto no representa una falla como tal pero si es una oportunidad desaprovechada. No voy a negar que me complació escuchar aquí varias de esas piezas rockeronas que solían acompañar a las peleas de de la serie (como Dragon Force), pero admito que me habría fascinado escuchar más cosas nuevas y épicas de parte del talentoso equipo de producción.

Una película que dejará satisfechos a todos los fans de Fairy Tail

Comparada con la película anterior que parecía más una producción que buscaba llevar a la pantalla grande una serie tan popular como lo es Fairy Tail, Dragon Cry se postra más como una film que fue realizado con la intención de complacer enteramente a los fans que han disfrutado las aventuras de Natsu, Lucy y sus amigos a lo largo de todos estos años.  De hecho y si tuviera que describir a la cinta de alguna manera, diría que ésta es una carta de amor para los fanáticos ya que reúne todo lo que hace a Fairy Tail lo que es y nos lo presenta dentro de un largometraje plagado de referencias que solamente ellos disfrutarán y entenderán. Vamos, es una muestra clara de un fanservice bien trabajado que va más allá de la simple exposición de sensuales personajes.

Fairy Tail: Dragon Cry es una película increíble que le encantará todos los seguidores del anime y manga de Hiro Mashima. Ésta está plagada de muchos de los elementos que han caracterizado a la obra original y que la convirtieron en una de las series japonesas más populares de la actualidad. Es Fairy Tail en su máxima expresión (por más chusco que suene).

Infortunadamente la cinta no es perfecta y muestra de ello la notamos en esa lealtad que guarda hacia la obra de la que se basa ya que incluso peca de los mismos defectos que han mermado a sus otras contrapartes. Así mismo, su fuerte inclinación por convertirla en una producción para una determinada audiencia hacen de ella algo que, difícilmente, puede ser gozado por todo mundo por igual.

Si eres uno de los millones de aficionados de Fairy Tail entonces ten por seguro que Dragon Cry te fascinará. Si por el contrario éste no es tu caso me atrevería a sugerirte que no la veas sino hasta que te hayas sumergido más en su universo, no tanto por que sea incomprensible sino porque, en definitiva, la disfrutarás más si conoces aunque sea un poco de su contexto.

Finalmente y como ultima sugerencia, les recomiendo que se queden hasta el final de los créditos de la película ya que hay una escena postcréditos que, créanme, no se querrán perder.