Por varios años hemos escuchado como muchas personas culpan a los videojuegos de varios de los males y problemas de la humanidad. Ahora un nuevo especialista, el psicólogo Phillip Zimbardo, ha salido a demostrar los resultados de una investigación que ha realizado y en la cual expone la existencia de una crisis de masculinidad, misma que se deriva del uso y consumo excesivo de los juegos y la pornografía.
Según expone Zimbardo, durante varios meses se dedicó a estudiar el comportamiento de más de 20 mil jóvenes y su relación con el consumo de videojuegos y pornografía. Tras dicho periodo y luego de analizar sus observaciones, en sus resultados pudo percatarse de que existe una tendencia hacia una crisis entre los varones, los cuales tienden a generar una especia de adicción al consumo excesivo de éstas, sobre todo entre aquellos que tienden a hacerlo de manera aislada por varias horas.
“Ahora, con tanta pornografía disponible de manera gratuita, la cual es única en la historia, (los hombres) están combinando el jugar videojuegos y, a manera de ‘break’, observan dos horas de pornografía a la semana” – fueron parte de los resultados que encontró Zimbardo sobre el tema al tiempo que explicaba la manera en cómo pudo observar ésta crisis – “Cuando están en clase, desearían jugar World of Warcraft. Cuando están con una chica, desearían estar viendo pornografía ya que así nunca serán rechazados“.
Más allá de generar comportamientos extraños, lo que el psicólogo encontró con este tipo de consumo fue la existencia de una reestructuración en la manera en la que opera la mente de los varones, en cómo ellos transforman su centro de atención, recompensas y la manera en la cual generan satisfacción y adicción.
“Lo que quiero decir con todo esto es que el cerebro de los niños está siendo reconectado digitalmente” explica Zimbardo.
Ante estos hallazgos, el especialista ha intentado buscar el apoyo entre sus colegas para que se le dedique la seriedad e importancia debida a un tema cada vez más recurrente. Aunque menciona que existen varias medidas para evitar que el pensamiento masculino continúe degenerándose – como por ejemplo que los padres vigilen el tipo y tiempo que sus hijos consumen estos o que se mejoren los planes de educación sexual en las escuelas -, expresa que cada vez se vuelve más necesario que los psicólogos se dediquen a estudiar a los hombres con la misma a atención a como se hace, por ejemplo, con los niños o las mujeres.
¿Ustedes qué opinan? ¿En verdad existe una crisis de hombría derivada por el consumo de los juegos y el porno en exceso?
Fuente: Independent