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Unknown Worlds Entertainment
Unknown Worlds Entertainment
15/05/2021
Por allá de 2014, Unknown Worlds Entertainment publicó un early access en Steam llamado Subnautica. Poca idea tenían de que este título de supervivencia y exploración se convertiría en uno de los más populares en la plataforma de Valve, pero ¿a qué se debió dicha popularidad? Subnautica introdujo muchos elementos ya conocidos del género, sin embargo, al tratarse de un juego ambientado completamente en el océano, sus jugadores se encontraron fascinados por el enorme nivel de libertad que el título ofrecía.
No fue hasta 2018 cuando Subnautica finalmente abandonó early access y no solo eso, sino que también extendió su alcance hasta el PlayStation 4 y Xbox One, con todo y lanzamiento físico. Tres años más tarde tenemos algo llamado Subnautica: Below Zero, que tras haberle invertido una buena cantidad de horas, no sabría decirte si se trata de una secuela o una basta expansión. Lo que sí puedo decirte es que los fans del título original apreciarán todo lo que Unknown Worlds Entertainment ha implementado en esta nueva experiencia.
Desde que se anunció Subnautica: Below Zero, sus desarrolladores no han sido muy claros sobre si estamos frente a una secuela o no. Oficialmente, se trata de “una nueva experiencia ambientada en el universo de Subnautica”, pero en múltiples entrevistas, Unknown Worlds sí lo ha llegado a describir como una secuela. Entonces, ¿cuál es la respuesta?
Como punto de referencia, piensa en lo que Marvel’s Spider-Man: Miles Morales hizo; de cierta manera es una continuación de la historia original, pero tampoco se trata de una secuela por completo. Más o menos ocurre igual con Subnautica: Below Zero.
Y es interesante, porque la historia de Below Zero de hecho se desarrolla un año después que la del primer juego. Antes que nada, te aclaró que no es necesario haber jugado el primer título para entender este nuevo juego, aunque sí te ayudará con los elementos de supervivencia, pero no en el tema de la narrativa.
En Below Zero jugaremos como Robin Ayou, quien tras enterarse sobre la desaparición de su hermana, viajará al planeta 4546B para buscarla ella misma. Tras pasar unas cuantas horas investigando, Robin descubre que Alterra, la empresa en donde trabajaba su hermana, podría ser corrupta, así que su investigación toma un giro “inesperado”.
En mi caso, la historia de Below Zero no fue lo suficientemente interesante como para motivarme a seguir adelante. Eso lo hizo su adictivo gameplay, del cual hablaré a continuación.
Similar al primer juego, Below Zero no acaba una vez que vemos los créditos. En realidad, puedes invertir cientos de horas en este juego sin siquiera avanzar la historia, pues todo depende de qué tanto quieras explorar y qué tanto quieras construir.
Tienes un objetivo principal, el cual puedes seguir si tú así quieres, pero también tienes esta enorme área que pide a gritos ser explorada. Mi recomendación personal es: tómate tu tiempo con Below Zero, y avanza a tu propio ritmo. No hay presión de tiempo ni nada por el estilo.
Una vez que llegas a 4546B, eres libre de hacer lo que tú quieras y de ir a dónde quieras, pero con ciertos límites. En un principio solo podrás explorar ciertas zonas del planeta, puesto que antes de adentrarte en las profundidades, deberás mejorar tu equipo. ¿Cómo se hace esto? Fácil, basta con recolectar diferentes recursos esparcidos a lo largo del planeta, aunque algunos de ellos serán más complejos de conseguir que otros.
Además de mejorar tu equipo, también es importante monitorear diferentes factores de salud como tu hambre, sed y por supuesto, niveles de oxígeno. Si eres un nuevo jugador, o prefieres una experiencia mucho más relajada, existe la opción de deshabilitar los medidores de hambre y sed, pero aún así debes considerar tus niveles de oxígeno.
Evidentemente, Subnautica se caracteriza por su exploración marítima, aunque en Below Zero también deberás explorar instalaciones en la superficie. Aquí, tu medidor de oxígeno será reemplazado por un medidor de temperatura, pero tranquilo, ya que también puedes construir diferentes artefactos para no morir congelado, como un traje de resistencia contra el frío o una motocicleta.
En general, el gameplay de Below Zero me atrapó por completo y hubo instancias donde me era casi imposible dejar de lado el control. Parte de lo que lo hace tan satisfactorio es justamente este concepto de explorar, construir, seguir explorando y seguir construyendo. Cada vez que te tomes tu tiempo para explorar, por lo general obtendrás algo que valga la pena para el futuro.
Para esta reseña, jugamos Below Zero en un PlayStation 5, donde el juego corre casi impecable. Una de las promesas de sus desarrolladores en cuanto a su desempeño técnico era resolución de 4K con 60 cuadros por segundo estables, y aunque esta promesa casi se cumple en su totalidad, lo cierto es que a veces puede fluctuar en los FPS.
Mientras exploraba zonas marítimas, recuerdo haber experimentado varias caídas en la tasa de cuadros por segundo. No fueron muy notables, y por lo general solo duraron unos cuantos segundos, pero definitivamente están ahí. Sobretodo cuando hay demasiados elementos en pantalla, el juego le sufre un poco.
A veces también había caída de frames cuando subía a la superficie, pero lo que más me afectó cuando hacía esto eran las texturas. Al sumergirme, las texturas no siempre cargaban correctamente y lo mismo sucedía cuando ascendía a la superficie. De igual forma, la distancia de dibujado a veces podría variar, con resultados inconsistentes.
Fuera de estos pequeños problemas, Below Zero tiene un fuerte rendimiento en PS5 aunque todavía hay unas cuantas cosas por corregir, como por ejemplo, el audio. A lo largo de mi aventura detecte que el sonido a veces se escuchaba más fuerte en ciertas zonas que en otras, y sí, tenía que ajustar el volumen de mi TV para no quedarme sordo. Este problema en realidad me ocurrió muy pocas veces, pero creo que es importante resaltarlo.
Adicionalmente, me complace decir que Below Zero sí hace uso de las funcionalidades únicas del DualSense, aunque de manera muy sutil. Cuando estás sumergido, sentirás una vibración en el control cuando llegues a chocar o rozar contra peces u otros objetos submarinos, mismo caso cuando prendes la linterna o recoges algún objeto. No es tan profundo como, digamos, Astro’s Playroom o Returnal, pero definitivamente no se siente como un control tradicional y siempre es bueno saber que los desarrolladores están aprovechando este gimmick del control.
Tal y como te lo mencionaba hace unos cuantos párrafos, la mecánica principal de Below Zero consiste en explorar y recolectar recursos, lo cual genera un loop de gameplay bastante satisfactorio. Al mismo tiempo, también es fácil perderse entre toda la fauna marina, lo cual puede ser algo muy bueno o muy malo, dependiendo de cuál sea tu objetivo en esos momentos.
Por ejemplo, puede que estés buscando cierto recurso en específico que necesitas para construir algo, y dicho recurso solo aparece en determinada área. Una vez que llegas ahí, debido a lo similar que luce el océano de Below Zero, es fácil perderse y terminar en un área totalmente diferente. ¿Por qué es esto algo bueno? Pues porque podrías descubrir un nuevo recurso, una nueva especie o algún otro objeto de interés. Y pues es malo porque también te podrías encontrar con algún depredador que quiera comerte.
Así es, además de las criaturas pasivas, también hay depredadores en Below Zero que tienen como objetivo devorarte. De hecho, también existe una variante del Leviatán del primer Subnautica y sí, los encuentros con esta criatura son igual de aterradores. Sobra decirlo, pero si le tienes miedo al mar abierto, entonces no deberías entrarle a esta franquicia.
En lo personal, y cuando no estaba buscando un recurso en específico, la idea de perderme en el océano me resultó bastante relajante, sobretodo porque me daba una sensación de lo profundo que son las aguas en el juego. De hecho, yo diría que el área en sí no es demasiado grande, pero sí profunda.
No sabría decirte si es más grande que en el primer Subnautica porque honestamente no lo exploré tanto como me hubiera gustado, pero sí puedo decirte que Below Zero se siente bastante extenso.
Para serte completamente honesto, Subnautica: Below Zero es un juego que ni siquiera figuraba en mi radar, pero tras haber pasado poco más de 30 horas con él, puedo decirte que se ha convertido en uno de mis favoritos en lo que va del año.
La exploración es gratificante, coleccionar recursos para después crear objetos se siente sumamente satisfactorio, y en ocasiones incluso puede ser un juego bastante relajante. Me alegra decir que Below Zero es una digna continuación del original que sí o sí tienes que probar, incluso si el primer título no llamó mucho tu atención.