Al no tener actualmente un gran apoyo first party que desemboque en la creación de juegos y nuevas propiedades intelectuales exclusivas, el PS Vita gradualmente se fue convirtiendo en una plataforma muy factible para la publicación de juegos independientes pequeños, muchos de ellos salen a la par de versiones para otras plataformas o incluso de los móviles. Eso no es algo completamente negativo al ser una plataforma muy versátil y flexible, al menos algunas propuestas interesantes enriquecen a cada semana el catálogo del PS Vita y muchas veces son juegos que puedes comprar sin gastar mucho dinero.

El juego que hoy les presentamos es obra de un pequeño estudio polaco llamado iFun4All y originalmente no es de PS Vita sino más bien de dispositivos móviles; aprovechando que la consola portátil de Sony incluye una pantalla táctil y el gameplay del juego la usa por completo fue que también se expandió a dicha plataforma.

Vamos a revisarlo.

Érase una vez la sombra de un ave robótica

La apariencia del juego es buena, sobre todo para todos aquellos que le gustan los diseños steampunk. El protagonista del juego es un pequeño pajarillo robótico que tiene que llegar de un punto A a uno B en niveles bidimensionales llenos de peligros; en el momento en que logras meterte en una jaula al final del nivel habrás superado la prueba.

Acompañado de buena música, el juego se ve bien en la pantalla del PS Vita, como su nombre lo indica te encontrarás con un fondo completamente rojo con sombras que componen los objetos sólidos, incluyendo el personaje que tú controlas.

El juego funciona de forma similar a como lo hacen varios runners para dispositivos móviles, sólo que en lugar de que saltes más bien un toque en la pantalla equivale a  que el personaje se teletransporte a donde tú desees, sorteando así todos los peligros del nivel gracias a tus habilidades. El concepto puede parecer simple, aunque como les comentaremos en el siguiente apartado, se va complejizando para convertirse en un juego difícil.

Como picarse el dedo con una aguja

Los primeros niveles en Red Game lo hacen parecer como un juego bastante simplón, pero el giro que se le da con varias mecánicas y el mismo diseño de sus niveles provocan que por el nivel 10 de 60 las cosas se vayan tornando difíciles y hasta desesperantes.

Me agradó la forma en que va evolucionando la curva de aprendizaje del juego y cómo la inclusión de diferentes mecánicas como romper bloques, cambiar la dirección en que vuela el ave, entre otras, te van enseñando lo que necesitas saber para enfrentarte a los niveles más difíciles.

Así, Red Game rápidamente se convierte en un juego de precisión milimétrica en el que debes ajustar muy bien la precisión de tus dedos al tocar lugares muy específicos de la pantalla y en el momento exacto para poder sobrevivir. Cada vez los niveles son más intrincados y diseñados específicamente para hacerte sufrir, de hecho mi experiencia fue como la de tener frente a mi una gran cantidad de agujas de manera que me daba miedo que mi toque a la pantalla terminara realmente mal para el pobre pajarillo metálico que cada vez moría con más frecuencia en un juego muy desafiante.

El diseño de niveles y de mecanicas es funcional, pero desafortunadamente el juego tiene también errores significativos que no nos dejaron tener la mejor experiencia.

En primer lugar el juego no se encuentra libre de errores técnicos, me encontré con molestos bugs al reiniciar alguno de los niveles que provocaban que se reiniciar sola la partida varias veces sin que yo quisiera. El segundo error, y me parece que es lo más grave, es que en un juego de tanta precisión como Red Game no podemos darnos el lujo de que la pantalla no resulte tan adecuada para lo que el juego demanda, imagino que quizá en una pantalla mucho más amplia como la de una tablet podría ser mucho más cómodo y funcional, pero en el PS Vita se siente incómodo.

La curva de aprendizaje del juego pinta muy bien y se siente adecuada en aproximadamente un 30% del juego, desafortunadamente en adelante la pequeña pantalla del Vita combinada con un diseño de niveles que más bien se va tornando hacia lo frustrante hace que el juego se convierta en algo que quizá abandones con facilidad.

Comentarios finales

Red Game Without a Great Name es una propuesta modesta y sencilla con un par de buenas ideas para resultar en un juego desafiante que se torna adictivo por un buen rato. Algunas mecánicas también parecen creativas para un juego del género y le dan solidez en una buena parte de los niveles que incluye.

Desafortunadamente la de imprecisión en la pequeña pantalla del Vita sumada a un diseño que gradualmente pareciera únicamente diseñado para frustrar al jugador puede tener dos resultados: ser adictivo para jugadores entusiastas que acepten las mecánicas de jugar con una pantalla táctil o ser una experiencia frustrante, pasajera y olvidable que abandonarás con facilidad.

Al final del día sus contenidos son abundantes para ser un juego bastante económico, si te gustan los juegos de este tipo podría hacerte pasar un buen rato.