Desde ya hace un par de años, hemos visto una sincero interés por parte de Bethesda por montarse en toda la oleada de realidad virtual que se está viviendo actualmente, esto por medio de adaptaciones de juegos que ya tenía a estas tecnologías. DOOM y Skyrim fueron los conejillos de Indias para que la compañía experimentara con esta nueva tendencia y según parece, lo anterior continuará en los siguientes meses. Durante su conferencia de prensa de E3 2018, el publisher norteamericano reveló Wolfenstein Cyberpilot, experiencia VR ubicada en el universo de B.J. Blazkowicz que tuvimos la oportunidad de probar.
Wolfenstein Cyberpilot se ubica 20 años después de los hechos que vimos en el espectacular Wolfenstein II: The New Colossus, por lo que según parece, será crucial para la historia de esta franquicia y probablemente, servirá para atar algunos cabos entre las entregas principales y lo que será Youngblood. Lo anterior también me hace pensar que probablemente, estemos frente a un título que se siente mucho más completo en todo sentido, sobre todo en duración; es decir, podría ser más que solo una breve demostración de los avances que Bethesda y sus estudios han tenido en VR.
En el demo que pudimos probar en E3 2018, se nos colocaba en control de un Panzerhund, estos perros nazi mecanizados que lanzan fuego por el hocico. Como parte de la resistencia, jaqueamos a una de estas máquinas para usarlas en contra de sus creadores. Al recorrer algunos túneles y alcantarillas, vas quemando y arrasando con absolutamente todo lo que se cruza en tu camino. El sentimiento de poder es verdaderamente sensacional y además, hacer el salto hacia adelante para atravesar una pared por ejemplo, es verdaderamente espectacular.
Girar la cabeza funcionaba como una especie de mira, además de que te podías apoyar de los análogos de los controles del HTC Vive para caminar o para dar giros un poco más violentos. La verdad es que los controles de Wolfenstein Cyberpilot se sienten geniales y a diferencia de lo que suele pasar con este tipo de experiencias más complejas de realidad virtual, acostumbrarse a ellos es bastante simple y natural. El único “pero” que le sentí a todo este asunto, es que probablemente para quienes se marean fácilmente, pueda ser un poco complicado, pues no se echa mano de ningún truco para reducir los síntomas negativos del VR. Dar un salto largo hacia adelante sí te llega a confundir un poco.
La verdad es que disfruté muchísimo de quemar a decenas de nazis en Wolfenstein Cyberpilot. Sus controles son precisos y claro, la experiencia que presenta es muy inmersiva en todo sentido. Ahora habrá que esperar a que se nos diga más sobre el juego en sí, para poder saber si será un título completo que dure al menos seis u ocho horas, o si es que vendrá incluido como un extra en algo como Youngblood, por ejemplo.