La efímera existencia de Firewalk Studios

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Ante las múltiples embestidas de Microsoft para adquirir estudios de videojuegos alrededor del planeta, PlayStation no quiso quedarse atrás en los últimos años y agregó a sus filas a diversos equipos creativos, siendo un objetivo prioritario, centrarse en experiencias bajo la modalidad de servicio.

Para el efecto, Sony compró en 2022 a Neon Koi, buscando incursionar en el sector de los teléfonos móviles y un año más tarde, haría lo propio con Firewalk Studios, que trabajaba en Concord, pero carecía de experiencia previa en una industria tan competida. Hoy, ambas unidades de negocio han sido finiquitadas.

Trasciende que Hermen Hulst, jefe de PlayStation Studios, quedó enamorado del concepto de Concord, apostando fuertemente por esta propiedad intelectual desde que la vio, comparándola con un universo similar al de Star Wars y que, según él, podría haber sido ser un bastión para la compañía en el mediano y largo plazo.

No obstante, el pobre diseño de los personajes, la mala gestión de comercialización del producto y, por ende, la escasa participación de jugadores simultáneos, detonaron que el título en cuestión fuese retirado del mercado a tan sólo diez días de su estreno, estimándose que no logró sobrepasar las 25 mil unidades vendidas.

Pese a que Firewalk Studios intentó revivir el concepto bajo el modelo free to play, el señor Hulst no quiso mayor especulación y decidió cortar con la problemática de raíz, misma que no sólo se limita a las personas que han perdido su empleo, sino a la carencia de la marca para apostar por las experiencias como servicio.

Este tipo de maniobras no son una novedad en Sony, pues en el pasado también han adoptado políticas similares con estudios que en su momento ofrecieron grandes producciones como Bigbig Studios (Pursuit Force), Evolution Studios (MotorStorm) e Incognito Entertainment (Twisted Metal Black).

Con la misma suerte corrieron London Studio (SingStar), Studio Liverpool (Wipeout), y Zipper Interactive (SOCOM), sin olvidarse que Japan Studio fue disuelto para realizar ajustes internos que conformaron Team Asobi y aunque Astro Bot ha sido todo un éxito, se desconoce el impacto a futuro (positivo o negativo) de esta decisión.

La despedida de Firewalk Studios es una triste noticia para toda la gente que trabajó en crear una nueva franquicia, que pasó totalmente inadvertida por el público y mostró un control de daños limitado por parte de PlayStation, ya que, si bien rápidamente lograron borrar cualquier rastro de esta marca, las pérdidas de cientos de millones no podrán ser olvidadas en los estados financieros.

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José Celorio