A finales del año pasado se dio a conocer que Mohammed bin Salman, príncipe heredero de Arabia Saudita, compró por medio de su MiSK Foundation, una organización sin fines de lucro, un tercio de las acciones de SNK, esto como parte de su plan Saudi Vision 2030, que trata de atraer inversores, turismo y ofrecer una mirada diferente de su nación. Ahora, recientemente se reveló que Mohammed bin Salman ha vuelto a invertir en la industria de los videojuegos.
De acuerdo con Eurogamer, Arabia Saudita ha utilizado su Fondo de Inversión Pública para invertir $3.3 mil millones de dólares en compañías como EA, Take-Two Interactive y Activision Blizzard. Esto equivale a un millón de acciones en cada compañía, aunque esto solo representa una parte menor de la propiedad de las empresas.
Aunque esto bien podría funcionar en favor del plan Saudi Vision 2030, Mohammed bin Salman y su gobierno se han visto en varias controversias en los últimos años. Notoriamente, su presunto papel en la orden del asesinato en 2018 del periodista Jamal Khashoggi. Por otro lado, el verano pasado, Riot Games iba a llevar a cabo el Campeonato de Europa de League of Legends en este país, pero cortó su relación con la nación después de que la comunidad de eSports demostró su descontento con esta decisión.
Vía: Eurogamer