Este 2015, se cumplen 30 años del lanzamiento de la primera entrega de Back To The Future, una de las sagas más divertidas en toda la historia de Hollywood, y que sin duda es una de las historias de ciencia ficción más reconocidas. Coincidiendo con el 30 aniversario, hoy 21 de octubre del 2015 sería la fecha en la que Marty y el Doc Brown llegaron al futuro de 1985 en la segunda película, que se estrenó en 1989.
Una de las razones que hizo a Back To The Future una saga de culto, fue su apuesta por un futuro más o menos acertado. En el Hill Valley del 2015, podemos encontrar un repertorio de profecías que hasta cierto punto se cumplieron. El cliché de los autos voladores continúa siendo una utopía cada vez menos probable. Las clínicas de rejuvenecimiento y los meseros digitales podrían no estar tan lejos de cumplirse. Por otro lado, el uso exagerado de gadgets ya es toda una realidad. Las videoconferencias son el día a día para las personas de negocios, como la de Marty con Needles. Además, si ponemos atención en el arresto al nieto de Biff, podemos ver un dron grabando la noticia; si bien los drones aún no son la fuente primaria de noticias, nadie puede dudar que el término y su uso actual es cada vez más común.
Por otro lado, las profecías de humor también están presentes en el filme. Nadie que haya visto la película, olvidará el anuncio holográfico (otra cosa a la que más o menos le atinó) de Jaws 19. Además, Back To The Future tiene una relación muy especial con los deportes. Más allá del Almanaque 1950-2000, con el que Biff amasa su fortuna y crea una realidad distópica nada agradable para Marty, la apuesta más interesante de Robert Zemeckis en su película, fue la predicción de que los Chicago Cubs romperían La Maldición de la Cabra en el 2015.
La franquicia de los Cubs, que existe de 1870, es una de las más antiguas y de mayor tradición en todo el béisbol de Grandes Ligas. En 1908 (107 años), fueron campeones de la Serie Mundial por última vez, cuando derrotaron a los Detroit Tigers en el entonces West Side Park de Chicago. Desde 1916, los Cubs juegan en el mítico Wrigley Field, que actualmente es el parque de pelota más antiguo, característico por sus paredes de ladrillo atrás de home, y las enredaderas que visten la barda de homerun por todos los jardines. Parte de la gran historia de este inmueble, se dio el 1 de octubre de 1932, cuando durante el tercer encuentro de la Serie Mundial, Babe Ruth apuntó hacia el jardín central y en el siguiente lanzamiento se voló la barda; ese fue su último cuadrangular en una postemporada que incluyó siete campeonatos.
Cuando se habla de maldiciones en el béisbol, la número uno fue sin duda la del ya mencionado Babe Ruth, mejor conocida como La Maldición del Bambino, que inició en 1918 cuando los Red Sox mandaron al fenómeno a los Yankees, iniciando una era de oro en Nueva York, y una extensísima sequía en Boston, que se extendió por casi 90 años hasta que por fin ganaron en 2004.
Volviendo a los Cubs, la situación es mucho más triste, pues no han ganado desde hace más de cien años, y todo sería la culpa de una cabra. Esta historia se remonta al 6 de octubre de 1945 (70 años), cuando Billy Sianis intentó ingresar al Wrigley con una cabra para el juego 4 de la Serie Mundial. Sianis, que nació en Grecia y emigró a América a sus 17 años, fue el propietario fundador de la Billy Goat Tavern, bien conocida en la ciudad y por el entonces dueño de los Cubs, Phillip K. Wrigley. En aquél día, la serie estaba 2-1 a favor de Chicago, que curiosamente enfrentaba otra vez a Detroit. Sianis se presentó a la entrada del estadio con dos boletos pagados, uno para él y otro para la cabra de nombre Murphy. De alguna manera logró entrar al estadio, pero fue retirado por el personal a cargo, pues según cuenta la historia, los aficionados contiguos se quejaron del mal olor del animal.
El descontento de Sianis fue tal, que mientras salía del inmueble dijo: “Los Cubs no volverán a ganar”. Aunque esta parte no está confirmada, se dice que amarró a la cabra en algún lugar del estacionamiento y regresó al estadio. Después de las dos horas exactas que duró el juego, el marcador fue 4-1 a favor de los Tigers para igualar la serie a dos juegos. La familia de Sianis, aseguró que el tavernero le mandó un telegrama a K. Wrigley en el que dijo “ustedes van a perder esta Serie Mundial,y nunca más volverán ganar otra porque insultaron a mi cabra”; al final, los Cubs perdieron el título en siete juegos, y desde entonces no han vuelto a probar las mieles de una Serie Mundial.
Para 1985, las cuatro décadas de sequía confirmaban la maldición, por lo que a manera de sátira (bienaventuranza para los aficionados de Chicago), Zemeckis vaciló con prolongar por otros treinta años la maldición, pero también con terminarla, pues cuando Marty ve las noticias deportivas, se anuncia el campeonato de los Cubs por barrida sobre un ficticio equipo de Florida que tiene como mascota a un lagarto. Pues bien, ya pasaron esos treinta años y la maldición se mantiene. En el 2003, el equipo estuvo a punto de regresar a una Serie Mundial, pero el incidente Steve Bartman puso de luto a toda la ciudad. Los Cubs ganaban 3-0 a los Marlins (sí, de Florida) en la parte baja de la octava entrada, a solo cuatro outs de tierra prometida, pero cuando Luis Castillo bateó de foul por la tercera base, un aficionado metió las manos para intentar cachar una pelota que ya estaba prácticamente dentro del guante de Moisés Alou. El out no llegó, y el aficionado con los audífonos terminó siendo escoltado por la seguridad del estadio ante los insultos y amenazas de los presentes; el incidente fue parodiado en Family Guy y en Los Simpsons, y hasta tiene su propio documental, Catching Hell.
Regresando al día de hoy, 21 de octubre de 2015, los Cubs se encuentra otra vez en Serie de Campeonato, pero completamente opuesto al 2003, ahora están a un paso de ser eliminados, pues se encuentran 0-3 abajo en la serie con los Mets, que irónicamente han funcionado de la mano de Daniel Murphy, quien comparte nombre con la cabra de la maldición, y acaba de igualar el récord de homeruns en partidos consecutivos durante postemporada (cinco). Hay quien dice que ya se le acabó la gasolina al DeLorean, pero hay quien tiene su fe en lo más alto, esperando que su equipo repita la hazaña de los Red Sox en 2004, cuando se convirtieron en el único equipo que ha venido atrás de un 03 para ganar un banderín; después de remontar a los Yankees, barrieron a los Cardinals para romper La Maldición del Bambino.
La respuesta la sabremos esta noche, o estos días si es que la serie sigue viva. Por ahora, solo queda seguir disfrutando el culto y todos los detalles de Back to the Future, que si bien termina por no atinarle al fin de esta maldición, al menos sí influyó en Pepsi para poner a la venta una edición especial de la botella que aparece en la película.
