XBOX ONE, PC
XBOX ONE
Sumo Digital
Microsoft Studios
15/02/2019
El año era 2010. El Rodo de 20 años apenas estaba en el segundo año de la universidad y no tenía ni idea de qué haría con su vida. Todo se apegaba a una rutina muy específica que se dividía entre la escuela, el trabajo y las noches alocadas de videojuegos en compañía de buenos amigos. En una de esas noches, Panchito y yo descubrimos un juego llamado Crackdown 2, el cual decidimos rentar en el BB y que por lo que vimos en la portada, nos daría una noche muy agradable. Lastima que el juego de Ruffian Games no fue lo que esperábamos, por lo que pasó casi desapercibido en nuestras crónicas nocturnas de papitas y videojuegos.
Cuatro años más tarde, durante el E3 de 2014, muchos nos asombramos cuando Microsoft anunció que estaba planeando traer de regreso a la franquicia. No les miento al contarles que yo me quedé prácticamente con una cara de “ah, bueno”, sin embargo, la curiosidad de saber qué tan grande y mejorada sería esta tercera entrega, fue un sentimiento que difícilmente pude olvidar.
Honestamente, cuando me enteré de que el asombroso Terry Crews estaría involucrado en el juego, de inmediato pensé, “oye, podría terminar siendo una gran sorpresa”, así que las ganas de probar el tercer juego de la franquicia simplemente se fueron para arriba, vamos, ¿quién no es fan de la actitud de Crews y de su actuación en White Chicks? Lo que nadie se imaginaba, era que satisfacer nuestra curiosidad en torno a Crackdown 3 resultaría ser un reto de muchísima paciencia –después de todo, muchos creíamos que el juego sería cancelado en algún punto. Casi cinco años después, muchos esperamos que el largo periodo de desarrollo haya servido a los chicos de Sumo Digital para pulir el juego en su totalidad y así, entregarnos un título divertido que nos mantenga pegados a la consola y que nos deje satisfechos.
Después de la larga espera, el momento por fin ha llegado, Crackdown 3 estará disponible esta misma semana –el 15 de febrero, para ser precisos– pero, ¿los pectorales del increíble Terry Crews serán suficientes para hacer que el título merezca nuestro amor? Agarra una caja de pañuelos bebé, porque aquí comienza la reseña de Crackdown 3.
La trama de Crackdown 3 no es nada asombrosa: tu personaje es un miembro de la Agencia, una organización que busca hacer justicia por cualquier medio y que tiene un nuevo objetivo, la ciudad New Providence. Ésta es una urbe controlada por los malvados líderes de Terra Nova, una diabólica corporación que se encarga de maltratar al pueblo –una mafia del poder, por decirlo de alguna manera. La primera misión del equipo de la Agencia termina en un total fracaso, todos los agentes mueren en el primer ataque, pero gracias a la resistencia de la ciudad, tu rostizado personaje será reanimado para que, juntos, puedan destruir a Terra Nova y sus líderes.
Listo, esa es la trama del juego. Como puedes ver, es simple y hasta genérica. No puedo decir que tenga un mal desarrollo, pero no tiene algo que no hayamos visto en otros productos, por lo que en este sentido, la oportunidad de contar al jugador una historia diferente que lo mantenga enganchado al título ha sido desperdiciada, además, considerando el tiempo que tomó el desarrollo de esta tercera entrega, cualquiera pensaría que su trama sería un poco más interesante, no una tan simple y hasta predecible. Por si esto no fuera poco, el desarrollo de los personajes prácticamente no existe, dejando la breve historia de cada uno de estos resumida en unas cuantas líneas que pocos van a leer.
Pasemos a lo que verdaderamente puede hacer que Crackdown 3 destaque: su modo de juego. La tercera entrega de la franquicia es un título de acción y aventura en tercera persona que se desarrolla en un vertical mundo abierto, es decir, dentro del mapa –que por cierto es de buen tamaño–, el jugador podrá explorar diferentes niveles.
Tu objetivo principal dentro del juego será debilitar la red de gangsters que controla la ciudad y acabar con cada uno de ellos. Para lograrlo, tendrás que capturar torres, destruir instalaciones y escalar antenas de propaganda para así, obtener información detallada de cada uno de los jefes de Terra Nova, ubicarlos y enfrentarlos en duelos que involucran muchos disparos y explosiones. En total, son nueve jefes los que tendrás que eliminar, lo interesante, es que al eliminar a uno de estos tenientes, debilitarás al que está por encima de él, algo similar al sistema némesis de SoM. Aunque cada uno de estos enemigos tiene su propia dinámica, al final hacen que el juego se sienta repetitivo y hasta frustrante por la cantidad de torres que debes reclamar o instalaciones que debes destruir antes de enfrentar al jefe final.
Ahora, al iniciar el juego, podrás elegir qué agente de la Agencia quieres controlar. La movilidad de cada personaje es la misma, pero lo que cambia son las estadísticas de cada agente. Por ejemplo, si decides que Jaxon –interpretado por Terry Crews– es tu personaje ideal, podrás obtener un extra de experiencia en las estadísticas de fuerza y explosivos. Eso sí, deberás mejorar constantemente los atributos de tu agente para que así puedas tener acceso a más movimientos, almacenar más explosivos, acceder a dispositivos bien locos de la agencia, cargar objetos más pesados y realizar un salto con triple impulso. Para lograr lo anterior, tienes que disparar, golpear, lanzar explosivos y manejar vehículos constantemente para ganar experiencia en cada uno de estos atributos. Por su parte, para mejorar la agilidad deberás recoger orbes de verdes distribuidos en el mapa y que, en algunos casos, no son fáciles de alcanzar. Cabe señalar que también hay orbes escondidos que mejoran todas tus estadísticas. Esto le da un buen sentimiento de progresión al juego, ya que para lograr salir victorioso en los enfrentamientos con enemigos más poderosos, tus estadísticas tienen que tener un nivel adecuado.
Pasando a los controles, los de Crackdown 3 son un tanto extraños. Moverse no es ningún problema –como en otros juegos, hacerlo depende del stick izquierdo del control, mientras que la cámara se controla con el stick derecho–, sin embargo, acciones como apuntar, disparar, arrojar objetos, interactuar con el mundo y evadir ataques enemigos – movimientos que se realizan con los gatillos y botones de tu control– puede llegar a ser confuso. Por ejemplo, para recargar una de tus armas tendrás que oprimir LB (left bumper), en lugar de X, como en cualquier juego de disparos. Adicionalmente, los comandos no se sienten tan responsivos y de pronto sentirás que las acciones que ocurren a tu alrededor son mucho más rápidas de lo que reacciona tu personaje.
Como miembro de la agencia tendrás acceso a un armamento jugoso que incluye diferentes tipos de pistolas, escopetas, rifles, ametralladoras y explosivos. Utilizar cada una de ellas tiene su propia dinámica, pero poco encanto, ya que al dispararlas, todas se sienten muy similar. Para cambiar las armas que portas en cada partida –las cuales pueden ser hasta tres y un explosivo– sólo tienes que ir a algún punto de suministros y cambiarla. Cada una de ellas tiene sus propias estadísticas de alcance, daño y cadencia de tiro, además de una efectividad mayor contra ciertos enemigos, lo que le da un picosito adicional a los enfrentamientos que, por lo general, son con grandes grupos de enemigos. Algo que me gustó bastante, es que sólo necesitas recoger un arma o vehículo para que estos se agreguen automáticamente a tu inventario, facilitando la personalización del armamento para cada combate.
Regresando al tema de los enemigos, la inteligencia artificial de Crackdown 3 es buena y de hecho me sorprendió la buena puntería que tiene, ya que en muchas ocasiones estuve recibiendo daño sin saber de dónde llegaban las balas. La cosa se pone mucho más interesante cuando te enfrentas a grupos grandes de enemigos que pueden incluir mecas, drones, robots, soldados y soldados de élite que son mucho más desafiantes. En ese sentido me llevo un buen sabor de boca y varias muertes que me hicieron enfurecer en más de una ocasión.
Pasando al tema del mapa, como dije unas líneas más arriba, tiene un buen tamaño, aunque desplazarte en él será mucho más frustrante de lo anticipado. Digamos que quieres ir del punto B al punto C, lo normal sería que abrieras el mapa, colocaras un marcador a C y encontrarás la ruta más rápida para llegar ahí. Todo podría ir muy bien si no fuera por la verticalidad del espacio de juego y el diseño del mapa que incluye puentes, muros que no se pueden escalar –¿quién diseñó esto, Trump?– y pequeños riachuelos que, de caer en ellos, alentarán muchísimo tu desplazamiento. Para aminorar lo anterior, la gente de Sumo Digital decidió colocar diferentes vehículos que el jugador puede reclamar muy a la GTA, pero que se dañan fácilmente y que, en la mayoría de los casos, se manejan torpemente. También puedes llamar a Rayo, el vehículo de la agencia que puede adoptar tres formas diferentes, cada una de ellas con sus propias habilidades, pero que igualmente no tiene tanta resistencia a las colisiones y ataques enemigos. Si eres de los que se desespera rápidamente como yo, puedes utilizar los viajes rápidos que se ubican en los puntos de suministro y que cuentan con buenos tiempos de carga.
El apartado gráfico de Crackdown 3 me ha generado sentimientos encontrados. Por un lado, nos presenta un estilo de cel shading que encaja muy bien con lo futurista que se ve el escenario y que cuenta con imágenes animadas muy buenas, y por el otro, nos entrega un título con errores de programación, una mezcla de sonido deficiente y detalles en el mundo poco satisfactorios. Tiene buen lejos, pues.
El motor gráfico del esta entrega es el popular Unreal Engine que, para mi gusto, ha demostrado en varias ocasiones ser uno de los mejores del mercado. A pesar de esto, Crackdown 3 tiene poca profundidad en sus visuales y al aventurarte en este mundo, hasta te llegarás a preguntar si valió la pena esperar tanto por él. Un buen ejemplo de a qué me refiero es la representación del fuego dentro de juego, la cual, luce acartonada y en poca sintonía con el diseño artístico del título. Estas deficiencias también se pueden notar en los edificios que a lo lejos se miran muy bien, pero que al estar cerca de ellos parecerá que no se tomaron la molestia de volverlos a revisar y colocar en ellos más vida.
Por otro lado me da mucho gusto informarles que Crackdown 3 sí cuenta con voces en español latino –participan grandes actores como Sebastián Llapur y Carlos Segundo–, pero por alguna razón que no logro entender, las voces no están bien sincronizadas y en varios momentos los diálogos que se escuchan dentro del juego se cortan por otras líneas de voz sin razón. El resto de los sonidos del juego están bien, son cumplidores y pasan sin pena ni gloria.
Por último, debo mencionar que, durante el tiempo en el que estuve jugando experimente algunos errores de programación, un poco de lag y hasta provocó un error severo que me obligó a reiniciar mi Xbox One por completo.
Crackdown 3 tiene más deficiencias que virtudes. Su trama es muy simple y hasta llega a ser predecible. Aunque tiene una buena idea en el apartado estético, éste se ve mermado por el poco cuidado que se puso en los detalles. Por otro lado, el gameplay de Crackdown 3 es más caótico y frustrante de lo que se aprecia en los videos previos al lanzamiento del juego. Sus comandos tienen una respuesta extraña y a pesar de contar con un mapa de buen tamaño, recorrerlo se convierte en una actividad repetitiva que le quita mucho de su brillo.
En general, creo que la experiencia de Crackdown 3 deja mucho que desear, tomando en cuenta que se trata de la primera gran exclusiva de Xbox en este 2019 y que el juego estuvo en desarrollo casi cinco años, tiempo suficiente para que pudiera brillar como una de las grandes estrellas de la compañía. Sí, la pase bien durante un par de horas, pero después de eso, jugar se convirtió en un tarea más sosa que divertida.
Me gustaría aclara que el juego sí cuenta con un aparatado multijugador, pero que durante el tiempo en el que estuvimos jugando no pudimos probarlo.
Nuevamente, mi querido barrio, si tienes muchas ganas de probar Crackdown 3, te invito a que te generes tu propia opinión del juego y que le des una probada el próximo 15 de febrero en Xbox One o PC.