Con la adquisición por parte de Disney, nos quedó claro que la explotación de Star Wars iba muy en serio. Podríamos decir que hasta el momento, las coas van por muy buen camino, sin embargo, esta misma semana se tendrá una dura prueba con el estreno de Rogue One: A Star Wars Story, primera de tres cintas spin-off que se seguirán estrenando a lo largo de los siguientes años. Cosas como un director nuevo, cierto escándalo por escenas que tuvieron que ser filmadas de nueva cuenta y por supuesto, el tono que la casa de Mickey Mouse le podría dar a esta cinta, son de llamar mucho la atención.
En nuestra opinión, lo más probable es que Rogue One: A Star Wars Story funcione de muy buena manera y cumpla con las enormes expectativas que hay a su alrededor, no obstante, tampoco podemos ignorar la posibilidad de que las cosas no salgan tan bien. Por tal motivo, nos pareció interesante enlistar siete elementos muy puntuales que nos preocupan de esta cinta. Esperamos tus comentarios al respecto. Recuerda que éstas son meras especulaciones que al final, serán confirmadas o desechadas cuando veamos el producto terminado.
Una de las primeras cosas que nos saltaron a la vista cuando Rogue One: A Star Wars Story fue presentada, tenía que ver con el gigantesco número de personajes nuevos que conoceríamos. Conforme se ha ido acercando la fecha de estreno de esta película, lo anterior se ha venido confirmando con la adición de viejos conocidos. Los blockbusters modernos empiezan a sufrir de querer introducirnos a demasiados personajes, causando que al final, cada uno de ellos se sienta efímero y sin importancia para la historia. Crucemos los dedos para que esto no le vaya a pasar a lo nuevo de Star Wars.
Todos sabemos que Darth Vader estará haciendo su regreso triunfal en Rogue One: A Star Wars Story, sin embargo, podemos estar seguros de que sus apariciones serán bastante esporádicas y sólo para dar algo de contexto. El verdadero peso del villano recaerá en los hombros de Orson Krennic, director de la unidad de armas avanzadas del Imperio Galáctico que por supuesto, está a cargo del nuevo armamento que será implementado en la famosa Death Star. Los malos siempre han sido parte angular de Star Wars, por lo que si se quiere tener una cinta bien estructurada, debemos de contar con un nuevo antagonista que además de causar temor, tenga bien fundamentadas sus razones.
A diferencia de lo que normalmente pasa con las películas de esta saga de ciencia ficción, en Rogue One: A Star Wars Story veremos una aproximación mucho más concentrada a lo que se vive dentro de un campo de batalla de este universo con personas comunes y corrientes sin poderes especiales; es decir, tendremos una cinta bélica en toda la extensión de la palabra. A pesar de que por su mismo nombre, el tema de la guerra siempre ha sido muy importante, esta es la primera vez que el concepto de los Jedi y la Fuerza, no será el central. Nos preocupa que debido a todo esto, vayamos a tener batallas fuera de contexto o que no alcancen el climax necesario para funcionar, pues además, está el elemento de tener a Disney detrás buscando no lucir escenas tan crudas como algunos querríamos.
La verdad es que a pesar de que la casa de Mickey Mouse está explotando con todo a nuestra amada Star Wars, los productos que han sido resultado de esto, han cumplido de muy buena forma, sin embargo, creemos que cada vez que se lanza uno nuevo, lo mejor es mantenerse escéptico al respecto. Un error garrafal que Rogue One: A Star Wars Story podría cometer, es que su historia se sintiera poco relevante o sin importancia alguna para el lore de la serie a la que representa. Sería una verdadera pena que saliéramos del cine diciendo que este spin-off aportó nada ni afectó al universo de Star Wars y que más bien, sólo fue intento por hacer dinero de manera simple.
Sin temor a equivocarnos, podemos decir que Star Wars cuenta con algunos de los fanáticos más apasionados y hasta locos en toda la historia del entretenimiento, sin embargo y al ser una franquicia masiva que busca atacar a toda clase de público, también tiene por ahí unos cuantos seguidores que sólo están montados en una moda sin entender bien de qué trata esta saga o cual es su esencia. Podemos estar seguros de que Rogue One: A Star Wars Story buscará complacer a viejos y nuevos admiradores con el famoso Fan Service, herramienta que de no ser usada de manera correcta, sutil y elegante, puede jugar totalmente en contra de la obra en cuestión, haciéndola lucir como un producto de baja calidad que sólo busca atender a las masas. Esperemos que Gareth Edwards y compañía estén al pendiente de esto.
Hace ya varios meses, algunos de los medios de espectáculos más importantes de Estados Unidos, coincidieron en un fuerte rumor que hablaba de problemas con el rodaje de Rogue One: A Star Wars Story. De manera concreta, se dijo que LucasFilm y Disney habían decido agregar dos semanas de filmaciones para volver a capturar algunas de las escenas de la película, incluso se afirmó que J.J. Abrams tuvo que aparecer para supervisar todo desde cerca. Las declaraciones oficiales sobre esto son sumamente escasas y nada concretas, sin embargo, podemos estar casi seguros de que lo anterior sí ocurrió. Puede ser que al final, los medios hayan exagerado estas eventualidades, pero por supuesto, queda la duda sobre si éstas afectarán o no al resultado final de la cinta.
Después de haberte expresado algunas de nuestras preocupaciones concretas sobre Rogue One: A Star Wars Story, toca hablar sobre la más importante de ellas. No habría error más grave e inaceptable que el que de alguna manera, este spin-off no lograra capturar la esencia de la serie y se terminara sintiendo como parte de algo completamente diferente. Sabemos lo importante que es vender muchos boletos en taquilla, sin embargo, antes que nada estamos hablando de una franquicia que ha marcado a millones de personas en todo el mundo desde finales de la década de los setenta, por lo que no merece de ninguna forma ser maltratada. Se ha dicho en repetidas ocasiones que Disney le ha dado completa libertad creativa a LucasFilm para dirigir estos proyectos, pero la idea de que algo pueda salir mal, está presente y por supuesto, nos aterra en sobremanera.
