TRENDING
BigRedButton
Sega
11/11/2014
En los últimos años no le ha ido muy bien a la mascota de Sega, y aunque tuvimos aciertos como Sonic Colors y Sonic Generations además del aceptable Lost World, el último juego exclusivo de Sonic para las consolas de Nintendo dejó grandes decepciones. El título de Wii U que lleva como subtítulo Rise of Lyric, nos llega de las manos del estudio norteamericano BigRedButton que se conforma de ex-empleados de Naughty Dog cuyo historial se remonta al desarrollo de títulos de plataformas como la aclamada serie Jak & Daxter.
Desde que se presentó este nuevo spin-off de la serie bajo el nombre de Sonic Boom que abarcaría una serie de televisión, una colección de juguetes y dos videojuegos para las consolas de Nintendo, hubo recepciones mixtas. El rediseño de personajes como Knuckles o Sonic con vendas y pashmina no fue del agrado de muchos quienes de entrada descalificaban este nuevo paso para la serie de Sega.
Aún así hubo quienes pusimos nuestra fe en este proyecto, cuando tuve la oportunidad de jugarlo en E3 y platicar con sus desarrolladores sí noté algunos problemas de diseño con el demo pero con lo poco que pude ver en el juego me di cuenta que, si bien no era un Sonic tradicional, el proyecto podría tener potencial pese al rechazo inicial de la nueva imagen de los personajes.
Llegó el momento de su lanzamiento y Sonic Boom: Rise of Lyric de Wii U nos dejó, sobre todo, una gran decepción ante un proyecto que pudo haber tenido mejores resultados.
Debemos dejar en claro que Rise of Lyric no es un título de Sonic tradicional y cambiaremos la velocidad tradicional de la franquicia por un juego de plataformas beat’em up mucho más lento y orientado a la exploración, algo parecido a lo que fueron clásicos del PS3 como Jak & Daxter, Ratchet & Clank y Sly Cooper o juegos de Sonic como Unleashed que tuvimos en Xbox 360 y PS3.
Más que ser un juego de Sonic del que se derivan productos como la serie de TV, en la serie Sonic Boom quizá es el programa de TV el producto principal y los juegos se quedan simplemente como propuestas secundarias, como cualquier otro producto inspirado en una licencia de televisión o una película.
Sonic Boom: Rise of Lyric corre en Cry Engine, por lo que podía esperarse mucho del juego en este aspecto. Desafortunadamente el resultado no es tan agradable como hubiéramos esperado, ciertamente hay partes en las que el juego luce correcto: escenarios llenos de superficies brillantes o húmedas, algunas texturas bien logradas y, entre otras cosas, efectos de iluminación acertados. Muchas otras veces no se ve bien, los modelos de los personajes brillantes no son lo más adecuado para la serie, hay algunas partes de los escenarios que no lucen de forma adecuada quizá por falta de trabajo o errores técnicos, el framerate tiene caídas constantes que entropecen la fuidez del juego y en general parece como que en su aspecto gráfico general faltó mucho trabajo para poder sacar el juego al mercado.
Errores técnicos constantes se traducen en el popeo de los personajes en pantalla, texturas que tardan en cargar y un completo festival de glitches, sobre todo a la hora en la que el gameplay se vuelve veloz por la naturaleza misma de Sonic.
Hubiéramos preferido algo similar a la fiesta de colores que tuvimos en Lost World que lucía muy bien en Wii U.
Las bases del juego parecían sólidas, dentro de sus menús tienes la opción de desbloquear artes conceptuales que nos hacen imaginar que el juego pudo haber lucido excelente con una mejor ejecución. Las ideas en sus escenarios parecían adecuadas y hay lugares en Sonic Boom que nos llevan a la profundidad de una jungla, a un pueblo costero o una peligrosa fábrica abandonada con propuestas visuales interesantes aunque con errores fatales como una infinidad de enemigos genéricos que sólo cambian color.
Además del rediseño de los personajes principales que no fue del agrado de muchos fans de la serie, sus personajes secundarios parecerían haber salido de una película de Disney, algunos mejores que otros pero en general mediocres –tanto por sus personalidades y algunos chistes simplones en sus diálogos.
Podeos resumir que gráficamente el juego es regular, y desgraciadamente hay recurrentes errores técnicos que echan a perder la experiecia de visitar algunos escenarios que con un poco más de trabajo pudieron lucir bien.
Este spin-off de la serie nos lleva a un universo en el que además del clásico Eggman está Lyric como antagonista principal. Este nuevo enemigo es una serpiente gigante con elementos robóticos que pretende acabar con toda la vida orgánica del planeta y sustituirlo todo por robots y elementos sintéticos. Ante dicho problema llegan Sonic, Knuckles, Tails y Amy para salvar el día usando sus propias habilidades en una aventura cooperativa; en lugar de buscar las Chaos Emeralds como en muchos títulos de la franquicia, en esta ocasión estarán a la cacería de ancestrales cristales de una civilización antigua conocida como los Ancianos; mismos que les irán dando acceso a más zonas que gradualmente irán rescatando.
Con un guión mal logrado, los protagonistas tienen nuevas personalidades. Por ejemplo Knuckles no sólo tuvo un gran rediseño que molestó a muchos sino que en su personalidad siempre lo dejan como un tonto mientras que Sonic es un personaje soberbio y hasta desagradable. No sabemos cómo esté la serie animada, pero si se retomaron estos cambios a personajes carismáticos que desde hace muchos años conocemos, quizá los fans viejos de la serie no nos sintamos muy a gusto con ello.
De las cosas más molestas del título es que sus personajes no dejan de hablar una y otra vez con líneas tontas y repetitivas que nada aportan al juego.
No les puedo negar que todo fue una experiencia negativa en su campaña de aproximadamente 10 horas, algunos lugares lograron mantener mi atención aunque definitivamente estamos ante una de las historias menos relevantes de la serie.
Sonic Boom es una aventura cooperativa que implica el uso de los cuatro personajes principales del juego: Sonic, Tails, Amy y Knuckles. Si tienes un amigo con quién jugar, alguien puede usar un control con la pantalla de la TV y el otro jugar en la pantalla del gamepad para seguir sus propios caminos mientras trabajan en equipo; si lo juegas en solitario podrás cambiar de personaje en el momento que lo requieras para aprovechar sus habilidades específicas y así resolver los puzzles en sus diferentes escenarios.
Hablando de cualidades de cada personaje, podemos mencionar que Sonic tiene además de su agilidad y velocidad –sin correr desafortunadamente–, su clásico movimiento SpinDash que se combina en combos con puñetazos y patadas con los que acabarás a los rivales. Tails por su parte ataca por medio de una pistola o arrojando robots miniatura que le ayudan y tiene la cualidad de poder flotar y hasta volar en conductos de aire dispersos en el juego. Amy posee la habilidad del triple salto, y con animaciones muy similares a las de Lara Croft trepará como gimnasta y saltará entre delgadas barras o estructuras además de golpear a los enemigos con su martillo. Finalmente Knuckles es el fortachón del grupo con ataques muy fuertes y pesados que le reducen velocidad también; tiene además la capacidad de desplazarse bajo tierra en algunas secciones y escalar muros específicos para resolver los puzzles.
Además de lo específico de cada personaje todos ellos poseen un látigo de energía que les es útil en combate para arrojar a los rivales o en el desplazamiento para deslizarse por rieles a manera de tirolesa.
El juego parte de dos ciudades principales que sirven como Hub para las diferentes misiones principales y secundarias. Ya dentro de un nivel en específico tenemos espacios tridimensionales en los que explorarás el juego a un ritmo lento, mismos en los que encontrarás secciones plagadas de enemigos o arenas en las que combatirás con una serie de enemigos con distintos niveles de dificultad; en ocasiones problemas con la cámara convierten esas partes de acción en una completa pesadilla.
Dentro de los distintos niveles también hay secciones tridimensionales parecidas a pistas en las que te desplazarás a toda velocidad casi de forma automática, en dichas partes únicamente tendrás que reaccionar rápido con el salto o el desplazamiento para evitar una serie de obstáculos. Como hemos mencionado anteriormente, sería en estas partes del juego donde tenemos más problemas técnicos y glitches además de un pésimo gameplay.
También dentro de los niveles y quizá de lo que mejor funciona en el juego, tenemos secciones de juego de plataformas con puzzles en las que la cámara se bloquea a una perspectiva en dos dimensiones con un gameplay mucho mejor logrado pero que no por ello deja de sentirse mediocre.
Conforme avanzas en el juego irás desbloqueando nuevas habilidades o mejoras para los personajes, por lo que tendrás que conseguir piezas de chatarra que canjearás en una máquina por dichos power-ups que comprarás en una tienda. Los populares Rings fueron casi completamente ignorados y aunque los escenarios están llenos de ellos, sólo serán un relleno que funciona a manera de salud de tu personaje que al morir revivirá en el mismo sitio a cambio de una cuota de materiales para mejoras.
Hay bastantes cosas por hacer en Sonic Boom, además de seguir la historia principal que dura unas 10 horas, hay misiones secundarias que adquirirás al hablar con los personajes secundarios dentro de las ciudades Hub.
En cada uno de los niveles tenemos también objetos coleccionables y zonas ocultas, por lo que tendrás que ser muy cuidadoso a la hora de explorar si quieres conseguirlo todo y, por consiguiente, mejorar a tus personajes al máximo.
La pregunta sería ¿vale la pena regresar a verlo todo? En general no, pues el ritmo del juego y su mal logrado gameplay no lo hacen lo suficiente atractivo o divertido para regresar.
También tenemos fuera de la campaña una serie de desafíos adicionales para jugar en modo cooperativo local con por lo menos un amigo, mismos que funcionan de manera medianamente adecuada.
Mi sentimiento general con Sonic Boom fue de tristeza ante un producto que falla en general y cuyas propuestas no desembocan en ninguna parte pasando así a la lista larga de fracasos en la historia del erizo azul de Sega. Se prometía mucho con este proyecto y el curriculum de algunos de sus desarrolladores nos dejaba pensar que pudo haberse materializado de mejor manera y recordarnos clásicos de las plataformas en tres dimensiones.
Al jugar Sonic Boom me sentí probando una versión Alpha o Beta del juego, se siente incompleto y que muchos detalles pudieron haberse pulido.
Su soundtrack quizá fue de lo poco que en general me dejó buenas impresiones en algunos de sus escenarios en los que observé que un gran descuido del proyecto desembocó en el juego mediocre que llegó a nuestras manos.
Hay varias partes del juego en las que llega a funcionar de mejor manera, y podemos también calificar como uno de sus mejores elementos el juego cooperativo entre dos personas frente a la consola que pudiera llegar a sentirse divertido.
-Juego cooperativo local
-Soundtrack adecuado a algunos de sus escenarios
-Las secciones de juego en dos dimensiones, aunque definitivamente no se sienten como un juego de Sonic sino como algo completamente diferente
-Abundantes problemas técnicos
-Combate monótono, repetitivo y con problemas de cámara
-El ritmo del juego llega a sentirse aburrido y repetitivo
-Personalidad de los personajes y diálogos tanto repetitivos como molestos
-Pese a sus extras, no motiva a regresar al juego
-El diseño de las zonas en las que el juego es veloz es caótico y muchas veces incontrolable
-Controles imprecisos en muchas ocasiones
Es una lástima lo que le sucedió a este proyecto a pesar de que, de entrada, muchos desconfiaran en el mismo desde su presentación con el rediseño de sus personajes. Tengo sentimientos encontrados porque confieso que en algunas ocasiones la llegué a pasar bien –a secas– con Sonic Boom: Rise of Lyric, pero en general mi juego se resumió a las decepciones.
Con todo y mi gusto por algunas secciones o partes del juego, me costaría trabajo recomendarlo, y aunque podría ser del interés de los que sigan la nueva serie de televisión sí es un juego que puede considerarse como una mala inversión.
Otro que se une a la lista de juegos mal acabados que llegan al mercado puesto que con más tiempo de trabajo quizá pudieran haberse mejorado algunos elementos que desembocaran en una experiencia más disfrutable. Sí, es una de las decepciones más grandes del año.