Después de que todo el Universo Cinemático de Marvel sufrió un gran impacto al final de Avengers: Infinity War y que nos dejara a todos con muchas incógnitas, la siguiente película toma un rumbo completamente diferente para alivianar las emociones. Ant-Man and the Wasp es una película de comedia con tintes de acción que repite la fórmula que nos sorprendió en la primera, aunque también incluye algunos interesantes elementos en su historia que tendrán influencia sobre el resto del MCU.
Tenemos que reconocer que el personaje de Ant-Man no era de los más populares de Marvel Comics antes de su película. La historieta tuvo su época dorada hace 40 años, pero poco a poco se fue olvidando entre todos los otros héroes que conforman a la compañía. Fue por ello, que cuando se estrenó su primer película en el 2015 sorprendió a propios y extraños. Resultó ser en un éxito rotundo y fue un aire fresco en el MCU debido a que dejaban la acción en segundo plano para presentarnos una comedia inteligente y muy divertida. Llegó en el momento indicado, justo cuando el resto de los héroes tenían aventuras mucho más serias y poco originales.
La cinta anterior de Ant-Man, aparte de ser comedia, también se basó en el género llamado heist. Es decir, que trató sobre un robo en el que participan varios personajes. Otros ejemplos del género son cintas como Ocean’s Eleven, The Italian Job, Snatch y hasta la más reciente de Han Solo. En ésta secuela han evitado repetir la misma fórmula para brindarnos una historia sobre un rescate con toques de escape.
En una de las escenas post-créditos de la primer Ant-Man, se nos dió a entender que el personaje de Hope se sumaría a la acción cuando su padre le dio el traje de Wasp. Después vimos a Scott unirse al equipo del Capitán América en Civil War. Después de ello no vimos nada de él. De hecho, a muchos nos sorprendió que no estuviera presente en Infinity War junto al resto de los héroes. Pues ese misterio es resuelto y ahora se nos presentarán nuevas interrogantes.
Ant-Man and the Wasp se lleva a cabo antes que Infinity War, no se dice exactamente cuánto tiempo antes, pero podemos asumir que son semanas o días previos. Scott Lang sufre arresto domiciliario después de ser arrestado en Civil War en Alemania, a donde acudió sin avisarle a Hope ni a Hank de ello. Debido a esa situación, los científicos que le dieron el traje han evitado comunicarse con él. Por otra parte, ellos están buscando la forma de encontrar a Janet, la Wasp original, quien ha estado perdida en otra dimensión por varias décadas al volverse sub-atómica para evitar que un misil nuclear matara a miles de personas. Su mejor pista radica en el propio Scott, quien en la primer película pudo volver de dicha dimensión cuántica y al parecer tiene un vínculo especial con Janet.
Pero hay alguien más quien desea su tecnología con fines personales. Se trata de un nuevo villano que se suma al MCU y es conocido como Ghost. Es un ser capaz de volverse invisible y traspasar objetos a placer. Por si fuera poco, también la mafia de la ciudad tratará de robarles la tecnología para venderla al mejor postor, mientras que el FBI vigila de cerca a Scott. Así que los héroes estarán atrapados en medio de todas esas facciones mientras intentan solucionar su problema.
La película evita explicar los poderes del héroe ya que se da por entendido que todos han visto la primera parte. A diferencia de otras secuelas de super héroes donde tienen nueva tecnología o poderes, aquí se mantienen las mismas habilidades que ya vimos. La novedad es la participación de Wasp a quien no habíamos visto en acción. Ellos deben combinar sus poderes para salir adelante, lo que se presta para situaciones emocionantes y hasta cómicas.
La comedia mantiene el estilo que vimos en la película anterior. No se basa en gags o en chistes estilo sitcom como las vimos en Thor: Ragnarok, sino que casi todas ellas se basan en los diálogos entre personajes. Scott sigue haciendo bromas en cada situación y Luis (Michael Peña) continúa siendo igual de carismático y gracioso cada vez que está en pantalla.
De hecho, es Wasp quien se siente como la verdadera heroína de la cinta, mientras que Ant-Man cae en el papel de patiño cómico. Mucho se ha criticado al MCU de no tener un personaje femenino fuerte como principal en sus películas, y ésta podría ser la primera de ellas. Aunque recordemos que la próxima película es justamente la de Captain Marvel que será la primer heroína de Marvel en tener su propia película.
Otro de los grandes aportes de la cinta al MCU es la llegada de actores de renombre que se suman a una lista que cada día aumenta más en cuanto a número y calidad. Ya conocíamos a Michael Douglas como Hank Pym. Ahora tenemos a Michelle Pfeiffer como Janet van Dyne y a Lawrence Fishburne como Bill Foster, quien por cierto tiene un pasado que nos lleva a otro personaje clásico de Marvel olvidado en las películas. Una actriz nueva y quien probablemente tenga un papel muy importante en el futuro de MCU es Hannah John-Kamen como Ghost. Como dato curioso, ella ha tenido papeles de bajo perfil en series como Game of Thrones, Black Mirror y hasta en videojuegos como Dark Souls y Dark Souls II.
La verdad, acudí con bajas expectativas a ver Ant-Man and the Wasp ya que creí que no igualaría a la original, sin embargo salí sorprendido con su ritmo dinámico, guión inteligente y actuaciones memorables. No es una película perfecta y hay chistes o situaciones en las que se juega con el tamaño de los objetos que resultaron mucho mejor en la primer película, pero sí se le hace justicia al personaje. Tampoco será una de las películas recordadas por sus efectos especiales, los cuales ya no lucen tan impresionantes.
En el MCU se han dado cuenta de que la comedia ha rendido frutos con personajes no tan populares y al parecer mantendrán esa mentalidad en el futuro (o lo que sea que depare al futuro de la franquicia).
Hay dos escenas post-créditos, de las cuales resalto sobretodo la primera de ellas.
Los fans de Marvel ahora tendrán que esperar hasta marzo del 2019 cuando se estrene Captain Marvel y poco después la secuela de Infinity War.