Hace poco más de un día se anunciaron a los candidatos de The Game Awards, mismos que han sido predecibles con grandes juegos como Astro Bot, Metaphor: ReFantazio y hasta Balatro, así como algunos que fueron objeto de polémica, el más notorio es Elden Ring: Shadow of The Erdtree. Por otro lado, pasó algo que ya se hizo costumbre para este momento, eso es no tener a un contendiente por parte de Xbox para la categoría principal, con años de ausencia bastante notorios.
A pesar de los avances en su estrategia y adquisiciones, Xbox Game Studios sigue enfrentando dificultades para competir en la categoría principal. Desde la creación de estos premios en 2014, Microsoft solo ha obtenido una nominación al GOTY: Psychonauts 2, desarrollado por Double Fine, que compitió en el 2021.
Este panorama refleja el arduo camino que la empresa ha recorrido en la última década. Tras el fracaso comercial de la Xbox One, se adoptó un enfoque más agresivo, adquiriendo numerosos estudios y lanzando iniciativas como Game Pass para fortalecer su catálogo first-party. Sin embargo, esta estrategia aún no ha producido una presencia constante en las categorías principales de los premios.
El contraste con otras plataformas y editoras como PlayStation o Nintendo es evidente, ya que ambas han conseguido nominaciones recurrentes gracias a títulos exclusivos que definen generaciones. Mientras tanto, se sigue buscando consolidar un sello distintivo que combine calidad y impacto cultural en sus juegos.
Con grandes lanzamientos en camino como Fable y The Elder Scrolls VI, Microsoft tiene la oportunidad de revertir esta tendencia. La clave será lograr que estas producciones no solo sean técnicamente impresionantes, sino que también resuenen emocionalmente con los jugadores y críticos. De igual manera, Indiana Jones and The Great Circle no podrá entrar por su fecha de publicación en diciembre.
Vía: LU