Así está la cosa: Zynga ya no es más una compañía que genere ganancias exorbitantes. Según el modelo económico en el que vivimos, cuando una empresa deja de crecer, está en graves problemas. Por lo anterior, los directivos han tomado decisiones difíciles: despedir gente y cerrar juegos. Esta última medida afectará este próximo 5 de diciembre a dos de los títulos con menor afluencia de gente.
Aunque no lo crean, un servidor alguna vez diseñó juegos sociales. No es tan divertido como suena: debí enfrentarme a hojas de excel, a estudios de flujo de usuario, a problemas en la interfaz y a mil y un problemas más. FishVille fue un título que muchos intentamos emular sin éxito. Aunque suena muy idiota la premisa, es complicado desarrollar un juego en el que los usuarios sólo alimenten y críen peces con los que pueden interactuar de forma limitada.
Pues bien —como muchos dicen por ahí—, nada se perderá cuando FishVille y Treasure Isle cierren sus puertas para forzar a los usuarios a migrar a otros títulos de la compañía. Al parecer, habrá un proceso de recompensa por irse a jugar otro título; sin embargo, no creo que dicho premio sea suficiente para justificar el gasto de hasta miles de dólares que mucha gente ha realizado en estos dos títulos que simplemente dejarán de existir. Hablando de tirar el dinero a la basura…
Fuente: Kotaku.
