No se suponía que los humanos conquistáramos los cielos. Mucho menos que saliéramos de nuestro planeta. A inicios del siglo pasado, dos hermanos estadounidenses decidieron romper con paradigmas propios de la naturaleza para que la humanidad pudiera cumplir su sueño de volar. A partir de ese momento no fuimos los mismos y, a pesar de que actualmente podemos dar por hecho el tomar un vuelo a cualquier destino del planeta, la realidad es que hay un fuerte trasfondo de muchos tipos incluido el filosófico sobre lo que representa haber despegado los pies de la tierra. Hace unos días en el X019 celebrado en Londres, pude probar la nueva versión de Microsoft Flight Simulator, la cual, solo reafirmó la fuerte pasión que siento por la aviación.
Como franquicia, Microsoft Flight Simulator vivió momentos verdaderamente complicados a inicios de la década pasada, pues más de una fuente la acusaban de haber sido una herramienta de entrenamiento para quienes atacaron Estados Unidos con aviones comerciales en aquel fatídico 11 de septiembre de 2001. A pesar de lo anterior, la saga de simuladores siguió adelante, solo que ahora, ya no se incluían cursos básicos de aviación como pasaba con las entregas lanzadas antes de la histórica fecha. En 2006, con el lanzamiento de Microsoft Flight Simulator X, se hablaba de convertir la saga en más bien una plataforma que se fuera actualizando, sin embargo, en poco tiempo se le comenzaron a notar los años. Por tal motivo y de manera sorpresiva, en E3 de este año se anunció la versión de nueva generación, misma que en efecto, está tan increíble como se ve.
Pocos minutos después de haber entrado al lugar en donde se celebró el X019, mis ojos dieron un giro al ver un letrero enorme que decía “Microsoft Flight Simulator” para después, darme cuenta de que los demos se estaban haciendo con estaciones que contaban con un timón, palancas de aceleración y flaps, así como pedales para controlar el timón de dirección de la nave. Un verdadero sueño para todos los que amamos la aviación. Por supuesto, en cuanto fue momento de poder probar todo lo que había en el evento, me abalancé sobre una de estas estaciones.
Lo primero que me gustaría decir de este nuevo Microsoft Flight Simulator es que cuenta con ciertos retos muy interesantes en los que recibes una calificación dependiendo de tu rendimiento, es decir, no solo es volar por volar. El primero que probé era abordo de un Cessna de última generación en el que debía de despegar de un aeropuerto a las afueras de Seattle para dar un giro y posteriormente hacer una aproximación. Qué momento tan especial cuando empujé la palanca del acelerador y después tiré del timón de profundidad para comenzar a elevarme. Casi fue tan mágico como mi primer recuerdo abordo de un avión real. Sobra decir que gráficamente el juego lucen sensacionalmente bien, con un gran detalle a nivel de piso, incluso puedes ver algo de tráfico en la calles. El único problema que noté es que aún le faltaba algo de optimización en temas de framerate, el cual, sí llegaba a caer por momentos.
El poder cambiar de vista girando uno de los sticks del mando que tenía en las manos, me daba acceso a cualquier punto de la cabina, la cual, por supuesto, está cuidada hasta el último detalle. Después de que se me mostrara que puedes cambiar el tiempo del día así como las condiciones climáticas de manera instantánea con el toque de un solo botón, comencé a dar un giro para hacer mi aproximación hacia la pista. Tras recibir indicaciones sobre cuál era la velocidad recomendada de aterrizaje y pasar por algo de turbulencia con vientos cruzados que amenazaban mi maniobra, baje los flaps de mi aeronave e hice un suave toque con la pista. “¡Wow!” Pensé.
La verdad es que si por mi fuera, en este momento me retiraba e invertía en un rig para solo dedicarme a “jugar” Microsoft Flight Simulator. Pongo la palabra jugar entre comillas porque a diferencia de lo que pasa con otros videojuegos, aquí estamos frente a un simulador en toda la extensión de la palabra que en efecto, muchos pilotos reales sí usan para entrenar maniobras y procedimientos. Claro que la inversión en estos controles tan específicos es muy fuerte, pero no se compara con lo que es pagar una escuela de aviación.
El nuevo Microsoft Flight Simulator se estará lanzando en algún punto del próximo año en PC. Ojo, existe la confusión de que este título llegará a Xbox One, pero no es así, al menos por el momento, solo se tiene planeada la versión de PC. Quienes le hayan puesto las manos encima a cualquier juego de la serie, sabrán perfecto lo complicado que sería llevarlo a una consola casera.
