Al ser un medio creativo con una historia relativamente corta, los desarrolladores de videojuegos siguen descubriendo muchísimas maneras de expandir sus horizontes y así, seguirnos presentando experiencias que se sientan frescas y completamente nuevas. Uno de lo grandes obstáculos para que esta innovación pueda seguir su curso es que al final, estamos hablando de una industria que depende enteramente de lo comercial, sobre todo cuando día con día, las producciones elevan sus costos hasta niveles que se empiezan a volver insostenibles. Sin lugar a dudas, Rockstar Games ha sido una de las marcas que ha encontrado el justo balance entre lo financiero y lo artístico, entregando productos que además de ser económicamente viables, normalmente levantan estándares de calidad y redefinen los paradigmas del desarrollo moderno, todo esto claro, al margen de la más reciente polémica que se ha suscitado alrededor de la empresa por supuesta sobreexplotación de sus empleados.
Red Dead se ha convertido en una de las franquicias más importantes y reconocidas del medio, la cual, a diferencia de lo que algunos podrían pensar, tiene un curioso origen fuera de Rockstar Games que justamente dio paso a un título que muchos pasaron por alto en su momento y que incluso hasta ahora, siguen sin estar muy conscientes del llamado Red Dead Revolver. Ahora que Red Dead Redemption 2 finalmente está entre nosotros, nos pareció interesante contarte cómo fue el origen y desarrollo de esta maravillosa serie.
Todas las grandes historias tienen un origen y como tal, la de Red Dead resulta ser más obra de la casualidad y de la suerte de lo que algunos se podrían imaginar, pues básicamente, Red Dead Revolver fue un juego que estuvo en fuerte peligro de no volverse realidad pero que por cierto suceso que llamó la atención del propio Dan Houser, se terminó convirtiendo en la raíz de uno de los nombres por los cuales, actualmente Rockstar Games es reconocido a nivel global.
Después de que a finales del siglo pasado, es decir, en 1998, Rockstar Games fuera establecida de manera oficial como subsidiaria de Take-Two Interactive, la marca se comenzó a expandir de una manera muy marcada, sumando una considerable cantidad de personas a sus filas e incluso, absorbiendo a otros estudios que le pudieran ser de utilidad en la creación y desarrollo de proyectos de gran envergadura.
Así, en noviembre de 2002, Take-Two Interactive anunció la compra de Angel Studios, compañía desarrolladora de videojuegos basada en San Diego, California que se convertiría en parte de la alineación de Rockstar. Poco tiempo después del anuncio de la adquisición, Angel Studios cambió su nombre a Rockstar San Diego.
Uno de los proyectos en los que Angel Studios estaba trabajando desde el año 2000 antes de convertirse en Rockstar San Diego, llevaba por nombre Red Dead Revolver, el cual, estaba siendo financiado por el mismísimo Capcom. Al revisar los proyectos de su más reciente adquisición, Dan Houser, co-fundador y director creativo de Rockstar Games, fue atraído por este shooter en tercera persona basado en el salvaje oeste, que para ese entonces, estaba en una etapa sumamente preliminar, ni siquiera contando con alguna versión jugáble. Sin embargo, Houser insistió y para diciembre de 2002, Rockstar Games le compra lo derechos de Red Dead Revolver a Capcom para retomar el proyecto y terminar haciéndolo toda una realidad.
Red Dead Revolver se lanzó el 4 de mayo de 2004 en PlayStation 2 y Xbox, recibiendo críticas mayormente favorables pero no tan llamativas, promediando un 73 de calificación en Metacritic. Además, en 2010 apareció dentro del libro titulado “1001 Video Games You Must Play Before You Die” o “1001 juegos que debes jugar antes de morir”.
De lado de las ventas también tenemos que Red Dead Revolver tuvo un desempeño discreto, logrando colocar en manos de usuarios poco más de dos millones de copias si combinamos sus dos versiones existentes. Vale la pena mencionar que para octubre de 2018, el juego no ha sido reeditado ni relanzando de ninguna manera.
A pesar de su excelente propuesta, sólidas mecánicas de juego e historia que parecía tener muchas más piernas de las que le vimos en el producto final, Red Dead Revolver se quedó bastante lejos en todo los sentidos en comparación a lo que sus hermanos mayores Grand Theft Auto III y Grand Theft Auto: Vice City habían conseguido algunos años antes. Lo anterior, no detuvo a los hermanos Houser de seguir impulsando la idea de crear el mejor videojuego ambientando en el salvaje oeste que jamás hayamos visto.
En 2005, Rockstar Games ordenó que un equipo compuesto por 800 personas apostadas en Rockstar San Diego, así como otras decenas dispersas en el resto de sus estudios alrededor del mundo, arrancaran con el desarrollo de Red Dead Redemption, título que además de estrenar la nueva versión del Rockstar Advanced Game Engine (RAGE), y tomar muchos de los conceptos de los GTA modernos, se convertiría en el proyecto más ambicioso no solo de la firma, sino de toda la industria en aquel momento, teniendo un presupuesto que superaba los $200 millones de dólares.
Finalmente, Rockstar le dio al clavo. Red Dead Redemption se lanzó el 18 de mayo de 2010 en PS3 y Xbox 360 en medio de un recibimiento inigualable por parte de la crítica, teniendo calificaciones verdaderamente altas que lo mantienen con un 95 de promedio de calificación en Metacritic, mientras que en la parte comercial, tuvo un buen desempeño superando las 13 millones de copias vendidas, incluida su espectacular expansión, Undead Nightmare. Quedó claro que en las manos adecuadas, los juegos ambientados en el salvaje oeste pueden colocarse en el gusto de las masas.
Tan solo un año más tarde y a pesar de que la gran mayoría de los esfuerzos de todos los estudios de Rockstar ahora se encontraban concentrados en hacer realidad Grand Theft Auto V y GTA Online, un pequeño equipo comenzó con la creación de conceptos y bases para lo que sería Red Dead Redemption 2.
Luego de muchísimos rumores al respecto, Rockstar salió a anunciar de manera oficial que en efecto, su siguiente gran juego sería Red Dead Redemption 2, liberando algunos materiales que nos dejaban entrever el tipo de producto que se nos entregaría. Originalmente, se tenía planeado que el juego se lanzara en la segunda mitad de 2017, pero posteriormente se retrasó al primer cuarto de 2018. Debido a complicaciones con el desarrollo y control de calidad, el título sufrió de un segundo retraso que lo lanzó hasta el 26 de octubre de 2018, día en el que finalmente vio la luz. Meses antes, también se confirmó que se tendría un robusto componente online bajo el nombre de Red Dead Online, el cual, tendrá un periodo de prueba a finales de noviembre de este mismo año.
De nueva cuenta, la compañía decidió solo enfocarse consolas caseras, dejando fuera a los usuarios de PC. Hasta el momento, se desconocen las razones por las que se tomó dicha determinación.
Otro punto muy importante a considerar es que días antes de la salida del juego, Dan Houser, co-fundador y escritor líder de Red Dead Redemption 2, declaró en una entrevista que para hacer posible el juego, se tuvieron que trabajar semanas de 100 horas, lo cual, inició con una fuerte polémica por sobreexplotación al interior del estudio. Los directivos intentaron calmar las aguas con diferentes declaraciones, pero Kotaku se encargó de hacer una investigación que confirmó algunas prácticas bastante cuestionables.
Como sea, este jueves 25 de octubre se levantó el embargo de reseñas por parte la crítica especializada y justo como se anticipaba, Red Dead Redemption 2 es toda una obra maestra, recibiendo calificaciones perfectas de los medios más importantes del mundo incluido Atomix. Por el momento, el título presume un 97 de calificación promedio en Metacritic, siendo el juego tanto de PS4, como de Xbox One, mejor valuado de la historia.
Lo más seguro es que dicho evento se proyecte en lo comercial y el juego termine siendo todo un éxito en ventas aunque claro, no tiene nada fácil alcanzar las más de 90 millones de copias vendidas por Grand Theft Auto V, cifra que lo convierten en el videojuego más redituable de todos los tiempos.