Los videojuegos tienen ya mucho tiempo que dejaron de ser ese pasatiempo sin mayor importancia para convertirse en una forma de vida que nos afecta directamente como personas. Sin lugar a dudas, los entusiastas de este aún joven medio de entretenimiento, no pierden oportunidad para demostrar su pasión junto con quienes comparten sus gustos e intereses. Por dicha razón, es que asistir a una convención, reunión, fiesta o como quieras llamarle a estos eventos para celebrar a cualquier sector de la industria, es sin lugar a dudas, un evento en el que se siente un ambiente sumamente particular. Las propiedades intelectuales de id Software son de las que más sentimientos de este tipo levantan, y ahora en combinación con las que otros estudios de Bethesda han creado, tienes como resultado una espectacular alineación en todos los sentidos. Debido a esto, estaba seguro que estar en medio de una QuakeCon sería algo digno del recuerdo.
Por supuesto que como miembro de la prensa y medios, este tipo de eventos toman otro sabor y en general aura, pero respirar toda la pasión y amor de quien está dispuesto a pagar un boleto e incluso hacer un largo viaje con tal de estar cerca de sus ídolos y hermanos en armas, es algo completamente imposible de evitar al punto de que te terminas contagiando de toda esa energía y adrenalina que se vive. Esta reunión de fans de Bethesda que tiene como piedra angular la enorme tradición de Quake, presume una personalidad sumamente marcada que se mantiene intacta con el paso de los años. Claro que estamos hablando de un evento mucho más modesto en términos de producción si se le contrasta con algo como BlizzCon, por ejemplo, pero en realidad, el ambiente es igual de intenso que en cualquier otra convención o fiesta similar. A continuación te cuento cómo es que se vivió la QuakeCon 2017 celebrada en el Gaylord Texan Resort de Dallas, Texas.
Me parece que lo más adecuado antes de pasar a contarte cómo estuvo todo en la edición de este año, es importante poner algo de contexto sobre lo que significa este evento para toda la industria, en el cual y si la información que me dieron no falla, es la primera QuakeCon en la que oficialmente están presentes medios de Latinoamérica, por lo que evidentemente, Atomix tenía que estar en medio de toda la acción que se vivió en estos apasionantes días.
En este 2017 se están cumpliendo 21 años desde que en un pequeño hotel de Garland, Texas que se encontraba a un par de kilómetros de las oficinas de id Software, un grupo de 30 fans de Quake se reunieron para celebrar la primer QuakeCon, en la cual, el mismísimo John Carmack y otros rockstar del medio se hicieron presentes para convivir con sus fanáticos. Las retas de DOOM y la primera versión de Quake estuvieron tan buenas, que en poco tiempo el evento se convirtió en leyenda entres todos los seguidores de estos juegos y desde aquel 1996, año con año se ha celebrado la convención con un aumento sustancial de asistentas y de relevancia no sólo para la marca, sino para toda la industria de los videojuegos.
Para la edición de este año, QuakeCon reunió alrededor de 10 mil personas completamente hambrientas de gritarle al mundo el amor que sienten por todas las franquicias que actualmente viven bajo la capa de Bethesda, asunto que por supuesto no sorprende de ninguna manera si uno considera el sensacional trabajo que dicho publisher ha hecho en los últimos años, apoyando a los estudios correctos para hacer que sus IPs se conviertan en sinónimo de calidad. Lo evidente es que el evento siga creciendo y que año con año se vuelva aún más importante a pesar de todos los obstáculos que las súper producciones están viviendo.
A pesar de ser muy fan de todo lo que está haciendo Bethesda, la verdad es que no sabía bien qué esperar de una QuakeCon, pues estamos hablando de una convención que no es abierta con una espectacular conferencia en la que se hacen anuncios de relevancia para la prensa, con todo y que en el último par de años, poco a poco a ido mutando en una gran oportunidad para que el publisher tenga a los medios para sí mismo hablando exclusivamente de sus juegos próximos a salir. Como sea, te puedo decir que el evento se trata de una reunión muy horizontal entre consumidores y desarrolladores en la que todos conviven sin que haya etiquetas de ningún tipo, esto a diferencia de otras reuniones en las que normalmente, las compañías le hablan a sus seguidores desde otro nivel, lo cual no tiene nada malo, simplemente es una forma diferente de hacer las cosas.
Por su mismo nombre, lo más normal es pensar que QuakeCon es una “convención” en la que los fans más apasionados de lo que hace Bethesda y compañía se juntan para celebrar a este maravilloso pasatiempo llamado videojuegos; sin embargo, creo que el término antes mencionado no es el más adecuado para definir de lo que se trata este evento. Más bien diría que estamos frente a una LAN Party que ha venido mutando con los años hasta convertirse en lo que es actualmente, pero te repito que definitivamente estamos frente a una fiesta de gamers en la que el resto de las actividades pasan a segundo y hasta tercer lugar.
Claro que los booths, paneles, oportunidades para probar juegos que no han salido y otros elementos están presentes, no obstante, la verdadera alma del evento recae totalmente en la zona en la que miles de personas llevan sus propios equipos para jugar lado a lado títulos de moda y grandes clásicos que jamás perderán relevancia. Te puedo decir que al menos en mi experiencia y lo que me tocó ver, la gran mayoría de los jugadores ya ni siquiera estaban consumiendo Quake Champions, por ejemplo. Apreciar pantallas con Overwatch, Rocket League y hasta Smash Bros. Melee, era lo que básicamente predominaba en el área, asunto que por un lado sorprende por el hecho de que nos encontrábamos en una QuakeCon y que por el otro, se ratifica de nueva cuenta que estamos en un medio sumamente diverso en el que cada vez es más complicado que a “todos” nos guste exactamente lo mismo.
Te puedo decir que si como fan, tienes planeado algún día asistir a una QuakeCon, mejor vayas con la mentalidad de que estarás en un evento en el que la convivencia con otros videojugadores lo es casi todo, y en donde cosas como los famosos goodies o souvenirs, no son algo tan común como pasó este mismo año en E3 o como siempre pasa en BlizzCon. Respecto a esto, te comento que la tienda oficial del evento me pareció una completa decepción, pues a pesar de que como te digo, el alma de la reunión está puesta en otro lado, no entiendo cómo es que Bethesda no aprovecha para consentir a sus fans y de paso hacer unos dólares extra, dándoles la oportunidad de adquirir coleccionables exclusivos en un sólo lugar sin la necesidad de esperar nada. Playeras y otro par de artículos sin tanta importancia, era lo que podías adquirir en el showfloor, mismos que en poco tiempo se vieron agotados por la misma hambre que los fans tenían por hacerse de algo de mercancía de sus series favoritas.
Estoy completamente de acuerdo en que los esports están viviendo su verdadera primavera si consideramos que por fin, se están convirtiendo en un medio de entretenimiento masivo que incluso podría ser considerado como una rama totalmente aparte del gaming tradicional; sin embargo, me parece equivocado decir que estamos frente a un concepto totalmente nuevo, pues los torneos en los que se reparte dinero como premio a los ganadores, llevan ya un muy rato existiendo.
Quake es sin lugar a dudas una de las franquicias más añejas si hablamos de una experiencia competitiva, misma que en este 2017 está buscando renovarse para poder medirse contra sus contemporáneos, muchos de ellos totalmente consolidados en la escena de los esports. Al ser una LAN Party masiva, QuakeCon resultaba el escenario perfecto para que se llevaran a cabo las finales del primer campeonato mundial de Quake Champions, esto después de meses de intensas eliminatorias en todas las regiones del planeta. Justo como todos lo esperaban, este evento fue estelar durante la convención y en casi todo momento se respiró una enorme emoción por ver quiénes imponían condiciones tanto el modo de 1v1, como en el de por equipos.
En la modalidad por equipos Sacrifice 4v4, el equipo compuesto por integrantes de distintas partes del viejo continente, 2Z, levantó el trofeo de campeón del mundo luego de un intenso duelo que terminó con marcador de 3-1 con NoToFast, combinado también representante de Europa. Del lado del 1v1 en Duel, evento estelar del día, Clawz (también campeón con 2Z en 4v4) de Bielorrusia y sólo 19 años de edad, arrasó con el holandés VoO para quedarse con el título mundial y $100 mil dólares de premio. En la misma categoría, el ruso Cooller se hizo del tercer puesto.
De esta manera concluyó el primer campeonato mundial de Quake Champions. Recuerda seguir toda la cobertura especial que estamos haciendo de QuakeCon 2017 desde el lugar de los hechos.
Justo como te lo he venido repitiendo a lo largo de este contenido especial, las intenciones que se tienen con la organización de QuakeCon, son bastante distintas a los objetivos que se plantean en otros eventos que parecen similares, no obstante, me resulta inevitable pensar que con la creciente base de fanáticos que Bethesda ha venido cultivando en los últimos años, el tener una convención de este tipo resulta una oportunidad inmejorable para que la industria entera ponga sus ojos sobre sus marcas al menos por un par de días. Te puedo decir que la pasé genial en esta experiencia, sobre todo como medio, pues se nos permitió tener acceso de manera anticipada a juegos que aún no llegan al mercado para poder contarte de qué van y así, puedas tomar una decisión mucho más acertada, esto claro, sin mencionar los especiales que estaremos publicando tras haber platicado cara a cara con las mentes detrás de estas obras.