Nos aproximamos al clímax y futuro desenlace de esta estupenda miniserie. En el episodio cuarto veremos desarrollarse el conflicto introducido por el capítulo anterior. Ya podemos ver hacia dónde se dirige todo y, de paso, cada vez nos adentramos un poco más en el presente de Cortana. Sobra decir que la cuarta parte es, por mucho, la más impresionante hasta el momento. Sigue leyendo.
A lo largo de la serie hemos visto cómo la humanidad entrena a sus soldados. El nivel de combate de los estudiantes del CAMS es, a lo mucho, apropiado para combatir otras personas. El problema radica en que el Covenant acaba de hacer una aparición devastadora y no hay nadie en el planeta que esté capacitado para enfrentarlos. Al comienzo del capítulo las defensas serán aniquiladas sin piedad por una poderosa tropa de elites, grunts y jackals.
Basta ver unos segundos de combate para adivinar que no somos rivales para un elite bien entrenado —mucho menos un zealot. La cuadrilla de Lasky deberá entonces enfrentar la peor debacle en la historia del CAMS. El objetivo de este episodio es contrastar la fuerza imparable del Covenant con la incapacidad humana de enfrentar un poderío militar tan grande. No quiero hablar sobre los posibles SPÓILERS, así que recomiendo vean primero el capítulo antes de seguir leyendo:
Sí. Sus ojos no los engañaron. El poderoso spartan conocido como John-117 hace una aparición triunfal. Rápidamente, su presencia se convierte no sólo en la única esperanza del grupo de Lasky, sino también en un recordatorio del poderío terrible de los spartans: tan alienado de la condición humana que produce temor en los demás miembros de la UNSC.
A fin de cuentas, el escuadrón Hastati sobrevivió un enemigo del que probablemente jamás habían escuchado hablar, pues, para su tiempo histórico, el Covenant era sólo un rumor experimentado por unas pocas tropas élite y algunos desafortunados sobrevivientes. Se nota mucho que 343 Industries está supervisando esta serie, pues en verdad el Master Chief que vimos ostenta muchos rasgos inalienables del personaje y transmite esa sensación de poder y devastación que experimentamos en primera persona en Halo. Quedan un capítulo más todavía y, no sé ustedes, pero como que la serie se puso turbo increíble de un momento para otro.
