Un nuevo estudio sugiere que no siempre es buena idea ver televisión o jugar videojuegos luego de un largo día de tareas. Así es, pese a la idea de que sirven para relajarse, incluso podrían generar más estrés y hasta sentimientos de culpa y decepción de sí mismos en algunas personas.
Leonard Reinecke, profesor adjunto de la Universidad de Mainz, Tilo Hartmann y Allison Eden, profesores en la Universidad de Amsterdam, comenzaron un estudio para saber a qué se debía que estas actividades recreativas o de entretenimiento afectaran a algunos. Si bien es cierto que para muchos estos medios son la manera más fácil de diversión, la verdad es que también pueden ser una distracción, aunque a muchos no les importe.
¡Sorpresa! Las personas con menos voluntad (o autocontrol) tienen una tendencia a utilizar los medios, incluso cuando ello interfiere con terminar otras tareas. El problema no es precisamente “perder el tiempo en redes sociales, videojuegos o películas”, sino el remordimiento por no estar haciendo algo más importante o terminando la larga lista de pendientes. ¿Alguna vez te sentiste mal por ver tu serie preferida en vez de estudiar para el examen?
Para analizar a los sujetos, se realizó una serie de preguntas en las que contestaban qué tan ciertas o falsas eran las frases respecto a su día anterior.
*Luego de jugar/ ver TV ayer, me sentí relajado, estresado, molesto conmigo.
*Debí haber hecho otra cosa como ____ .
*El tiempo que dediqué a ver TV/ jugar debió ser: mayor, menor, estuvo bien.
Luego de recopilar la información, se demostró que hay quienes creen que pasar su tiempo con este tipo de actividades se aleja del descanso y, en vez de eso, sienten culpa por estar procrastinando (dejando pasar las cosas una y otra y otra vez… ¿Han escuchado eso de dejar para mañana lo que pueden hacer hoy?)
En pocas palabras, así como hay quienes buscan comer algo dulce para sentirse mejor o satisfechos, de la misma manera hay quienes podrían sentirse mal por no estar haciendo algo más importante y terminan más cansados, molestos o sintiéndose mal consigo mismos. También se señaló que Facebook es una manera escapar de las labores aburridas o cansadas, pero que puede frustrar a varios por el tiempo invertido en ello.
Previamente, en otro realizado por Reinecke en 2009 se demostró que invertir parte del tiempo para relajarse jugando videojuegos era positivo pues se recuperaba la energía y hasta se recuperaban los niveles de concentración, pretexto que seguramente muchos usan para no dejar el control de lado al final del día. Sin embargo, todavía después de dos décadas, hay personas que encuadran más en otro perfil de un estudio realizado en 1990 por Kubey y Csikszentmihalyi: “los que creen que podrían estar haciendo algo más productivo, como ejercicio u otras actividades de esparcimiento.”
En futuros estudios, se contemplará si estas personas reaccionan así ante cualquier tipo de diversión o si únicamente tienen esta reacción con la diversión que provee una pantalla, además de que se verá si delimitar su diversión es una manera de autocastigarse por su falta de responsabilidad en otras actividades (algo así como “No voy a disfrutar la peli por estar pensando que no he acabado el reporte. Mejor ni voy”).
El objetivo a futuro es “diseñar estrategias” para que las personas no se enfoquen en la culpa, sino que conozcan y valoren los beneficios de la recuperación y el descanso, ya sea con estos medios o a través de otras formas de esparcimiento.
Fuente: Journal of Communication
