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Sin lugar a dudas, una de las compañías con más historia y forma de todo el medio. Desafortunadamente, en los últimos años, Konami se ha olvidado por completo de su enorme legado y de aquellos días en los que ver su logotipo en cualquier título, era prácticamente sinónimo de que la obra en cuestión era de altísima calidad. Dejando de lado el lamentable cambio de filosofía empresarial y de negocios del que te hablamos, es muy grato recordar por qué es que este publisher siempre tendrá un especial lugar en nuestros corazones, por lo que a continuación te presentamos a sus cinco series más queridas por todos nosotros.
Nacido en 1987 como parte de toda la fiebre por los arcades que hasta ese momento se seguía viviendo en Japón, Konami le dio al clavo con lo que fue Contra, juego que básicamente instauró las bases y formas de un subgénero de los títulos de acción que hasta la fecha seguimos conociendo como “run & gun”. Por supuesto que su asombroso gameplay no fue lo único que nos cautivó, sino que contaba con un marcado estilo que hacía tributo a los grandes clásicos de acción hollywoodense en los que actores como Arnold Schwarzenegger, Sylvester Stallone y más, aparecían rodeados de explosiones. La historia continúo y 15 títulos más tarde la serie de disparos se mantiene, incluso tuvo un nuevo juego hace unos meses que desgraciadamente, para nada le hizo justicia a su legado.
Es totalmente imposible hablar de grandes clásicos de los videojuegos sin tocar el nombre de Castlevania. La creación de Konami a mediados de los años ochenta se convirtió en todo un producto de culto gracias al manera en la que rendía tributo a las películas más reconocidas del cine de terror estadounidense, además, lo buenos que fueron aquellos primeros títulos de plataformas y acción, nos hicieron enamoráramos rápidamente, ni qué decir de su estilo sin igual con altísimos valores de producción en presentación audiovisual que de verdad te hacían sentir como un cazador de vampiros que se había aventurado para acabar con el mismísimo Conde Drácula. Títulos más modernos como Symphony of the Night causaron que el nombre de la serie se convirtiera en leyenda. Una pena que esté tan olvidada.
No, Castlevania no es la única serie de Konami que habla sobre cazadores de vampiros y todo ese folclore del terror occidental. Hideo Kojima, padre de Metal Gear, también tuvo una faceta en la que se aventuró en todo este mundo, creando una nueva serie para consolas portátiles de Nintendo bajo el nombre de Boktai. Esta serie que vio su última entrega en el Nintendo DS, tenía la peculiaridad de que para cargar las armas de nuestros protagonista, necesitábamos de luz solar verdadera. Sí, los juegos de Game Boy Advance de esta franquicia, contaban con un innovador sensor de rayos UV que interactuaba directamente con el gameplay, algo que por supuesto, nunca antes habíamos visto. Encima de todo esto contamos con juegos de acción isométricos sumamente bien logrados y llenos de personalidad.
Todos sabemos bien que Capcom y su Resident Evil fundaron las bases para lo que sería la primera etapa 3D de los survival horror, porque para muchos, los que de verdad estaban haciendo juegos de terror eran Konami. Keiichiro Toyama y su Team Silent nos presentaron por primera vez a Silent Hill en 1999 cuando el PlayStation vivía sus mejores momentos. El éxito de este primer título fue tal que inmediatamente se ordenó una secuela para el ya mucho más capaz PS2, asunto que por supuesto, no paró ahí. Desgraciadamente, durante las últimas entregas, se le quitó seriedad a lo que era esta franquicia, entregándonos juegos dignos del olvido. Además, tuvimos todo el escándalo de la cancelación de Silent Hills, nuevo proyecto que estaba siendo encabezado por Hideo Kojima que jamás pudo ver la luz más allá del sonado P.T.
El paso de los videojuegos a experiencias casi totalmente faltas de narrativa a producciones con altos valores cinematográficos, fue un proceso bastante complicado que poco a poco ha venido encontrando su propio espacio. Sin lugar a dudas, uno de los grandes pioneros de todo este asunto fue Hideo Kojima, cuando en 1987 convencía a Konami para que le financiara la creación de una nueva IP que se estrenaría en las MSX de la época. El resto es historia y cuando la serie finalmente pasó a lo que conocemos como Metal Gear Solid, no tardó nada en convertirse en una de las más queridas de todos los tiempos. Por supuesto, la salida de su creador de las filas de la compañía, hacen que pensar en un nuevo juego de la franquicia sea bastante complicado en todos los sentidos.