Durante su participación en Game Developers Conference 2014, en San Francisco, Ken Levine, conocido como la mente creativa detrás de la saga Bioshock explicó los pros y los contras de las narrativas lineales, que son el tipo de historias en las cuales ha trabajado por 19 años. Entre los aspectos negativos que señala está el poco valor de rejugabilidad, ya que un desarrollador puede invertir años y años en construir un mundo en el que contarán una historia, pero el jugador la terminará dentro de 10 o 15 horas, sin mucho deseo de volverla a experimentar, ya que sabe cómo se desenlazará.
Además, agrega que este tipo de proyectos cada vez piden más tiempo y recursos de parte de los equipos detrás de ellos, lo cual limita el número de proyectos así que se son posibles hacer. Recordemos cómo se acaba de desbandar Irrational Games, el estudio en el que Levine invirtió muchos años de su vida, y del cual se forma un equipo con un núcleo de 15 personas para desarrollar juegos comandados por Levine. Desde el anuncio de ese suceso, Levine explicó que ahora pensaba hacer juegos “dirigidos por la narrativa” y hoy en GDC ha explicado un poco más a qué se refiere con eso: múltiples ramificaciones y caminos.
Levine y su equipo ahora buscarán crear experiencias distintas y únicas en cada vez que se juega, por lo que dos personas no experimentarán un software de la misma manera en caso de haber tomado decisiones distintas. Esto no es nuevo en los videojuegos, ya que hay muchos tipos y géneros que usan este tipo de estrategias. Ahora habrá que esperar a ver más concretamente cómo es que Levine piensa llevar esto a acción.
Fuente: Games Industry
