Hace unas semanas platicando con un amigo y colega español de sitios de videojuegos (¡Saludos Ramón!), me comentó de un juego de un conocido suyo, Locomalito, del cual me hicieron llegar un código en su versión EX para Steam. Me llevé una muy grata sorpresa y decidí reseñarlo.

UN GRAN TRIBUTO DE VIEJA ESCUELA

Maldita Castilla es un muy buen tributo a una serie clásica de Capcom, Ghouls n’ Goblins, misma de la que le guardo muy buenos recuerdos gracias a su versión Arcade y, sobre todo, a su segunda parte para SEGA Genesis que reprogramó el mismísimo Yuji Naka (Sonic, Phantasy Star, Girl’s Garden, etc). Pero no por ser un título “inspirado en”, Maldita Castilla deja de tener personalidad propia y mucho que aportar.

El juego está situado en el Medievo Español, una época donde la religión, lo demoniaco y lo fantasioso reinaban. Su creador Locomalito (porque sí, este juego fue desarrollado por una sola persona y un músico), se basó en el cantar de Amadís de Gaula para crear una historia donde una bruja pierde a su amado y hace un pacto con el demonio, quien se aprovecha para abrir una puerta al infierno y permitirle a los seres demoniacos invadir el reino de Castilla. Para afrentar el problema el rey de la región manda a un comando de caballeros a solucionar la situación y de los cuales nosotros tomamos el control de uno de ellos. ¿Suena a una historia emocionante, no? Bueno, pues he ahí parte de la magia de este tipo de juegos que buscan replicar la magia de los años ochenta y noventa.

No me queda duda que Locomalito vivió esas décadas jugando de lo bueno pues mucho de lo que se ve en su juego lo aprendió bien y lo reflejó con excelentes tributos en el diseño de niveles y mecánicas de juego. Si de primera instancia las mecánicas básicas te parecen similares a las de la serie de Capcom (saltar, esquivar, atacar con lanzas y derrotar demonios), una vez que las dominas te das cuenta del tipo de tributo moderno que es.

Lo mejor de todo es que Locomalito no sólo se limitó a replicar lo más básico sino que incluso se atrevió a jugar con varios aspectos como lo son la colocación de los enemigos, los momentos donde fuerza al jugador a esquivar o esperar, los espacios para saltar, el escondite de los ítems, entre muchos otros. Por ejemplo, me gustó mucho como cambió las dinámicas cuando quita la luz o cuando incorpora el fuego ya que cambian las estrategias de lo que se tiene que hacer con las mecánicas básicas.

Por otro lado, la forma trágica en que narra la historia del juego a base de pérdidas de compañeros o situaciones con los demonios sin diálogos y acción continua mientras atacas, le dan ese toque especial. Se ve que usó mucha imaginación para congeniar esos mitos del Medievo Europeo con lo que vivió de Ghouls n’ Goblins y otros Metroidvanias.

Agreguemos a lo anterior un gran control que es muy responsivo para este tipo de dinámicas de saltos con precisión y ataques certeros, lo cual ayuda a la habilidad y el reflejo de quien lo juega; porque hemos de decirlo, no es un juego fácil, sino uno que exige que el jugador vaya puliendo sus habilidades.

Para sumar aún más reto hay muchas cosas escondidas en los niveles. Por ejemplo, si juntas todas las lágrimas de la bruja escondidas (que a veces tendrás que regresar o acceder a otros lados para encontrarlas), desbloquearás niveles escondidos en el infierno (con mayor dificultad) que, de lograr pasar, desbloquean el verdadero final. Entonces pasamos de tener seis a ocho niveles, todos muy bien trabajados y que jamás se sienten repetitivos. Me dio gusto jugar Maldita Castilla muchas veces con tal de liberar el verdadero final. Fue un gran reto que disfruté bastante.

Otro punto interesante que quiero destacar es el esfuerzo que el desarrollador hizo por brindar esa sensación de arcadia de los ochenta y noventa. El tipo de paleta que uso para sus sprites que están muy bien trabajados y con muchas animaciones que reaccionan diferente según sea el caso, los efectos de recorrido en paralelo de los fondos y planos, o mecánicas como que caigan cosas del techo o salga algo del pantano, me remontaron a mis buenos años de jugador de los noventa. También ayudó mucho el OST compuesto por “Gryzor87” que se apoya del YM2203 para darle sonido FM. Todo esto en conjunto te adentran más en el juego.

¿PAGAR O NO PAGAR?

Es cierto que este juego tiene una versión gratuita (de 2012) que puedes bajar directamente de la página del autor. Sin embargo y tras jugarlo, ver la gran experiencia que es y saber que lo hizo una sola persona, me hicieron sentir que estaría muy mal no aportarle nada a alguien que se esforzó de esta manera, que transmite ese apreció por los juegos de los ochenta y noventa en un proyecto como éste y que, además, se molestó en hacer una versión EX de su juego portéandolo a consolas actuales (Xbox One y PS4) y Steam. Hay un límite para ser prángana, sobre todo cuando consideramos que Maldita Castilla EX está en $87 pesos en Steam.

La versión EX trae algunas cosas extras como logros, filtro de scanlines y más modos de vista, un bestiario de los mitos en los que basó el juego y un OST remasterizado.

Mientras terminaba esta reseña me tocó ver a varios colegas japoneses darle muy buenos comentarios, pues recientemente el juego se lanzó allá. La versión EX se lanzó el 20 de octubre de este año. También una disculpa por publicar la reseña hasta ahora, pero estuve muy ocupado con trabajo estos últimos 2 meses.

También puedes visitar el sitio de Locomalito, donde también hay otros juegos que puedes descargar gratis para tu PC. Gaurodon y The Curse of Issyos me divirtieron bastante.

Maldita Castilla EX es un gran título para aquellos que gustan de los juegos de la vieja escuela que ofrecen reto, exigen habilidad y representan un buen viaje a la nostalgia. Disfrutarás mucho de su diseño de niveles y su ambientación inmersiva. Muy recomendable.

*Esta reseña fue hecha con un código proporcionado por el Desarrollador.