SmashWeek: It’s Good to be The King

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itsgoodtobetheking¡Queridos Smasheros, el día ha llegado!

La cuarta entrega de una de las series más queridas por los fans de Nintendo finalmente debe estar en tus manos hoy o mínimo en el fin de semana… Es tu deber.

Para celebrar este suceso, Atomix ha armado una semana especial dedicada sólo a esta franquicia, con artículos de múltiples opiniones, videos y más, ¡enhorabuena por eso y gracias por la invitación!

Quiero compartirles unas humildes palabras transformadas en una historia que espero logre remontarlos a una época increíble de nuestras vidas, el periodo dorado de los 90’s, días de nostalgia pura, donde el rey era Nintendo All Star! Dairantō Smash Brothers, o mejor conocido por todos como El Smash 64.

Quiero que lean las siguientes palabras con detenida atención: NINTENDO 64

El querido Nintendo 64, tu eterno amor, mi eterno suspiro, nuestro baúl de recuerdos. 1997, verano de 1997, sonaba con todo “I Believe I Can Fly” de R. Kelly, –bueno mínimo mi mamá la repetía todo el día–, yo tenía justo 7 años, –¡YA!, Comunidad de Atomix, supérenlo, llevan 6 años diciendo que son más grandes que yo–, lo sé, me lo hicieron entender bastante, –pero yo mando, es mi historia–, mi papá me llevo a comprar la consola del momento para mí, me tomo un año de rogarle para que finalmente me llevara, me acuerdo porque costo 1997 pesos.

Finalmente NINTENDO 64!

Blast Corps, Cruisin’ USA, Mario 64 en mis pequeñas manos, debo aceptar que no tenía idea de la trama de ninguno de los juegos, menos sabía hacer cosas complicadas y mis horarios de juego eran severamente controlados… Hasta el día de hoy tengo bonitos recuerdos de Blast Corps, pero siendo sinceros nunca logre pasar muchas de las misiones, simplemente estaba anonadado con la cantidad de acción y robots en pantalla, también grito de vez en cuando en las comidas Cruisin’ USA!!! Yeaah!!,para romper el hielo y todavía les vengo manejando los pelitos chinos al escuchar el tema de Jolly Roger Bay, por mucho una de mis canciones favoritas en la historia de los videojuegos.

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¡Oh maravilloso y horripilantemente gris NINTENDO 64!

Ya con la consola y ya en confianza, empezaron a lloverme los que se volverían clásicos en mi vida, mis juegos favoritos como Yoshi’s Story, Cruisn’ The World, Banjo Kazooie, Star Fox 64, GoldenEye 007, Body Harvest y The Legend of Zelda: Ocarina of Time… Los meros, meros, los ejes de mi vida, mis queridos diamantes, mis juegos de NINTENDO 64… Pero, justo en medio de todas estás preciosas joyas, algo se interpuso en mi camino…

En Nintendo Power yo llevaba varios números leyendo de un juego llamado Super Smash Bros., un juego de héroes de Nintendo peleando entre ellos, mucha acción, todos mis personajes favoritos en un juego, ¡Link!, ¡Mario!, ¡Fox!, ¡Yoshi!, ¡Metroid! –LOL, chiste de medio párrafo BAD DA BUM TSSS–, ¡Donkey Kong! Y ¡PIKA-MAYÚSCULASEN3DQUEENREALIDADSEJUEGA EN2DPEROMÍRALOTANAMARILLOCOMONUNCA-CHUUUU!

smash-bros-64Super Smash Bros., mi primer juego de peleas, bueno, mínimo el primero en que era bueno y no requería de palancas girando a la mitad que al mismo tiempo requiera mi otros dedos presionando botones para sacar bolas de fuego, mi primer amoooor, diría esa canción que están escuchando en su cabeza ahorita por mi culpa.

Quiero poner en la mesa varias preguntas aquí: ¿Entonces Sakurai en sus tiempos libres andaba de vago con Iwata haciendo un juego de peleas?, ¿Cómo que en su pinche tiempo libre se le ocurrió esta maravilla?, ¿Cómo que secretamente lo sigo desarrollando, balanceando y agregando héroes de Nintendo para presentarlo?, ¿Por qué Dios es tan maravilloso?

Habiendo estado siguiendo de cerca el juego en revistas, logré comprarlo varias semanas después de su lanzamiento en una tienda de videojuegos en Estados Unidos. Rápidamente y elegantemente –como Pidgeotto– apuré a mis papás a que me llevaran a la casa; todo el camino estaba fascinado con esta cajita de cartón que tenía a MIS personajes favoritos dibujados como caricaturas echando madrazos, llegue corriendo a prender el Nintendo 64, la guía, junto con la cajita con sus dibujitos, había chingado a su madre desde la puerta, yo nada más quería verlo corriendo en mi consola.

Y sucedió.

smash-bros-64-gif-01Soy fan de Toy Story, los hechos que están a punto de recordar con mi narración son verídicos y extraordinarios, –estoy exagerando probablemente–-, intro del juego, primera cosa que pasa, este “guante volador” se encuentra en un cuarto –-como el de Andy de Toy Story–- y se dirige a una caja de juguetes –como la de Andy de Toy Story– y saca a este pequeño Mario de trapo y lo coloca en una mesa –como la de Andy de… Toy Story– y rápidamente acomoda los libros, la lámpara y BOOOM! La mesa se vuelve un nivel, Mario está lleno de vida y para cuando te das cuenta ya te están dando flashes de increíble arte de los demás personajes que están en el juego, que con las puras caras, colores o figuras logran que traigas cara de chino sonriendo de felicidad… y no contentos de mostrártelos juntos, brincando, corriendo, en sus niveles, dándose de madrazos, te muestran un pantallazo de siluetas, y tú apenas estás digiriendo toda la verguéz que acabas de ver.

RESPIRAS.

AAHHHHRGGGG. Vas de nuevo. A adivinar las siluetas, a especular, a hacer que tu mente divague en que otras locuras HAL y Nintendo incluyeron, a imaginar personajes que no tienen nada que ver, mientras que todavía ni llegas el menú principal. GHHHHHHHHHHHHHH

RESPIRAS.

A conocer el menú, los personajes, las opciones, a elegir tu primera campaña, a descubrir las cosas que hace cada personaje, a hacerte chaquetas mentales de combos que en realidad no son nada impresionantes, pero te sientes Ryu partiendo madres, a enfrentarte a la “Mano”, a desbloquear personajes, ¡Oh, sorpresa!, ¡Captain Falcon!, correr por toda la casa gritando FAAAAAALCON PUUUUNCH, ir a la escuela, tener hijos, morir.

yoshi-gifMe es tan íntimo Super Smash Bros., vámonos tranquilizando después de toda la intensidad de los pasados párrafos para nuevamente intensear en los que siguen. Cómo no. Para muchos, era la primera vez que veíamos a varios de nuestros héroes en 3D, aunque en realidad tenían este feeling super retro de presentarte los personajes en 2D pero los stages en 3D. Como fan de Pokémon, el simple hecho de ver a Pikachu, ahí todo gordito, echando rayos o haciendo chillidos, ¿Qué me dicen de ver a Fox afuera de la nave?, o ¿Link usando todas sus herramientas de Ocarina of Time?, Super Smash Bros. para Nintendo 64 es el poema perfecto para los fans de Nintendo, el mayor fan-service que pudimos recibir, una carta de amor preciosa, la mejor manera de capturar todo lo bonito de las franquicias y historias de Nintendo y unirlo en… MADRAZOS.

Recuerdo con mucho cariño los

MADRAZOS

nintendo-all-starsde 4 controles en casa de mi vecino David, esos deathmatches de porcentajes altísimos, movimientos calculados y Pokébolas volando por todo el nivel, con tal de sacar a ese Snorlax que bloqueaba la pantalla de ese Kirby travieso que brincaba un chingo. Recuerdo con mucho cariño la música, los niveles, los brincos de último segundo, los ataques sorpresa, el globito de chicle para defenderse de esas patadas increíbles de Fox, la increíblemente pasada de lanza, Jigglypuff, y esos stages de targets verguísimas.

Quiero que sepas que si jugaste Super Smash Bros., nunca estarás solo y que todos al igual que tú nos cagamos cuando anunciaron Smash Bros para el Gamecube, quiero que sepas que Ness nunca estuvo chido y en realidad me caga mucho, quiero que sepas que está bien que le pongas traje rosa a Mario, quiero que sepas que todos éramos re-malos para los barriles en el nivel de Donkey Kong.

Bow down to the King, the only King: Super Smash Bros.

Espero jugar pronto con ustedes Smash en el 3DS y que mi Toon Link sea más certero que su Mega Man.

Arte cortesía

Quas-quas

Rariatoo