A casi ocho años de la salida del PlayStation 3, con casi 800 juegos en su catálogo y más de 80 millones de unidades vendidas, todavía le queda larga vida a la consola. Una de las pruebas irrefutables de la declaración anterior es la llegada de Drakengard 3, juego exclusivo de la consola producido por Access Games y publicado por Square Enix que llega a nuestro continente después de su lanzamiento en Japón en diciembre del año pasado.
Este RPG de acción pertenece a la franquicia originalmente titulada Drag-On Dragoon, conocida en occidente como Drakengard. Con dos títulos canon en su haber exclusivos de Sony y un spin-off para Xbox 360 y PlayStation 3 llamado Nier, la serie se consolidó como una de culto al tratar temas adultos y mundos en decadencia que permanecerían en el alma de cada entrega.
Drakengard 3 podría resultar engañoso por su nombre, ya que no se trata de una secuela directa del segundo título, sino de una precuela cuya historia se lleva a cabo cien años antes de los eventos del primer juego: En un mundo oscuro de fantasía llamado Midgard donde los humanos son la especie dominante sobre otras como los dragones, controlamos a Zero, una misteriosa chica que se embarca en una misión junto a su dragón Mikhail para matar a sus cinco hermanas, quienes dominan distintas regiones del mundo. La historia nos guía a través de la búsqueda del verdadero motivo de la protagonista para efectuar tal carnicería.
Drakengard 3 es un juego que brilla por sus excelentes elementos como el arte, el gameplay, la historia y la música que en conjunto crean una experiencia específicamente diseñada para jugadores de nicho que busquen juegos robustos como los RPG de acción del pasado. Este juego clasificado para adultos por sus altos niveles de violencia no trata sobre misiones infantiles para salvar al mundo, descubrir el verdadero significado de la justicia, explorar los misterios de un mundo medieval o conseguir la gloria y la fortuna para beneficio propio. Drakengard 3 nos pondrá en la piel de una protagonista llena de ira en búsqueda de sangre, cuya personalidad destacará por ser en extremo brutal y antipática, provocando así la intriga del jugador y el deseo de saber qué hay detrás de tanta crueldad.
El género al que pertenece el controvertido título es al RPG de acción, mismo que combina partes de plataformas, hack & slash y disparos que mantendrá la atención del distraído y atraerá al ávido por la perfección.
Más allá de la acción y los dragones, lo que captura al jugador es el mundo de fantasía oscura y la historia única que acontece. Los eventos estarán narrados y divididos en capítulos segmentados en versos, a través de los cuales se contará la historia del viaje de Zero y su deseo de sangre, así como el descubrimiento de su pasado y de sus motivos verdaderos. El guión es invariablemente el mejor de la serie, mismo que puede llevar al jugador desde las risas hasta las lágrimas en tan sólo un capítulo. Debido a la naturaleza del juego y sus fuertes temas para adultos, algunas escenas provocarán grandes conmociones, por lo que pueden esperar brincos en la trama y giros inesperados que los mantendrán al filo del asiento.
La actuación de voz es excelsa, y la personalidad de los protagonistas nos convencerá de que en realidad existen. Las voces vienen completamente en inglés, pero para los más fanáticos se otorgará la opción de obtener las voces originales en japonés en la tienda en línea.
Como mencioné anteriormente, Zero irá acompañada todo el tiempo de su dragón Mikhail, el cual proveerá a la historia un buen contraste con la personalidad de la protagonista. Mikhail siempre actuará con optimismo, entusiasmo y expresando emociones puras, aunque también se profundizará en su historia y se revelarán aspectos un poco más oscuros de su identidad. El género femenino predominará en Drakengard, ya que la protagonista y sus hermanas serán el núcleo central alrededor del cual girará la trama, y distintas partes de la feminidad humana serán descubiertas al desnudo por el jugador. Cabe destacar que Zero es la primera protagonista mujer de la serie, por lo que se prestó especial cuidado a su diseño.
La historia te invita a pensar que es predictiva, sin embargo, tomará giros bruscos en cualquier punto que nos sacarán de nuestra zona de confort y despertará la curiosidad por saber qué hay adelante. El guión está lleno de guiños al jugador que no le permitirán aburrirse ni un segundo: humor negro, violación de la cuarta pared, chistes alusivos a quien esté detrás del control y más nos mantendrán pegados al televisor y soltando una que otra carcajada de vez en cuando, todo sin romper el tono oscuro general de la historia.
Tan profundo es el trabajo realizado en las historias de los personajes (tanto enemigos como ayudantes), que Access Games se dio a la tarea de expandir el universo de Midgard y traer una novela que ahonda en el pasado de cada uno de los personajes. Aquí podemos enterarnos un poco más de sus vidas, ya que de acuerdo al productor Takasama Shiba, normalmente los jugadores vemos un personaje controlado por la computadora o un enemigo y lo desechamos rápidamente, sin permitir que deje huella en nuestra historia y sin apreciar el trabajo que el equipo de producción puso en su desarrollo. La novela está puesta al público de manera gratuita en el sitio oficial del juego, y sin duda complementa de manera magistral la profundidad y el compromiso con cada uno de los personajes.
No todo puede ser perfecto y los gráficos de Drakengard 3 dejan mucho que desear. Debido a las frenéticas batallas con decenas de oponentes, ayudantes, jefes enormes y un dragón que dispara fuego, sufriremos caídas de framerate atroces que nos harán sollozar del disgusto. Varias veces estaremos inmersos en la acción para de repente caer en cuenta de que el PlayStation 3 ya no soporta tantas texturas, polígonos y partículas en una sola escena, y la caída del framerate y el exceso de explosiones sin control llegarán a alienarnos momentáneamente de nuestra participación en la pantalla, esto sin contar las paredes invisibles que de repente llegarán a cortar la inmersión en el mundo en el que nos encontramos.
Indudablemente, Unreal Engine 3 sufre visualmente por los años, y aunque las escenas cinemáticas están por demás cuidadas y se ven excelentes (debido a los estándares de calidad de Square Enix), muchas veces nos veremos peleando contra enemigos comunes que parecieran venir de otros juegos de tan gastado que está el motor gráfico y su uso excesivo en otras decenas de entregas de la industria en general.
Independientemente del desempeño gráfico, el diseño artístico puede salvar el aspecto visual y hacernos olvidar los fallos técnicos. En general, la serie Drakengard ha estado inspirada en Europa Medieval para su diseño, sin embargo, para la tercera entrega el diseñador Kimihiko Fujisaka decidió elaborar personajes más modernos, conservando la arquitectura y los entornos clásicos de la franquicia.
Éste es el mismo artista que nos entregó arte en juegos como The Last Story, y su huella golpea nuestras pupilas de la manera más bella posible, dándonos personajes altamente detallados en su aspecto visual, mismos que resultan aún más impactantes por mostrar personalidades completamente apuestas a lo que podrían parecer por su aspecto.
Hack & slash, elementos de disparos al ir montado en el dragón y una pizca de plataformas resultan muy útiles para agregar variedad al juego y romper la monotonía, sin embargo, en el aspecto técnico puede llegar a fallar al implementar controles que respondan de la manera más eficiente en cada ocasión.
En Drakengard 3, la cámara aunque no terrible, si resulta decepcionante en ciertas partes donde tendremos que realizar brincos precisos o enfocarnos en enemigos importantes. Muchas veces pelearemos con el sistema de apuntado que nos traicionará y se orientará a enemigos comunes apartando de nuestra vista a los más fuertes, dejándonos en posición vulnerable y sin oportunidad de planear nuestros ataques con precisión. Realmente no es tan malo como en otros títulos, pero Access Games sí hubiera podido hacer un mejor trabajo al balancear los géneros y pulir la cámara.
El resto de los controles son sobradamente precisos y fluidos: de manera instantánea podremos bloquear, esquivar, saltar y realizar ataques naturalmente, convirtiendo al control en una extensión más de nuestro cuerpo.
Otro de los aspectos clave de la magnificencia de Drakengard 3 es su gameplay. El estudio supo dosificar bastante bien los elementos de historia, acción, estrategia y dificultad de manera que el progreso se sintiera natural aunque estuviéramos atorados con una misión específica imposible de superar.
En general el título es fácil de jugar, pero la acción es convenientemente estimulante para seguirnos empujando hacia adelante. Completar cada escenario toma entre 20 y 30 minutos, y la historia tomará unas 40 horas en ser terminada. No obstante, para los más codiciosos que quieran desbloquear cada arma, cada objeto, cada final y cada secreto, el juego tomará más de 100 horas en ser completado en su totalidad, dando un gran valor de costo-beneficio que pocos juegos ofrecen en la actualidad.
Todas las batallas contarán con un ritmo frenético, en el cual cambiar de arma (ya que podremos escoger entre espadas, lanzas, puños, dagas y más) será muy fácil y no alterará el flujo de los combates. La dificultad es de los mejores aspectos de Drakengard 3, misma que ofrecerá bastante reto y nos hará repetir una misión una y otra vez buscando la estrategia perfecta. Sin embargo, aunque muramos o se nos dificulte completar un escenario, siempre será posible subir de nivel en las misiones secundarias o repitiendo escenarios pasados para obtener más puntos de experiencia.
Zero no sólo derrotará enemigos a diestra y siniestra a través de túneles sin gracia; los escenarios están excelentemente diseñados y nos proveerán de pedazos de acción seguidos de exploración, búsqueda de tesoros, combates con jefes, escenas, intrusiones de personajes y más que evitarán que nos sintamos en un hack & slash genérico. La protagonista contará con un poder especial llamado “Intoner Mode”, el cual se activará al llenar un medidor de sangre que irá en aumento conforme aniquilemos enemigos de las formas más sangrientas y con los combos más largos; poco a poco nos iremos impregnando de sangre la piel, cabello y vestido, y una vez que nuestro sanguinario personaje llene su medidor, podrá desatar una furia enloquecida que aumentará su ataque y anulará el daño recibido para superar los obstáculos más difíciles.
La estrategia y la correcta selección de nuestras acciones en cada nivel serán indispensables para superar los retos, ya que las batallas con los jefes siempre nos mantendrán al filo del asiento y con la frente sudada.
Aparte de los objetivos de cada nivel, tendremos por separado misiones extra que nos otorgarán beneficios únicos no encontrados en la campaña principal, como aumento en la capacidad de objetos, armas, piezas para subir de nivel nuestro equipo y dinero. Aparte, en cada capítulo de la historia se encontrarán escondidos tres cofres dorados que de ser encontrados nos darán recompensas y nos ayudarán a terminar el juego al 100%, añadiendo variedad al de por si ya robusto juego.
La música del juego es definitivamente una obra maestra, el compositor Keiichi Okabe se dió a la tarea de entregar una personalidad única a
Drakengard 3. El caso con la música en este juego es un tanto atrevido y extravagante: el compositor no fue persistente a la hora de crear un estilo con consistencia, no siguió un método único, sino que se esmeró por crear una obra independiente que incluyera distintos géneros adecuados para el tono del juego.
De lo que hablo es que en un momento podremos estar escuchando una melodía tranquila que acentúe la belleza de nuestro entorno y de repente podríamos encontrarnos con una pieza de música electrónica con dubstep al enfrentarnos con una criatura mitológica. El contraste es el concepto central alrededor del cual se componen varios elementos del juego como el diseño de personajes y la música, y esto le agrega un valor enorme al título que destaca de entre los demás del género.
Cabe destacar que la mayoría de las pistas incluye voces, lo que le añade una personalidad única a la música del juego que de por si nos engancha con sus mecánicas adictivas y sus personajes controversiales. Con las voces en las canciones, Access Games intenta reverberar los sentimientos que intenta expresar en nuestros corazones, y en más de una ocasión sentiremos escalofríos de lo bien logrado y sincronizado que está el aspecto musical y la atmósfera del juego.
Square Enix entiende que los jugadores de consolas son conocedores de los videojuegos, y gastan tiempo y dinero en ellos. La compañía creció gracias a ellos y es por ello que entregan este juego para ese nicho específico que cada vez se hace mas pequeño por las nuevas tendencias de juegos de teléfonos inteligentes.
Drakengard 3 es sin duda una fantástica manera de invertir nuestro tiempo en entretenimiento, y nos ofrece un coctel de historia, personajes, música y gameplay que jamás hemos visto y que sin duda nos mantendrá estimulados con cada diálogo y con cada nivel superado.
