A poco tiempo del anuncio del segundo kit de desarrollo de Oculus VR, Oculus anunció su trato con Facebook, en el cual sería adquirido por el gigante en tecnologías de la información por una cantidad aproximada a dos mil millones de dólares. Cabe destacar que las negociaciones para este tipo de adquisiciones dura bastante, incluso meses. Está confirmado que esta compra se realizó de manera casi inmediata.
“Lo crean o no, pasó casi en una noche, las negociaciones llevaron tres días”, dijo Brendan Iribe, CEO de Oculus. El equipo desarrollador conoció a Mark Zuckerberg, CEO de Facebook en los pasados meses: “Cuando Mark probó el dispositivo y los últimos demos, preguntó, “¿qué puedo hacer para ayudar? ¿Qué puede hacer Facebook para ayudar”, comenta Iribe.
Después de la conversación con Zuckerberg, el equipo debatió sus opciones:
Pusimos nuestras mentes a trabajar en equipo y al final la compra tuvo mucho sentido. Deben entender la visión de Facebook de dejarnos ser quienes somos, así como dejaron ser de Instagram quienes son. Querían dejar un precedente de dejar a las compañías trabajar por si mismas, pero integrarlas y ser capaces de permitirle a la compañía una ventaja de recursos por parte de la fuerza y el tamaño de Facebook.
Después de una lluvia de ideas, Zuckerberg y Oculus llegaron a un acuerdo de 400 millones de dólares en efectivo, y 1.6 miles de millones en acciones para la adquisición. De acuerdo a Oculus, el motivo de la venta fue para reducir el riesgo, permitiendo a la compañía desperdiciar tiempo en recolectar fondos.
Iribe asegura que no hay por qué preocuparse, al contrario, se deben levantar expectativas sobre los nuevos horizontes de la tecnología y su uso en otros aspectos de la sociedad como la comunicación móvil. “Oculus Rift tiene cero compromisos. Es lo mejor que le pudo haber pasado”, termina Iribe.
Fuente: GameInformer
