Podemos creer que tenemos noción de lo que pensamos al escuchar “Ocarina of Time”. Seguro piensan en una imagen borrosa café con verde, en Link y su copete güero y, finalmente, en el mejor juego de todos los tiempos. Pero, ¿tenemos la imagen clara y fresca de lo que es Ocarina?
A pesar de que normalmente juego muchos más juegos viejos que nuevos, Ocarina fue unos de esos Zeldas que sólo terminé una o dos veces, a lo mucho; sin embargo, experimenté y conocí muy bien todo lo épico de este favorito de todos.
Creo que no soy el único que cree que la serie de Zelda es la mejor que existe en este medio que tanto disfrutamos. Hay un sentimiento de descubrimiento que hace de Zelda la fórmula perfecta para un videojuego. Hay algo que le hace falta a la mayoría de juegos en esta industria: corazón.
Corazones, flechas, escudos y espadas han sido las armas que, a lo largo de 25 años, ha portado Link como nuestro avatar. Él ha sido la representación más precisa de nosotros mismos que hemos tenido, él es el silencioso amigo que ha sido testigo de cómo hemos crecido y de cómo, hasta el día de hoy, celebramos infinitamente los videojuegos.
Aunque yo no comparta la opinión de que Ocarina es el mejor juego de todos los tiempos (ni de la serie), eso no significa que no lo considere uno de los mejores títulos que he jugado en mi vida (tampoco ignoro que la mayoría de videojugadores lo considere el número uno). Por eso, seas quien seas, simplemente no te puedes autonombrar “gamer” si no has pasado el examen de admisión: Ocarina of Time.
Regresar a jugar un título que no es 2D y que tiene alrededor de 13 años, en la mayoría de los casos, es un desastre. Los experimentos de los primeros años del desarrollo en 3D no han envejecido tan bien. A pesar de que podemos ver claramente la ingenuidad que hay en Ocarina (si lo comparamos con títulos más recientes de la serie, como Wind Waker y Twilight Princess), claramente es uno de los juegos que mejor ha tratado el paso de los años.
Sin embargo, algunos elementos del juego hacen un poco de ruido (como algunas superficies bastante cuadradas) y, aunque estoy de acuerdo con la intención de Grezzo (estudio a cargo de este port) de mantenerse fieles a la fuente, bien podrían haber hecho algo para disimularlo. ¿Por qué no simplemente poner una textura de plantitas en los bordes para ocultar los filos de las superficies?
Fuera de eso, el port en general presenta a esta joya de mejor manera que el título original. Es un demente cualquiera que quiera negar que el juego se ve mejor en 3D.
Kokiri Forest se siente vivo con todas las partículas que vuelan frente a ti, Navi (tan gritona como siempre) rodea a Link, la sensación de profundidad que te acompaña a lo largo del juego… todo esto hará sonreír a cada uno de los fans de la serie. Ésta es la aventura más épica que ha estado en tu bolsillo.
Dentro de las nuevas adiciones que tiene este port está la opción de poder ver o apuntar (con el arco y los ítems similares) con el giroscopio del 3DS. Sé que en la mayoría de casos esto resulta ser un gimmick de muy mal gusto, pero en Ocarina se siente muy bien: al tocar el ojito de view y jugar con la luz apagada podrás voltear a todo tu alrededor como si estuvieras sosteniendo una ventana a otro mundo. Detalles como éste son los que hacen de Ocarina of Time 3D la mejor version del título.
En el juego de Nintendo 64 entrar al menú para cambiar ítems o quitarte las botas era algo bastante fastidioso que tomaba mucho tiempo (si no me creen, recuerden el templo del agua). Por fortuna, la touch screen del 3DS arregla esos problemas y crea una experiencia mucho más fluida que la del título original.
Para todos aquellos que han jugado Ocarina hasta el cansancio es una gran noticia la inclusión de Master Quest. Recordemos que en esta versión del juego modificaron todos los dungeons, invirtieron el juego (como si lo vieras en un espejo) y que los enemigos te hacían el doble de daño, entre otras cosas. Aunque algunos ya jugaron esta versión en Gamecube, estoy seguro de que muchos (yo incluído) no lo habían hecho. El replay value que esto añade al juego es tan genial como cuando le ponías “Zelda” a tu archivo en el primer título de la serie. Lástima que para desbloquear esta versión tengas que terminar la aventura normal.
Otra adición al más puro estilo Mega Man es la posibilidad de pelear contra todos los jefes del juego (a excepción del jefe final) con cronómetro. Lástima que no puedas compartir tus tiempos en línea.
Para los nuevos fans de Zelda la opción de poder obtener pistas de qué hacer para poder seguir avanzando está disponible. Tomen en cuenta que esto es completamente opcional y que quejarse de dicha característica sólo por decir que son hardcore es más inútil que tuitear quejas del gobierno.
El juego se ve precioso, pero la fuente original al día de hoy se sigue viendo así. Aunque hay juegos con mejores gráficas en 3DS, probablemente su encanto no le llega ni a los talones del de Ocarina. Habrá algunos smartasses que digan que se ve igual que el original, pero no es así, realmente no es así.
Otro detalle genial es que los lugares que antes tenían una vista en 360 grados (debido a que utilizaban una imagen rendereada previamente para simular un entorno) ahora están corriendo en tiempo real. Se ven muy bien. Todavía no entiendo por qué el original los tenía, pues las imágenes previamente rendereadas del original se sienten muy fuera del estilo general.
El soundtrack se siente idéntico al original. La buena noticia es que sigue siendo tan maravilloso como hace 13 años: ponerte audífonos y estar en las entrañas del Forest Temple no ha envejecido ni un poquito.
Para finalizar, sólo me gustaría decirle a todos los que estén dudando en comprarlo que, una vez que pasas los tres primeros dungeons y juegas en la etapa de Link adulto, el juego se paga sólito. Hay momentos que de alguna manera había olvidado y que me transportan inmediatamente a finales de 1998. Si anteriormente no tenías una razón para hacerte de un Nintendo 3DS, creo que si ésta no es una buena razón para ti, quizás el 3DS no sea lo tuyo.
Sería fantástico que pudiera olvidar todo Ocarina y que ésta fuera mi primera vez. Si no han jugado este título simplemente no tengo palabras suficientes para expresar qué tanto vale la pena jugar esté juegazo. Sólo esperemos que, ya encarrerado el ratón, el próximo año anuncien Majora’s Mask.
Score 9.5 (pónganle el 10 si nunca lo han jugado)
