Estamos básicamente a una semana del lanzamiento de Final Fantasy VII Rebirth, juego que cumple como la segunda parte del remake lanzado en el 2020, y el cual hasta este momento ha generado expectativas positivas entre los entusiastas de tan singular franquicia de RPG. Y con los días contados para este lanzamiento al público en general, hay marcas que le están haciendo promoción muy a su estilo, una de ellas se trata de bebidas energéticas.
Se trata de ni más ni menos que Red Bull, la cual podría tener algo de sentido, dado que siempre sus comerciales tienen la frase de “te da alas” y ahora queda perfecto con el concepto de que Sephiroth tiene una en sus hombros. En el video podemos ver a los protagonistas del juego dibujados con el estilo de arte de la empresa, viendo un comportamiento cordial hasta que pasa lo evidente al consumir el líquido energético.
Aquí lo puedes ver:
6 more days until we can play @finalfantasyvii Rebirth 🔥. Are you ready?#FF7R pic.twitter.com/wUlf5TKkL8
— Red Bull Gaming (@redbullgaming) February 23, 2024
Esta es la sinopsis del juego:
Final Fantasy VII Rebirth es la segunda entrega dentro del proyecto de remake de Final Fantasy VII, que vuelve a contar la historia del RPG que redefinió el género en tres juegos distintos.
Los héroes icónicos Cloud, Barret, Tifa, Aeris y Red XIII han escapado de la distópica ciudad de Midgar y ahora están en busca de Sefirot, el vengativo espadachín del pasado de Cloud a quien se creía muerto.
Todos los jugadores pueden disfrutar esta nueva aventura, incluso quienes aún no hayan jugado Final Fantasy VII Remake o el original de PlayStation. Prepárate para deslumbrarte con un mayor nivel de narración cinemática, un combate con mucha acción y la posibilidad de explorar este vasto mundo.
Recuerda que el juego se lanza el 29 de febrero solo para PlayStation 5.
Vía: Twitter
Nota del editor: Es una buena forma de promocionar esta aventura, la cual llegará dentro de nada tiempo a nuestras consolas. Impaciente por recibir ese paquete de Amazon, encender el PS5 y no dejar de jugar hasta que de plano me esté muriendo de sueño o hambre.
