Comenzar un nuevo videojuego siempre es difícil, especialmente si hablamos de un MMO. Aunque he tenido experiencia con el género en el pasado, ningún juego ha logrado cautivarme para ameritar el tiempo que algunos jugadores veteranos le han invertido a series como WoW. Sin embargo, siempre es divertido comenzar con un nuevo personaje y explorar un mundo con una gran cantidad de contenido a mi disposición. Y World of Warcraft: Shadowlands me ofrece esto y más.
Durante los últimos días tuve la oportunidad de jugar la nueva expansión de World of Warcraft, conocida como Shadowlands, y disfrutar un poco de la historia y mecánicas que nos ofrecerá este nuevo contenido una vez que llegue de manera oficial al mercado en algún punto de la temporada de otoño de este año.
Ahora, uno de los aspectos más interesantes de Shadowlands, es que esta expansión le permitirá a los jugadores explorar de gran manera el reino de los muertos. Aunque en el pasado hemos visto un par de exploraciones a este horripilante lugar, Shadowlands expandirá todo lo que los jugadores tenían a su disponibilidad en el pasado. Sin embargo, tu nueva aventura no comenzará en estas tierras, sino que tendrás que luchar contra una serie de orcos, arañas gigantes, arpías y criaturas del infierno en un lugar conocido como el Bastión antes.
Una vez terminada esta área, comenzarás recorrer una serie de zonas, de las cuales cuatro ofrecen espacios dedicados a subir de nivel, conseguir equipo y todo lo que puedes esperar en una buena sesión de grindear. También hay un nuevo centro de jugadores, llamado Oribos, y una zona de final de juego de nivel máximo llamada The Maw.
Como ya lo platicamos con Kevin Martens, diseñador principal del juego, la historia se encargará de resolver algunas dudas que fueron creadas en Battle for Azeroth, pero también creará un par de misterios que serán del agrado para todos los veteranos de WoW, y asegurarán que los jugadores busquen sus propias respuestas, al menos hasta que la siguiente expansión llegue y aclare algunos misterios.
Debido a que tuve la oportunidad de probar el juego antes de la beta oficial, la cual comenzará la siguiente semana, me encontré con un par de problemas que, es muy probable, ya no estén presentes en un par de días o en la versión final. Aunque en general el juego se ve tan bien como World of Warcraft normal, algunos aspectos técnicos, como el framerate, aún necesitan un poco de trabajo.
En momentos en donde muchos enemigos están en pantalla, prepárate para ver los fps caer. De igual forma, me topé con un par de glitches que fueron bastante molestos, ya que impidieron mi progreso. En más de una ocasión comencé a pelear contra un enemigo y segundos después el juego se congeló hasta que gane el enfrentamiento de manera automatica. En algunos casos, mis acciones tardaban en ser registradas, causando una derrota injusta. Por último, en tres ocasiones diferentes, el juego crasheo en contra del mismo jefe, lo cual resultó ser bastante frustrante.
Dudo que estos problemas continúen en un futuro, especialmente considerado que Blizzard siempre está escuchando a los jugadores que experimentan algún tipo de problema similar. Con la llegada de la beta, más personas tendrán la oportunidad de explorar este mundo, y el trabajo de mantenimiento aumentará.
Una de las mayores características nuevas en Shadowlands, son los Covenants. Cada zona a la que te aventuras está gobernada por una facción diferente, la cual tienen un propósito específico en el más allá. A medida que ayudas a cada facción, te recompensarán con equipo específico y dos habilidades especiales: una dedicada a tu clase y una universal.
Una vez que completes la campaña principal y alcances el nuevo límite de nivel, podrás aliarte con un Covenant. Esto desbloquea las habilidades específicas de facción de forma permanente, junto con un conjunto de armadura. Al hacer esto, comenzarás una larga serie de misiones que comprenderán gran parte del juego. Los pactos también desbloquean un sistema de progresión llamado Soulbinding, el cual funciona como una especie de unión con NPC’s, en donde podrás conseguir más equipo y acceder a ciertas misiones especiales a lo largo de todo el mapa.
Lo interesante de esto, es que, al elegir un Covenant, no estás ligado de por vida a esta facción. Aunque no es recomendado, tendrás la posibilidad de cambiar de grupo a tu gusto. Sin embargo, en dado caso de que decidas hacer esto, será mejor que lo hagas una vez que ya no tengas planeado recolectar más equipo, o ya tengas todas las habilidades únicas desbloqueadas. De todas formas, es bueno tener esta opción, la cual expandirá por horas y horas la experiencia de algunas personas.
Fuera de todo eso, la expansión ofrece un par de opciones de personalización extra, las cuales harán que tu orco verde con cabello púrpura se vea mejor. Dentro de esta sección, destaca el hecho de que Blizzard ya no te cobrará extra por cambiar el sexo de tu personaje, algo que ya se habían tardado en hacer.
La beta de World of Warcraft: Shadowlands comenzará la siguiente semana, con el lanzamiento del juego completo en algún punto de la temporada de otoño de 2020. Si eres un fan de WoW, entonces no necesito decirte que la pasarás genial con esta expansión, probablemente ya estás apuntado para las pruebas anticipadas. Sin embargo, si eres un jugador casual, como yo, o estás interesado en el MMORPG de Blizzard por primera vez, también la pasarás genial. El juego ha introducido un par de cambios que harán las primeras horas del juego bastante adictivas.