¡Adiós 2015! Nos dejaste cosas increíbles como Bloodborne, The Witcher 3: Wild Hunt, The Legend of Zelda: Majora’s Mask 3D y un nuevo estudio independiente de Hideo Kojima, pero también hubo tragos amargos que a lo largo del año nos hicieron temer por nuestros desarrolladores, franquicias y plataformas favoritas. Tenemos para ustedes doce momentos en los que nos costó pasar saliva con noticias nada agradables para el gamer convencional.
El año comenzó con la mala noticia de que Sega dejaría ir a 300 de sus empleados para poder enfocarse en desarrollo de títulos para PC y móviles. Por lo menos se les dio jubilación anticipada. Hasta la fecha los pocos anuncios que hemos visto por parte de la compañía respecto a videojuegos de consola tienen que ver con Yakuza, Hatsune Miku: Project DIVA X y Valkyria Chronicles; de ahí en fuera puros ports para PC.
2K Games invirtió grandes cantidades de dinero en campañas publicitarias para Evolve. Desde E3 2014 se veía lo ambicioso de este título, en el que la compañía no reparó en gastos sobre todo para su booth de E3. Pero mientras más se acercaba su salida, más turbulenta se ponía la situación debido a las confusas recompensas de preventa y los distintos modelos en los que podíamos acceder al juego. Aparte del DLC con un valor total de $1,900 pesos mexicanos, el sistema multiplayer asincrónico es algo para lo que la industria no estaba preparado.
Simplemente parece que el gamer no cuenta con la capacidad de coordinarse en un escuadrón para vencer a una bestia en crecimiento… cada quien dispara para donde quiere y bueno, el resto ya lo saben. ¿Alguien se acuerda de Evolve?
Hablando de juegos con grandes campañas publicitarias, The Order: 1886 se anunció con bombo y platillo como el gran juego que daría el verdadero banderazo de salida a la nueva generación de consolas. En Atomix pensamos que ese dinero mejor se lo hubieran gastado en darle publicidad a Bloodborne, que con todo y su perfil medio bajo logró vender más de 2 millones de copias. La reacción negativa a la cortísima campaña de The Order: 1886 fue abrumadora, además de que en cuestión de gameplay estaba como 10 años atrasado. Bien por los gráficos, pero no lo son todo.
La vertiginosa y polémica historia entre Hideo Kojima y Konami comenzó como un simple rumor el 19 de marzo. Esta triste historia vería su final hasta muchos meses después, culminando con la creación del nuevo estudio del desarrollador. Primero las cuentas oficiales de Kojima Productions cambiaron de nombre para darle todo el enfoque a Metal Gear Solid V: The Phantom Pain, y la situación fue empeorando hasta el punto en el que le prohibieron a Hideo Kojima recoger sus premios en PlayStation Awards en Japón y The Game Awards en California.
El segundo capítulo de la triste historia entre Kojima y Konami se dio cuando Guillermo del Toro dio por finalizado el proyecto colaborativo llamado Silent Hills… hasta la fecha nos duele. Aunque otros juegos inspirados en esta premisa han salido a la luz, nada nunca se comparará a la emoción que sentimos al ver a Guillermo del Toro, Hideo Kojima y Norman Reedus trabajando en el mismo retorcido título de terror.
Después de cancelar Silent Hills, se volvió oficial que Konami, al igual que Sega, volcaría sus desarrollos por juegos de móviles y máquinas de pachinko. Como premio de consolación prometió que seguiría produciendo juegos de Metal Gear, por ejemplo, además de que nos preguntaron qué franquicia de la compañía nos gustaría ver de vuelta. El resultado es un juego de Bomberman para móviles… ¿algo es algo, o no aplica?
Es de aplaudir el éxito comercial del que ha gozado PlayStation 4 este año, pero hay que aceptar que todo fue a base de una inteligente y astuta campaña de mercadotecnia, misma que después de dispersarse el confeti y el hielo seco, muchos se dieron cuenta que habían cosas no tan padres escondiéndose detrás.
E3 2015 fue el inicio de una carrera de PlayStation por evangelizar su consola a base de promesas y sueños imposibles cumplidos. Comenzaron el tren con Shenmue III, The Last Guardian y Final Fantasy VII Remake, de los cuales uno resultó ser una campaña de Kickstarter, otro terminó mareándonos sin fecha exacta de salida y el último resultó ser finalmente un proyecto por partes. Posteriormente ocurrió Paris Games Week, The Game Awards y PlayStation Experience, donde descubrimos otros proyectos como Psychonauts 2 (también en crowdfunding), más retrasos para Uncharted 4: A Thief’s End, Ni no Kuni II: The Revenant King sin Studio Ghibli y sin ventana de lanzamiento y total ausencia del precio de PlayStation VR. Todo mundo aplaudiendo y corriendo a comprar su consola pero, ¿y las exclusivas?, ¿y los lanzamientos?
Mientras tanto Xbox One con Forza Motorsport 6, Ori and the Blind Forest, Rise of the Tomb Raider, Halo 5: Guardians y Gears of War Ultimate Edition haciendo la lucha porque les hagan caso.
En 2014, Middle-earth: Shadow of Mordor se llevó el premio al peor port por su versión de PlayStation 3 que corría como a dos cuadros por segundo, por estar reducido en contenido y tener en general un performance terrible. Este año el premio se fue de nuevo a Warner Bros. Interactive Entertainment por el port de Batman: Arkham Knight a PC, mismo que tenía tantos errores, bugs y glitches que lo tuvieron que retirar de las tiendas digitales y regresarle el dinero a los consumidores. Meses después regresó sin mucha suerte, y hasta la fecha es un juego roto. Lastima por la alianza con NVIDIA y la promoción en la que te regalaban el juego como incentivo para que compraras una tarjeta gráfica.
Una noticia que conmovió a todos, independientemente de si fueran prensa, consumidores o desarrolladores, definitivamente. Las condolencias del mundo entero fueron enviadas a las oficinas de Nintendo en Kyoto y al a familia de Iwata, quien marcó una huella en la industria que nunca será olvidada. Si de por sí se sintió su ausencia en el Nintendo Digital Event, en el futuro se sentirá mucho más en todo el medio.
A Warner Bros. Interactive Entertainment no le fue tan bien en cuestión de ports, pues si hablamos de Batman Arkham Knight en PC no podemos mencionar de muchas cosas buenas, y pasó lo mismo con Mortal Kombat X para consolas de generación pasada. Como no se pudieron cumplir los estándares de calidad tuvieron que cancelar el proyecto, una lástima.
Para dar oficialmente el carpetazo a la pasada generación de consolas estuvo Call of Duty: Black Ops III, juego que en PlayStation 3 y Xbox 360 luce completamente diferente, con mapas completamente distintos a los originales y sin la opción de jugar la campaña. Desde entonces y hacia adelante serán muy contados los casos en los que veamos juegos saliendo en consolas de generación pasada, sin contar obviamente los FIFA y demás títulos de deportes.
¡Resolución dinámica mis polainas! Eso de que el juego te esté brincando de pseudo Full HD a 900p o hasta menos on-the-go son aberraciones que no deberían permitirse en la industria de los videojuegos. Además, la decisión de quitarle el split-screen a un título que representaba un estandarte de la práctica no le hizo nada bien en cuestión de crítica. No se vayan con la finta, es buen juego, pero 343 Industries dejó mucho que desear.
Claro que tuvimos grandes momentos que hicieron al 2015 muy emocionante, sobre todo si lo comparamos al año pasado en cuestión de lanzamientos fuertes. Aún así, eventos como los mencionados en este artículo son los que definen también a la industria y el curso que va tomando, por lo que es indispensable tomarlos en cuenta al momento de recapitular por donde va.
