La Comisión Europea ha solicitado documentos a X (red social antes conocida como Twitter) que expliquen el funcionamiento del algoritmo interno que utiliza la plataforma como parte de una investigación en el marco de la Ley de Servicios Digitales (DSA por su nombre en inglés). Específicamente, estas medidas están dirigidas al sistema de recomendaciones de la plataforma y forman parte de un procedimiento formal iniciado el 18 de diciembre de 2023. La DSA es una normativa de la Unión Europea diseñada para regular los servicios digitales y crear un entorno en línea más seguro y transparente. Fue adoptada para abordar los desafíos y riesgos asociados con las plataformas digitales y garantizar que respeten ciertos estándares y responsabilidades.
Henna Virkkunen, vicepresidenta ejecutiva para la soberanía tecnológica, seguridad y democracia, declaró que están avanzando para asegurar que X cumpla con las obligaciones de la DSA. El objetivo es garantizar que todas las plataformas en la UE respeten la legislación, haciendo que el entorno en línea sea justo, seguro y democrático para todos los ciudadanos europeos.
La petición a X consiste de tres partes. Primero que todo, la Comisión solicito que se le proporcione documentación interna sobre los sistemas de recomendación de la plataforma y cualquier cambio reciente realizado a estos, antes del 15 de febrero de 2025. Segundo, emitirán una orden de retención para que la plataforma conserve documentos internos e información sobre futuros cambios en el diseño y funcionamiento de sus algoritmos de recomendación, desde el 17 de enero de 2025 hasta el 31 de diciembre de 2025. Por último, solicitarán acceso a ciertas APIs (conjuntos de reglas y protocolos que permiten que diferentes aplicaciones de software se comuniquen entre sí) comerciales de X para realizar una investigación directa sobre la moderación de contenido y la viralidad de las cuentas.
Hasta el momento, X no ha hecho ninguna declaración al respecto de estas nuevas propuestas, pero podemos asumir que estarán dispuestos a cooperar con la Comisión, ya que, de no aceptar estas solicitudes, podrían poner en riesgo el continuo funcionamiento de la red social en Europa.
Vía: Comisión Europea
