Para nadie es un secreto que el ambiente político de Estados Unidos ha cambiado drásticamente en el último lustro y que varios temas ahora deben tocarse con mucho cuidado. Esto es un problema para Rockstar Games.
En una entrevista que Dan House, co fundador de Rockstar Games, dio a GQ con miras al estreno de Red Dead Redepmtion 2 el próximo 26 de octubre, sobresalió que House mencionara lo incómodo que puede ser desarrollar un juego como Grand Theft Auto cuando el poder político está en manos de los progresistas liberales o de los conservadores intensos, pues ambos pueden ser muy iracundos.
Y no es que el problema sea sólo la administración actual de Trump, pues los demócratas fueron implacables en su momento con el trabajo de Rockstar. Recordemos que Hillary Clinton, una de los pilares de este partido y pieza fundamental de la política estadounidense a inicios del siglo XXI, criticó fuertemente a Rockstar luego de los eventos relacionados con el contenido sexual oculto que conocimos como “Hot Coffee”. Esa fue una dura prueba de la que House admite que no habría podido salir sin la ayuda de su hermano, Sam Houser, quien en ese momento era el productor ejecutivo, con quien soportó hombro a hombro las intensas presiones que recibieron por parte del gobierno de Estados Unidos.
Y aunque ahora son una de las compañías con mayor éxito en el ramo de los videojuegos, no son inmunes a la opinión pública y mucho menos a la política, fuerzas que ahora tienen mucho más poder que hace diez años. Y para quienes gustan de hacer sátiras y humor negro, sea cual sea el medio en el que se publiquen o expresen, estos son tiempos difíciles.
Tal vez por eso sea mejor para Rockstar Games enfocar sus historias en un ambiente del pasado, donde pueden tener más libertad, que en un escenario contemporáneo donde los temas raciales, étnicos, políticos e ideológicos sean más fáciles de relacionar con una realidad que no admite crítica alguna.
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Fuente: GQ
